VALÈNCIA (EP). Los embalses de la cuenca del Júcar han perdido durante la última semana 24 hectómetros cúbicos y se sitúan al 53,8 por ciento de su capacidad, mientras que los del Segura han perdido otros 12 hectómetros y se sitúan al 35,2%, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico recogidos por Europa Press.
En concreto, en la cuenca del Júcar se almacenan 1.531 hectómetros, lo que supone el 53,8 por ciento de una capacidad total de 2.846, frente a los 1.461 del año anterior. Por su parte, la cuenca del Segura tiene un total de 401 hectómetros cúbicos de agua almacenada, el 35,2% de los 1.140 de capacidad total, frente a los 454 que almacenaba hace un año.
A nivel nacional, la reserva hídrica ha vuelto a disminuir esta semana tras perder 462 hectómetros cúbicos, lo que supone el 0,8 por ciento de su capacidad total, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, que indica que en este momento guardan 19.209 hectómetros cúbicos (hm3) de agua de los 56.136 hectómetros cúbicos de capacidad total.
Se trata de la cifra más baja en 28 años, ya que desde 1994 no se recuerda una reserva hídrica similar en esta misma semana del año, la número 37. Entonces, los embalses estaban al 34,91 por ciento, e incluso, un año más tarde, en 1995, en esta misma aún guardaban más bajos, al 26,98 por ciento de su capacidad total. Son las cifras más bajas desde que hay registros.
En comparación con la situación de hace un año, los embalses almacenan ahora 3.659 hectómetros cúbicos menos (un 16%) y la diferencia respecto a la media del decenio es de 9.908 hectómetros cúbicos menos, lo que representa una diferencia del 34,02 por ciento.
Por ámbitos, se mantienen por encima de la mitad de su capacidad total los embalses del Cantábrico Oriental, que está al 69,9 por ciento; Cantábrico Occidental, al 57,5 por ciento; Galicia Costa, al 54,8 por ciento; las cuencas internas del País Vasco, que están al 71,4 por ciento y Tinto, Odiel y Piedras, al 65,9 por ciento.
Por su parte, guardan menos de la mitad de agua de su capacidad los embalses del Miño-Sil, que están al 46,7 por ciento; el Duero, al 35,8 por ciento; Tajo, al 36,7 por ciento; la cuenca Mediterránea Andaluza está al 40,5 por ciento; Segura, al 35,2 por ciento; Júcar, al 53,8 por ciento; el Ebro, al 39,5 por ciento y las cuencas internas de Cataluña al 38,3 por ciento.
Las tres cuencas en peor situación son Guadiana, que está al 23,9 por ciento; Guadalete-Barbate al 24 por ciento y Guadalquivir, que está al 21 por ciento.
Esta semana, las precipitaciones afectaron a la vertiente Atlántica pero fueron muy escasas en la vertiente Mediterránea. La máxima se ha producido en Santiago de Compostela, donde se han recogido 58 litros por metro cuadrado.
Los datos reflejan que la reserva guarda en este momento 3.659 hectómetros cúbicos menos que hace un año, lo que supone un porcentaje del 16 por ciento y un 34,02 por ciento menos que la media del decenio, con 9.908 hectómetros cúbicos menos.
En este contexto, los últimos datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) que incluyen el periodo 1 de octubre de 2021-6 de septiembre de 2022, indican que en este año hidrológico, que terminará dentro de tres semanas, ha llovido un 26 por ciento menos de lo normal.
En concreto, desde el 1 de septiembre de 2021, cuando se estrenó el actual año hidrológico, hasta el 6 de septiembre, ha llovido un valor medio de 445 litros por metro cuadrado, cuando el valor medio normal correspondiente a ese periodo son 603 litros por metro cuadrado.
Por zonas, ha llovido por debajo de los valores normales en gran parte de la Península y de Canarias, excepto en una franja del Levante, que va desde el sur de Almería hasta el delta del Ebro, en puntos de la cornisa cantábrica, en las Pitiusas y en el noreste de la isla de Mallorca.
Entre el 31 de agosto y el 6 de septiembre, las precipitaciones afectaron a puntos de Galicia y de la cornisa cantábrica, al cuadrante nororiental de la Península, a las islas Canarias más occidentales, a zonas del archipiélago balear y en menor medida a la mitad este de Andalucía.
En ese periodo se acumularon más de 10 litros por metro cuadrado en la franja oeste de la comunidad gallega, en Cataluña y el norte de Huesca, en las zonas de mayor relieve de las islas de La Palma, Tenerife y La Gomera y en este de las islas Baleares de Mallorca y Menorca.