VALÈNCIA. (EP) El PSOE plantea "solidaridad" entre "nacionalidades y territorios" de cara a establecer el nuevo financiación autonómica, al tiempo que pide "lealtad institucional" entre administraciones y reclama que la "capacidad fiscal" de los territorios no condicione la "equidad" de acceso a los servicios públicos. Los socialistas quieren "dejar fuera la confrontación partidista" este asunto y por ello "invitan" a todos los partidos, sobre todo a los de implantación estatal, a "definir una posición común".
Estas son las conclusiones que ha emitido hoy el PSOE después del encuentro que han mantenido los presidentes autonómicos socialistas con la dirección del partido, representada por su número dos, Adriana Lastra y por el secretario de Política Autonómica, el presidente extremeño Guillermo Fernández Vara además del secretario de Organización del Partido, Santos Cerdán y las ministras de Hacienda, María Jesús Montero y de Política Territorial, Isabel Rodríguez.
Un encuentro previo al convocado por el presidente gallego, el 'popular' Alberto Núñez Feijóo, para el próximo 23 de noviembre en Galicia con el objetivo de hacer un frente común entre las regiones afectadas por la despoblación, y al que tienen intención de asistir algunos presidentes socialistas.
En el comunicado emitido por Ferraz se invita a todas las fuerzas políticas, "especialmente" a aquellas con implantación a nivel nacional, a trabajar con honestidad en la definición de una posición común, "dejando fuera la confrontación partidista" con el fin de contribuir a aprobar una reforma del vigente Sistema de Financiación Autonómica.
Un nuevo sistema, señalan, que permita a todas las Comunidades Autónomas y a las ciudades de Ceuta y Melilla atender las necesidades y satisfacer las expectativas de la ciudadanía.
La dirección del PSOE ha constatado este viernes una vez más las diferentes posturas que separan a sus presidentes autonómicos en el debate sobre la reforma del sistema de financiación, y ha acordado con ellos que este asunto se aborde dejando a un lado la "confrontación partidista", es decir, asumiendo que hablen con otras comunidades gobernadas por otros partidos, como será el caso de la reunión que mantendrán en Galicia ocho regiones afectadas por la dispersión de la población, con el 'popular' Alberto Núñez Feijóo, como anfitrión.
La cúpula del partido ha reunido este viernes en Ferraz a los presidentes autonómicos socialistas para tratar de acercar posturas en este polémico debate, en el que existen intereses contrapuestos entre los propios socialistas. Conscientes de ello, han acordado hacer un llamamiento "a todas las fuerzas políticas, especialmente a aquellas con implantación a nivel nacional, a trabajar con honestidad en la definición de una posición común, dejando fuera la confrontación partidista".
Así lo han plasmado en un comunicado que la dirección del PSOE ha hecho público tras esta reunión de trabajo, en la que han participado, por parte de la Ejecutiva Federal, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero; la ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez; la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra; el secretario de Política Autonómica, el presidente extremeño Guillermo Fernández Vara.
En cuanto a los presidentes autonómicos, estaban el de Aragón, Javier Lambán; el de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; la de Baleares, Francina Argmengol; el de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig; el de Asturias, Adrián Barbón; la de La Rioja, Concha Andreu; y representantes de los gobiernos socialistas de Navarra y de Canarias, cuyos presidentes no han podido asistir.
Conscientes de la dificultad de encontrar una posición común, los asistentes han planteado la necesidad de seguir dialogando, pero sin acotar este debate al ámbito socialista. En este sentido, algunos presidentes han confirmado a su salida que por parte de la dirección no habido críticas a la cita promovida en Galicia por Feijóo, a la que están invitados los mandatarios de Extremadura, Castilla-La Mancha, Castilla y León, La Rioja, Asturias, Aragón y Cantabria.
"Se ha constatado la necesidad de que haya un dialogo fluido entre todas las Administraciones en el diseño de un nuevo modelo de financiación autonómica", asegura el comunicado emitido por el PSOE, en el que también se incluyen ya algunos de los "principios generales" que deberán inspirar la reforma.
