Entrevista a Carlos alfonso, portavoz en la comunitat de la patronal del gran comercio anged

"El pacto de los horarios es histórico para el comercio valenciano, nadie debería interponerse"

18/09/2017 - 

VALÈNCIA. Tras años de desencuentro y de batalla judicial, la Asociación Nacional de Grandes empresas de Distribución (Anged) -representante de los intereses de firmas como Carrefour, El Corte Inglés o MediaMarkt- han logrado ponerse de acuerdo con las patronales del pequeño comercio (Cecoval y Covaco) y con la de supermercados (Asucova) para establecer los domingos y festivos de libre apertura en la Comunitat.

El acuerdo contempla que la gran distribución ceda días de libre apertura en las grandes ciudades y zonas de libertad total -donde pasarían de los actuales 63 festivos a los alrededor de 40 que se concentran entre el 15 de junio y la primera semana de enero-. A cambio, en las zonas no turísticas se pasaría de 10 a 12 festivos abiertos al año.

El pacto todavía debe ser ratificado en el Observatorio del Comercio de la Comunitat, donde el Consell quiere ratificarlo sin votos en contra. Por ello Carlos Alfonso, portavoz de Anged en la autonomía, se esfuerza en subrayar la magnitud del consenso alcanzado por el sector y confía en que nadie se interponga.

 -¿Es histórico el pacto de festivos de apertura alcanzado por el comercio valenciano?

-Es histórico, y me atrevería a decir que hasta épico por lo que ha costado. Son muchos años en busca de un acuerdo como este. Ha habido un trabajo muy sensato por parte de las partes implicadas. Todos teníamos el conocimiento de que era ahora el momento, que tocaba ya un pacto porque los litigios no nos llevaban a ningún sitio. Los contrarios a la apertura en festivo no estaban logrando su propósito a través de esa vía y a nosotros nos estaba haciendo mucho daño la incertidumbre de que la administración pudiera descolgarse con algún decreto o alguna resolución que obligase a cerrar temporalmente las tiendas. Esto pesaba en el ambiente de todos, y es lo que ha permitido que busquemos y alcancemos ese consenso.

-En 2016 ya se materializó un pacto -en la ciudad de València- que entidades como Worten -miembro de Anged- no respetaron. ¿Está garantizado en esta ocasión que nadie vaya a hacer la guerra por su cuenta?

"Siempre puede haber francotiradores, pero es altamente improbable que se produzca un recurso a este pacto"

-Francotiradores puede haber siempre, pero no es previsible en este caso, porque ya nos hemos preocupado, lógicamente, de cerrar cada uno este pacto por su parte con sus respectivas asociaciones. Está bendecido por todas las juntas directivas. No tiene por qué darse esa circunstancia. Como bien sabes, una asociación no puede obligar a sus asociados, puede recomendar. No hay una garantía absoluta, pero sí un compromiso ratificado por todas las entidades de las asociaciones a través de sus juntas directivas. Es altamente improbable que se produzca un recurso por parte de nadie. Pero cabe destacar también que la firmeza de todo esto queda supeditada a la retirada de los recursos y a que no se produzca ninguno con posterioridad a su entrada en vigor. Eso nos da mucha seguridad a la administración y al sector.

-¿Qué pasa con los grandes comercios que están fuera de Anged como Decathlon?

-Es cierto que ellos no están en nuestra asociación y podrían hacerlo, pero creemos, por las conversaciones que hemos tenido de manera indirecta, que lo aceptan, que lo ven un pacto razonable. Conviene subrayar una cosa: Aquí donde estaba el quid de la cuestión era en las situaciones discriminatorias. El pacto de València -el de las dos zonas- se rompió precisamente porque hubo centros comerciales y establecimientos que se sintieron discriminados, entre ellos Decathlon. En este caso no se va a dar porque es una solución para todos por igual en la ciudad de València. No creo que haya nadie que se vaya a sentir discriminado, es lo bueno de este acuerdo, entre otras cosas.

