VALÈNCIA (EP). El ministro de Inclusión, Migraciones y Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha asegurado que se ha enterado este mismo jueves por los medios de comunicación de que se iba a celebrar una rueda de prensa para ofrecer detalles sobre el Ingreso Mínimo Vital junto al vicepresidente segundo de Derechos Sociales, Pablo Iglesias.
En una entrevista en la Cadena SER, recogida por Europa Press, Escrivá no ha confirmado la comparecencia para presentar esta medida que fue anunciada este miércoles por la vicepresidencia segunda. "Entra dentro de lo posible", ha respondido sobre la posibilidad de que sea este mismo jueves.
Con todo, el ministro ha insistido en que esa comparecencia no está agendada y ha explicado que "estos días los calendarios son muy flexibles y están muy abiertos". "Estamos trabajando a marchas forzadas", ha añadido, para después señalar que todavía falta por "cerrar algún fleco".
En este contexto, Escrivá ha explicado que "cuando" el Ejecutivo tenga una "fecha cerrada" para la presentación de la norma lo anunciará, aunque ha anticipado que no será antes de unas "semanas". "El anuncio va a ser pronto, inminente. Lo importante es cuándo podremos sacar esa normal al Consejo de Ministros", ha aseverado.
Así, el titular de Inclusión, Migración y Seguridad Social ha señalado que su departamento todavía está "cruzando datos con la Agencia Tributaria" y con la propia Seguridad Social para "aquilatar definitivamente el número de hogares que se van a ver beneficiados" con este ingreso.
"Es importante tener claro hasta donde podemos llegar, los colectivos y los hogares", ha continuado Escrivá, que ha explicado que esta prestación llegará a más de un millón de hogares, la mitad de ellos con niños. Además, en torno a un 10% de ese total serán familias monoparentales.
Preguntado sobre si siente presión por parte de los ministros de Unidas Podemos para que se acelere la implementación de esta medida, Escrivá ha reconocido que no hay presión sino "un acuerdo dentro del Gobierno" respecto a lo urgente de una medida destinada a las personas "directamente afectadas por la paralización de la actividad".
Así, tras ser cuestionado por el anuncio que la Vicepresidencia segunda transmitió a los medios sobre la comparecencia de Iglesias y el propio Escrivá, el ministro ha insistido: "No me siento presionado en ningún caso con esa información, es consistente con lo que estamos hablando y acordando. Necesitamos semanas no para anunciarlo, sino para materializarlo".
Por otro lado, Escrivá se ha referido a la vigencia de esta renta y ha explicado que no se trata de una "medida puente", sino que será algo "permanente". "No tiene sentido que sea una medida puente porque una vez que hacemos este esfuerzo lo tenemos que hacer sea puente o no", ha asegurado.
En cuanto a si hay dinero para asumir esta medida, el ministro ha apuntado que "obviamente habrá un aumento de deuda pública extraordinario" que, "una vez" se vuelta al estado de normalidad, se "volverá a los niveles de déficit público previstos antes de que se produjera la crisis". "Se financiará acudiendo a los mercados de deuda", ha sostenido.
El vicepresidente segundo de Derechos Sociales, Pablo Iglesias, ha reconocido que todavía quedan reuniones con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de José Luis Escrivá para "terminar de definir todos los detalles" del Ingreso Mínimo Vital, después de que el departamento que dirige el líder de Unidas Podemos anunciara ayer que este mismo jueves iba a presentar la medida ante los medios de comunicación junto a Escrivá.
Así lo ha asegurado Iglesias en un mensaje en redes sociales que ha difundido después de que el ministro de Inclusión haya reconocido en una entrevista en la Cadena Ser que se ha enterado por la prensa de que este jueves iba a presentar esta nueva medida, que el Gobierno va a lanzar en mayo tras sellarse un acuerdo entre el secretario general de Podemos y el presidente Pedro Sánchez.
Esta prestación lleva siendo objeto de un intenso debate en el seno del Gobierno desde hace semanas, con Unidas Podemos presionando para sacarla adelante de forma urgente, aunque sea con un formato provisional, para paliar los efectos de la crisis del coronavirus, y los ministros económicos socialistas defendiendo un desarrollo más pausado de la medida, que ya estaba prevista en el programa de coalición.