MADRID. El gigante textil Inditex -conocido por sus marcas insignia Zara y Massimo Dutti- ha presentado sus resultados financieros correspondientes al tercer trimestre de su año fiscal, evidenciando un crecimiento del 6,7% en ingresos, con un total de 8.758 millones de euros. Si bien este crecimiento es menor al anticipado por analistas, el grupo ha mantenido un aumento significativo en sus ganancias, reportando un beneficio de 4.102 millones de euros en los primeros nueve meses del año fiscal, un 32,5% más que en el mismo periodo del año previo.
Este trimestre marca un cambio en la tendencia de Inditex, interrumpiendo una racha de diez trimestres consecutivos de crecimiento de doble dígito. Sin embargo, a pesar de esta desaceleración, el grupo informa un avance notable en las ventas del cuarto trimestre, con un aumento del 14% desde el 1 de noviembre hasta el 11 de diciembre. Este repunte se atribuye a la buena recepción de las colecciones de invierno por parte de los consumidores. La compañía destaca la ejecución exitosa de su modelo de negocio, señalando una normalización en las condiciones de la cadena de suministro y una mejora en el tipo de cambio eurodólar en comparación con el año anterior. Estos factores han contribuido al incremento del 15% en la caja neta de la empresa, que ha alcanzado los 11.480 millones de euros.
Inditex proyecta grandes oportunidades de crecimiento futuro, enfocándose en mejorar continuamente su propuesta de moda, optimizar la experiencia del cliente, priorizar la sostenibilidad y preservar el talento dentro de la organización. Para ello, la empresa está realizando inversiones estratégicas, esperando desembolsar alrededor de 1.600 millones de euros en inversiones ordinarias durante el 2023. Aunque su negocio en Estados Unidos muestra un buen desempeño, la empresa vislumbra grandes oportunidades de crecimiento en este mercado. Con estos resultados y perspectivas de crecimiento, Inditex reafirma su posición como líder en el sector textil, adoptando estrategias que apuntan hacia un modelo más sostenible y competitivo en un mercado global en constante evolución.
Por otro lado, el gigante textil Inditex se adentra en el mercado de prendas de segunda mano con su nueva plataforma: Zara Pre-Owned. La compañía ha lanzado este innovador servicio en 14 países europeos, uniéndose a la tendencia de ofrecer alternativas sostenibles. Esta iniciativa se alinea con los compromisos de Inditex hacia la sostenibilidad y la economía circular, un movimiento cada vez más relevante en el sector textil. Zara Pre-Owned es un servicio que permite a los usuarios comprar, vender, reparar y donar prendas usadas. Operando totalmente en línea, los usuarios pueden vender artículos de cualquier colección de Zara, con detalles precisos y fotos suministradas por el vendedor. Las transacciones son entre los clientes, y una vez se realiza la compra, el vendedor recibe una etiqueta para la recogida del producto por un proveedor logístico de Zara, facilitando así la entrega al comprador.
El enfoque de sostenibilidad se extiende más allá de la compra y venta: Zara Pre-Owned también ofrece servicios de reparación para prendas usadas, desde el reemplazo de botones hasta arreglos de costuras, realizados por proveedores locales. Además, la plataforma ofrece la opción de donar ropa usada, incluso de otras marcas, permitiendo a los clientes solicitar la recogida a domicilio para donar a entidades sin fines de lucro.
Este movimiento hacia la economía circular y la oferta de ropa de segunda mano no solo responde a la demanda de los consumidores, sino que también se alinea con las regulaciones de la Unión Europea (UE) sobre sostenibilidad y responsabilidad ambiental. La UE está impulsando reglamentos que exigen a la industria textil hacerse cargo de sus residuos, lo que ha llevado a grandes empresas como Zara a incursionar en este tipo de servicios.
La moda sostenible se está convirtiendo en un elemento esencial en la transformación del sector textil. A medida que la industria busca reducir su impacto ambiental, iniciativas como Zara Pre-Owned representan un paso significativo hacia un modelo más sostenible y circular. Este enfoque es clave en un momento en el que la moda es una de las industrias más dañinas para el medio ambiente, según datos de la UE, y busca una mayor responsabilidad en la gestión de sus residuos.
La tendencia de las acciones del grupo textil continúa en tendencia alcista en todos los plazos. El primer soporte se sitúa en los 37,41 euros, por lo que mientras que se mantenga por encima de dicho nivel, la predisposición es alcista a corto plazo con objetivo 39,69 euros, por lo que se pueden mantener en cartera. A largo plazo, para ver un cambio de tendencia se tendría que ver una pérdida de los 32,22 euros, nivel que está lejos de la cotización actual.