Lo que también nos ha llevado a nosotros a aceptar esta propuesta es el hecho de que se vaya a fijar de antemano en toda la Comunitat el periodo temporal en el que se va a abrir, algo que nos evitará esas reuniones maratonianas para ponernos de acuerdo en los festivos de apertura de cada año. Ahora sabemos que serán los de Semana Santa y cuando haya acumulación de festivos. Esto supone para nosotros una gran garantía, creo que es lo que más ha pesado en nuestra asociación: la certeza de que vamos a tener un gran periodo de estabilidad para poder elaborar presupuestos y saber que se van a cumplir, para poder fijar políticas de empleo y saber que se van a cumplir, para poder comunicar con claridad a nuestros clientes cuándo van a estar abiertas las tiendas en festivo y cuándo no.


-¿Convence este pacto a los centros comerciales del extrarradio, que seguirán abriendo menos que los de la ciudad?

-Los centros comerciales de las periferias no pueden tener ningún argumento para quejarse porque mejoran con todos los cambios que se introducen: por un lado ven incrementarse de 10 a 12 los festivos de apertura en toda la Comunitat, en las zonas no turísticas; en segundo lugar su competencia en las capitales de provincia cerrará más festivos; y en tercer lugar porque ganan, como el resto, la certeza de saber qué días se va a abrir. Yo creo que ganan claramente y que no hay espacio para que recurran.

-¿Y qué hay de los sindicatos? ¿Van a aceptar los trabajadores un pacto que todavía está lejos de sus aspiraciones y de lo que les prometió la izquierda en las elecciones municipales y autonómicas?

-Sin duda este pacto es una mejora sustancial para los trabajadores del comercio. Su principal reivindicación mejora, que es la de mejorar la conciliación laboral y familiar de los trabajadores. Lo hace, además de por este acuerdo, por el convenio colectivo que firmaron en su momento con las grandes superficies. En conjunto van a ver reducidos a más de la mitad los días que tenían de obligado cumplimiento en domingos y festivos. Pasarán a un máximo de 14 días de trabajo en domingos y festivos al año. Es una mejora sustancial cuando actualmente tienen unos 31 días. Yo confío en que los sindicatos sean capaces de transmitir a sus afiliados que esto es una mejora sustancial en sus condiciones laborales. No me atrevo a aventurar que lo van a apoyar porque sé que en su ADN está la lucha contra la apertura en cualquier domingo, pero sí creo que hay razones para que se abstengan para no poner palos en las ruedas, tal y como dijo un dirigente sindical al apoyar el anterior pacto de València.

-¿Y los ayuntamientos? ¿Esa mayor restricción que quieren negociar las grandes ciudades puede ser una amenaza para el pacto autonómico?

"Confío en que los sindicatos sean capaces de transmitir a sus afiliados que el pacto supone una mejora sustancial de sus condiciones laborales"

-Yo creo que no. La norma no tiene que pasar por los Consejos Locales de Comercio. El órgano consultivo de la Generalitat es el Observatorio de Comercio de la Comunitat, que es donde lo estamos negociando. Es verdad que se ha introducido una cautela para que los ayuntamientos, dentro de los términos pactados, puedan modificar algo. Pero esto, que tendría que ser por unanimidad para evitar la imposición de unos sobre otros, se produciría completamente al margen de este acuerdo autonómico, sin ponerlo en riesgo. En cualquier caso, yo creo que no hay que perder de vista que este pacto es histórico para el comercio valenciano, que el asunto de las aperturas ha sido el foco de división que nos ha impedido constituirnos como un sector fuerte. Siempre hemos dicho que superado este debate podríamos constituirnos como un potente sector empresarial y patronal y tener la influencia que merecemos en la Comunidad Valenciana. De ahí el esfuerzo que hemos hecho por salir del fango de los horarios comerciales.

-Si algo o alguien impidiera que se materializara este acuerdo ¿qué habrían perdido?

