- Manifiesto que el pasado día 1 de diciembre , con motivo del Día internacional del VIH y el sida, sacaba a la luz, junto la coordinadora estatal CESIDA, CALCSICOVA y sus entidades miembro, declaramos y recordamos:
✓Que hoy + que nunca no podemos permitir que esta crisis se cebe de nuevo en las personas más vulnerables y que ninguna persona se quede atrás. Para ello es imprescindible articular mecanismos de protección social que garanticen el acceso a recursos básicos para estas poblaciones.
✓Que hoy + que nunca necesitamos leyes que garanticen el acceso universal a la salud. Por lo que es necesario corregir el actual Real Decreto Ley 7/2018 para conseguir una legislación estatal plenamente inclusiva que reconozca el derecho a la atención sanitaria en igualdad de condiciones a todas las personas que viven en España y en nuestra comunidad, independientemente de su situación administrativa, su tiempo de residencia o la Comunidad Autónoma donde residan.
✓Que hoy + que nunca es necesario garantizar el acceso al diagnóstico del VIH y otras ITS a todas las personas que lo necesiten. En España las cifras de diagnóstico tardío siguen siendo inaceptablemente elevadas. Por ello, el diagnóstico precoz y el inicio temprano del tratamiento son las mejores herramientas para preservar la salud de las personas y prevenir la transmisión puesto que Indetectable es igual a Intransmisible.
✓Que hoy + que nunca es imprescindible afianzar los logros obtenidos y seguir avanzando en la implementación de las medidas recogidas en el PACTO SOCIAL POR LA NO DISCRIMINACIÓN Y LA IGUALDAD DE TRATO ASOCIADA AL VIH.
✓Que hoy + que nunca se debe asegurar el acceso a la profilaxis preexposición al VIH (PrEP), con la puesta en marcha de los servicios necesarios y la normal dispensación a todas las personas que la necesiten.
✓Que hoy + que nunca las entidades del Tercer Sector y las personas voluntarias somos imprescindibles para articular la respuesta al VIH y el apoyo a las poblaciones vulnerables por lo que se debe garantizar su sostenibilidad.
✓Que hoy + que nunca se debe garantizar una atención socio-sanitaria a las personas con VIH teniendo en cuenta sus singularidades, especialmente las de las mujeres y las personas mayores, entre ellas, muchos supervihvientes del sida.
✓Que hoy + que nunca es necesario un liderazgo político y compromiso económico que garantice la existencia y la sostenibilidad de la respuesta a la infección por VIH. El liderazgo pasa inevitablemente por el refuerzo político, de recursos humanos y económicos del Plan Nacional sobre el sida y sus homólogos autonómicos como organismos coordinadores de las políticas de prevención, asistencia e investigación relacionadas con el VIH y otras ITS.
✓Que hoy + que nunca es fundamental fortalecer el Estado del Bienestar. La sanidad, la educación, los servicios sociales y los servicios residenciales para las personas mayores deben estar garantizados para todos y todas. Se está viendo claramente durante este año y durante los casi cuarenta años de pandemia de VIH que la mejor garantía de que nadie se quede atrás, de asegurar la equidad y la justicia social, es a través de unos servicios públicos de calidad.
✓Que hoy + que nunca se deben exigir y garantizar campañas de prevención e información, con mensajes inclusivos y veraces en los medios de comunicación, ya que marcan la línea entre lo socialmente aceptado y lo no aceptado, transformando los prejuicios en empatía, la oscuridad en luz, haciendo visible lo invisible...
porque como bien sabemos, de lo que no se habla no existe, y lo que no existe, se margina.
✓Que hoy + que nunca es necesaria la inclusión de la educación afectivo sexual en el curriculum escolar, ya que en la actualidad la información que reciben nuestros jóvenes sobre VIH y otras ITS y las formas de prevenirlas sigue siendo escasa y muy variable. dependiendo, en la mayoría de los casos, de la voluntad de los centros. consideramos imprescindible que, desde la evidencia científica, se eduque a las nuevas generaciones en este sentido. creemos que la formación que se debe trasmitir tiene que estar basada en el respeto de los derechos humanos, la perspectiva de género y la diversidad.
No podemos dejar pasar la ocasión de mostrar nuestro agradecimiento a todas las personas trabajadoras de la salud que se están dejando la piel en esta crisis. Especialmente a las nuestras, a las trabajadoras y trabajadores de las Unidades de Enfermedades Infecciosas, para quienes seguimos pidiendo el reconocimiento de su especialidad.