BOLONIA / ENVIADO ESPECIAL. La Generalitat Valenciana pretende impulsar los créditos con los que el Institut Valencià de Finances trata de aportar oxígeno al sector azulejero. Para ello, el president Carlos Mazón ha anunciado este lunes en Bolonia que el IVF aumentará en diez puntos porcentuales la cantidad de dinero a fondo perdido de las diferentes líneas a las que el sector cerámico puede optar.
Con ello, el Gobierno valenciano estima que puede aportar "entre 12 y 15 millones" adicionales a los que estaban previstos. Y solo de aquí a final de año, ha indicado Mazón en Cersaie, en el que es su primer viaje institucional. De hecho, para que la ayuda pueda ser inmediata, esta bonificación se activará "con carácter retroactivo", de forma que las azulejeras que ya han firmado algún crédito con el IVF, también se vean recogidas.
En concreto, la línea circulante Reactiva Feder pasará a estar bonificada del 12% al 22%, mientras que la inversión Reactiva Feder pasa del 20 al 30%. En el caso de Gran Empresa Industrial, el préstamo circulante pasará del 5 al 15% y el de inversión del 10 al 20%. Todas las operaciones deberán cerrarse antes del 31 de diciembre al ser ayudas sujetas al marco temporal europeo, han concretado desde la Generalitat.
Con esto, además, lo que pretende la Generalitat es formalizar nuevos créditos, de forma que el sector se pueda beneficiar de "los más de 100 millones disponibles" en las diferentes líneas del IVF, señala Mazón. Y es que, hasta el momento, tan solo se han dispuesto 14,7 millones de euros pertenecientes a "11 operaciones", concreta el jefe del Consell. El objetivo, ha señalado Mazón en los pabellones de Bologna Fiere, es "multiplicar por tres o por cuatro" las operaciones, de forma que se puedan suscribir "entre 40 y 50".
Por parte del sector, el presidente de la patronal azulejera Ascer, Vicente Nomdedeu, señala que esta es "una medida buena y acertada y será extraordinaria si se pone en marcha con la celeridad que ha anunciado el president". No en vano, esta aportación financiera puede suponer un respaldo "para que las empresas podamos atender el circulante y podamos llegar a los 60 días de pago que nos exige la ley crea y crece" para optar a las ayudas estatales.
Mazón también ha aprovechado la visita a la feria boloñesa para "denunciar desde Italia la falta de atención del Gobierno de España" con el sector, dado que da "la callada por respuesta" y todavía no ha aportado ayudas destacables.