MADRID, (EP). El especialista en alergología y médico del Hospital de La Vega de Murcia Juan Carlos Miralles ha detallado el protocolo a seguir por los profesionales cuando exista un cuadro grave de ataque asmático durante una charla con periodistas previo a su intervención en 'Nuevas fronteras en el tratamiento de las enfermedades alérgicas respiratorias', encuentro enmarcado en los cursos de verano que la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) imparte esta semana en el Campus Antonio Machado de Baeza (Jaén).
Miralles ha recalcado que la alergia que consiste en el asma bronqueal "es una enfermedad muy agradecida cuando está controlada pero puede llegar a tener exacerbaciones muy graves que incluso puede poner en peligro la vida de los pacientes".
Por ello, este especialista clínico ha reseñado "que es importante estar alerta a los síntomas de una crisis asmática grave como pueden ser una fatiga profunda, tos muy intensa, dificultad respiratoria y sobre todo cuando su tratamiento de rescate que lleva encima, ya sea Ventolín o Brycanil) deja de hacer efecto o tienen que usarlo de forma muy seguida", ya que es el momento de "buscar enseguida ayuda médica para mitigar esa crisis de asma ante de que suponga un riesgo para la salud de la persona".
En ese aspecto, Miralles ha recordado que el protocolo a seguir por los servicios de urgencia es "tratar esta crisis con el fármaco más eficaz que tengan como pueden ser los broncodilatadores de acción rápida que pueden ser usados con cámara de inhalación o bien nebulizados con aportaciones de oxígeno junto con los corticoides orales sistémicos que se suelen usar en la mayoría de las crisis salvo si son leves". Además ha señalado que además de esos fármacos se deberían otros instrumentos de gran eficacia como son los inhaladores Atrovent o los anticolinergicos.