Ante las dificultades para viajar hasta su ciudad de origen… que su sitio favorito de allí venga para aquí. 8 creativos de València cruzan el camino. Hágase.
VALÈNCIA. Elige aventura. Una acción solidaria al servicio de aquellos seres que sobre la faz de la urbe imaginan aquellos días en sus ciudades de origen. Valencianos de afuera. De Montevideo a Londres, de Buenos Aires a Caracas. Con la incerteza de cuándo poder volver. Desmontando piezas, se les pidió durante la semana que fantasearan con aquella porción de allí que se traerían aquí. ¿Y dónde la ubicarían?
Una València altamente subjetiva. Un hecho excitante para promotores inmobiliarios de nuevo cuño. Una partida al SimCity. Aviso para los gestores urbanos: es solo una fantasía, ¡no intenten hacer esto en su ciudad! Ya sabemos lo que pasa cuando te dispones a hacer un Montecarlo en la plaza de tu urbe.
Victoria Moyano es comunicadora musical
De Buenos Aires
Un deseo: Poner el Obelisco al lado del Micalet
"La nostalgia ahora mismo me empuja a decir que lo me llenaría el corazón es encontrarme con el “Cilindro” en medio de la Plaza del Ayuntamiento, porque el alma de nuestro estadio de Racing Club de Avellaneda clama a lucha y ganas de siempre salir adelante, pero en caso de que no entrara, sin dudarlo colocaría el “Obelisco” al ladito del Micalet, para que le haga compañía, y entre tangos y recuerdos porteños se alegren la vida mientras nos miran desde ahí arriba”.
Mike Hall, ilustrador de mapas
De Londres
Un deseo: Ubicar la colina de Primrose Hil en Viveros
“De Londres me encantan las hermosas vistas del horizonte que se puede ver desde todas las colinas de la ciudad, como Hampstead Heath, Primrose Hill, Greenwich Park o Richmond Park. Como València es muy plana y, a menos que subas un edificio alto, no hay muchas oportunidades de disfrutar de su horizonte, escogería la colina de Primrose Hill y la colocaría en el centro de los Jardines de Viveros. Para mí sería un lugar perfecto para subir y desde alli arriba, sentado en la cima poder divisar, dibujar y fotografiar las vistas de la ciudad”.
Berch Kotogian, diseñador
De Montevideo
Un deseo: Llevar el Museo Nacional de Arte Visuales de Montevideo junto al Palau de la Música
“Hay un espacio de Montevideo que le gana a todos. El Museo Nacional de Artes Visuales. Está ubicado en el barrio Parque Rodó. El museo y no solo el museo sino la particular cafetería ubicada en su jardín principal siempre ha sido un espacio de encuentro y de reuniones con mis amigos y esposa. Lo pondría dentro del Turia, cerca del Palau, para que no pierda su característica de estar rodeado de un espacio natural”.
Claudia Alfonso, comunicadora cultural
De Caracas
Un deseo: Plantar el pulmón verde Waraira Repano en el nuevo cauce del Turia
“Desde la memoria nostálgica, me encantaría tener en València la cordillera de la costa de Caracas, el pulmón verde Waraira Repano (Parque Nacional el Ávila). Localizarlo en la ciudad puede destruir la naturaleza de la misma, pero tal vez en el nuevo cauce del río Turia podemos ubicarla”.
Andrés Sbrancia, director creativo
De Buenos Aires
Un deseo: Llevar la Plaza Irlanda a Orriols
“El lugar sería la Plaza Irlanda, que es la de mi barrio en Buenos Aires, situada en el límite entre Caballito y Flores, donde me llevaba mi abuelo a jugar a la pelota cuando era chiquito, que conserva la misma calesita de esa época, y donde me juntaba con los pibes de grande después de alguna pintura o a tomar unos mates. Es un lugar que me hace sentir en casa. Lo ubicaría en el descampado de atrás de mi actual casa en Orriols, en la Senda de Orriols, así tengo un pedacito de Baires en Valencia”.
Corina Preciado, comunicadora cultural
De Guadalajara, México
Un deseo: Levantar la Casa Iteso de Luis Barragán en Nazaret
“Si pudiera transportar un espacio de México a València sería la Casa Iteso Clavigero, ubicada en Guadalajara y proyectada por el arquitecto Luis Barragán, ganador del Premio Pritzker. (...) Admiro su sentido de la sencillez, el juego de luces y colores en sus construcciones, la recuperación de los materiales locales y la importancia que tienen los jardines y las fuentes en sus trabajos. Es un remanso de paz en medio del caos citadino. (...) La colocaría en el barrio de Nazaret, porque además de ser una finca con un gran valor estético, histórico y patrimonial, cuenta con una cafetería, es la sede de exposiciones, presentaciones de libros, conferencias, y creo que justamente los espacios menos favorecidos de la ciudad son los que deberían de contar con faros para la creatividad.”
Los Arcos de Alpuente es considerado Yacimiento Arqueológico y declarado Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de Monumento