VALÈNCIA. (EP) Las terminales de contenedores del Puerto de València han desarrollado un proyecto piloto para abastecer de agua a los trabajadores portuarios, eliminando la utilización de botellas de plástico, una medida con la que se calcula que dejarán de circular alrededor de un millón de botellas de este tipo, según ha informado la Autoridad Portuaria en un comunicado.
Esta iniciativa medioambiental se enmarca dentro del proyecto 'No Plàstic', una campaña impulsada por Ecoport Valencia, el Centro Portuario de Empleo de Valencia y Aportem-Puerto Solidario Valencia y, de la que forma parte activa la comunidad portuaria valenciana. CSP Iberian Valencia Terminal ha sido la primera en aplicarla y se espera que "en breve" se sumen el resto de las terminales.
El objetivo es eliminar de forma definitiva la utilización de botellas de plástico en los muelles con la instalación de máquinas dispensadoras de agua en la base de cada una de sus grúas portainer. Por el momento, y para testar su funcionalidad, se han instalado dos de estas máquinas en grúas del Muelle de Costa del Puerto de València.
Se trata de cabinas estancas y aisladas de elementos en suspensión, que preservan la higiene y salubridad del agua, y que permiten acceder a ella de un modo inmediato y limpio, al poder los trabajadores rellenar ellos mismos sus botellas reutilizables.
El colectivo portuario trabaja en multitud de ubicaciones, cosa que dificulta el suministro de agua y su mantenimiento a una temperatura adecuada. Hasta ahora, el estibador era el responsable de ir a por el agua, mientras que con esta iniciativa estará disponible en los puntos con una mayor concentración de trabajadores.
El objetivo final es que cada una de las 20 grúas con las que opera la terminal estén dotadas de este nuevo sistema de suministro.
Al proyecto que se ha puesto en marcha en CSP Iberian Valencia Terminal se sumarán las otras terminales del puerto para lograr la eliminación del alrededor de un millón de botellas de plástico al año en los muelles valencianos.
El colectivo de profesionales del sector logístico-portuario de València ha respondido de forma positiva a estas iniciativas. Desde el primer momento los trabajadores de todas las empresas vinculadas al puerto han dejado patente su "concienciación" en la puesta en marcha de medidas sostenibles, destacan desde la APV.
Hace ahora dos años que el proyecto 'No Plàstic' se concretó con un doble objetivo: por un lado, cambiar el paradigma en la utilización del plástico y sustituirlo por materiales reciclables; y, por otro, concienciar de la problemática generada por el uso abusivo de los materiales derivados el plástico.
Hasta el estallido de la pandemia, la comunidad portuaria de Valencia fue respondiendo con acciones concretas, eliminando la utilización de materiales de plástico en su día a día, y fijándose como horizonte dejar de utilizar más de un millón de botellas de plástico al año.
A pesar de la Covid-19, las empresas portuarias mantuvieron su compromiso y en los últimos meses, la tendencia general ha seguido siendo la eliminación total de plástico en máquinas de café y de agua, así como la supresión de las botellas de plástico y su sustitución por jarras y vasos de cristal.
Una de las soluciones más extendida ha sido la entrega a cada empleado de una botella y/o un vaso personalizado para que no se recurra a los recipientes de usar y tirar.
A esto hay que añadir la iniciativa del Centro Portuaria de Empleo de repartir casi un millar de botellas metálicas reutilizables entre el personal estibador.
Este nuevo sistema que se va a iniciar en la terminal CSP Iberian busca cumplir con todas las medidas de seguridad e higiene no sólo en lo referido a la COVID-19, sino también para mantener el agua en perfectas condiciones de consumo.
Se centrará en seis objetivos: aislamiento térmico y lumínico del agua; evitar la contaminación del agua por elementos en suspensión de los muelles; eliminación de los residuos de plástico; evitar la contaminación cruzada manteniendo en todo momento las condiciones higiénicas gracias a la utilización de pulsadores, que permiten no tocar la máquina; lograr un consumo de agua más eficiente; y alta resistencia para compensar movimientos y vibraciones de las grúas derivadas de la operativa portuaria.