En concreto, los socialistas plantean que la reforma debe guiarse por la "solidaridad entre nacionalidades y territorios que componen España, con el objetivo de lograr un desarrollo económico y social equilibrado desde el punto de vista territorial".
También defienden que haya "suficiencia financiera", en el sentido de que todas las comunidades cuenten "con los recursos que les permitan desarrollar las competencias que tienen reconocidas constitucionalmente y prestar los servicios públicos que asumen"; así como "autonomía financiera y corresponsabilidad fiscal, en coordinación con la Hacienda estatal".
Por otra parte, defienden "equidad en la prestación de servicios públicos para garantizar la igualdad de acceso de los ciudadanos y ciudadanas, con independencia del lugar donde residan". "La capacidad fiscal de los territorios no debe condicionar la equidad de acceso a los servicios públicos", avisan.
Por último, defienden "estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera para garantizar el sostenimiento del Estado del Bienestar", así como "lealtad institucional entre administraciones".
Tras el encuentro, que ha durado más de dos horas, el presidente de Castilla-La Mancha ha asegurado que se iba con una impresión "positiva en conjunto", porque han logrado una "primera conclusión" en este complicado debate: asumir que se trata de "un problema común en el que es importante que se impliquen la mayor parte de las fuerzas de España", y que "tiene que tener vocación de permanencia.
"Estamos de acuerdo en que hay que hablar entre todos. No escuchar o no hablar no soluciona nada. En el PSOE hay mucha permeabilidad a todas las opiniones, es un partido federal", ha defendido García-Page. "En este partido siempre han entendido que cada presidente tiene que poner delante a su tierra, es lo que vamos a hacer, no tiene discusión, se entiende en el PSOE, solo faltaría esto. El PSOE entiende que tiene que hablarlo con otros partidos", ha apostillado
Por su parte, el presidente de Aragón, Javier Lambán, también ha rehusado reducir el debate sobre la financiación autonómica a una cuestión de "partidos políticos", y ha defendido que es de "territorios". Por ello, ha abogado por seguir debatiendo y alcanzar un acuerdo entre las autonomías en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, una vez Hacienda presente su propuesta.
Asimismo, ha desvelado que los 'barones' autonómicos del PSOE también han abordado en esta reunión con la dirección del partido la manera en la que se abirtarán fondos extraordinarios en los próximos presupuestos generales del Estado. Eso sí, se ha hecho, según ha dicho, "en un ambiente de camaradería".
En cualquier caso, ha incidido en la necesidad de reformular el modelo de financiación autonómica y, ante esto, ha defendido la postura de los ochos presidentes que se reunirán en Santiago de Compostela de pedir que la reforma del sistema prime la dispersión de población.
"Son consideraciones justas, que se pague por el coste de servicio y no por habitante. Hay un modelo de país, un modelo que se tiene que definir de una vez por todas, para que se garantice que en todos los lugares de España exista igualdad", ha proclamado el dirigente socialista de Aragón.
Por su parte, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que está en el bloque de comunidades junto a Andalucía y Murcia que piden que prime el criterio de población ajustada, ha defendido la labor de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para "buscar puntos de encuentro y soluciones coyunturales".
Además, ha coincidido con sus homólogos de Castilla-La Mancha y Aragón en que esto es una cuestión que trasciende las formaciones políticas y ha apostado por una armonización para "la igualdad entre los españoles".
Sobre la reunión en Santiago de Compostela promovida por Feijóo, Puig ha reivindicado que los presidentes autonómicos "tienen capacidad para hacer lo que consideren" y ha señalado que "los partidos no dirigen las instituciones" y que no ha habido indicación alguna al respecto por parte de la dirección del partido.
Por último, el presidente de Asturias, Adrián Barbón, el último en salir de esta cita en Ferraz, se ha remitido a la posición emitida por la dirección del PSOE en una nota de prensa y ha pedido ver estos encuentros desde la "normalidad".
Militantes de Madrid, Aragón, Castilla La Mancha, Castilla y León, Galicia y Extremadura reclaman un sistema justo y multilateral