-Yo comprendo que desde fuera sea difícil apreciar la magnitud de este acuerdo, pero los que llevamos varios años en esta lucha somos conscientes de que se ha hecho un esfuerzo importantísimo por parte de todos, los pequeños, los medianos, los grandes, los supermercados... se ha hecho un esfuerzo importantísimo por aproximarnos, hemos cedido todos, y yo creo que son muy poquitos los actores que, con una representación desigual,  están manifestando alguna discrepancia. Por eso creo que es importante que entre todos sumemos, que nos demos cuenta de la importancia de cerrar este acuerdo y consigamos que Ayuntamientos, el resto de asociaciones, los consumidores, las cámaras de comercio... que todos valoren este acuerdo alcanzado y den un paso hacia delante. Se trata de un pacto histórico para el comercio valenciano, y yo creo que nadie debería interponerse. Va a redundar en beneficio de todos: los comerciantes ganaremos peso y estabilidad, los empleados trabajarán menos festivos y habrá un periodo más estable de trabajo, y los consumidores verán clarificadas las aperturas, que hasta ahora han sido una montaña rusa.


-¿Incorporar el acuerdo a la Ley de Comercio es la fórmula idónea para blindarlo?

-Así lo creemos. Es el modo en el que se nos ha planteado desde la conselleria. Se va a tramitar por el procedimiento de la ley de acompañamiento de los presupuestos de la Generalitat para modificar la ley de horarios comerciales. Se modifican una serie de aspectos que articulan los puntos de acuerdo alcanzados. Ahora estamos pendientes de que nos trasladen el texto del borrador para ratificarlo en el Observatorio del Comercio antes de que se dé traslado a Les Corts.

-¿Se esperaba alcanzar un pacto de esta magnitud con Rafa Climent y Natxo Costa al frente del área de comercio, con quienes tanto y tan fuerte chocaron al principio de la legislatura?

-Yo, personalmente, valoro muy positivamente al conseller, a Rafla Climent, porque desde el principio ha buscado el consenso pese a ser partidario de favorecer al pequeño comercio. Él apostó por algo que ha sido muy importante: el equilibrio, que todos los formatos comerciales convivan en equilibro. Este ha sido uno de los elementos más importantes para llegar a este acuerdo. Climent no ha querido arrasar con un modelo de comercio en detrimento de otro.

-No obstante, Compromís sigue peleando en el Congreso para que se elimine la obligación de las grandes ciudades de tener una Zona de Gran Afluencia Turística (ZGAT) -las que acogen la apertura en festivo-. ¿Si lo consiguen y se eliminaran en València y Alicante no habrán cedido y retirado sus recursos para nada?

Iniciativa en el Congreso: "No creemos que Compromís vaya a acudir a un subterfugio tan vil para deshacer un pacto de estas características"

-Yo creo que si se respeta este pacto no tendrá ningún sentido esa Proposición de Ley de Compromís, al menos en su aplicación a la Cominitat Valenciana. Pero tampoco sería incompatible, porque que deje de ser obligatorio tener una ZGAT no implica que las eliminen, porque con este pacto se regulará por ley en toda la Comunitat Valenciana. València y Alicante pasarán a ser Zonas de Gran Afluencia Turística temporales. En Anged no contemplamos esta posibilidad, no creemos que después de todo el esfuerzo, de que se llegue a plasmar con rango de ley y, previsiblemente, con el respaldo de todos los partidos políticos, se acuda a un subterfugio tan vil como ese para deshacer un pacto de estas características. No creo no: estoy seguro de que eso no se dará. Estoy seguro.

-Amazon va a seguir abriendo 24 horas al día 365 días al año...

-Sí, no lo podemos evitar (risas). Ello prueba la cesión que hacemos con este pacto. Nosotros siempre hemos defendido las aperturas precisamente por eso, por ponernos lo más a la altura posible del auge y la fuerza del comercio online. Pero hemos cedido en beneficio del consenso.

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