Estos son los miembros del nuevo Consell del Disseny

VALÈNCIA. El Consell Local del Disseny está a punto de ser una realidad. O casi. Fue hace una semana, durante la presentación del pabellón del diseño en la plaza del Ayuntamiento, que el alcalde de la ciudad, Joan Ribó, declaró que su aprobación era “inminente”, seis meses después de anunciar su creación. Ese “inminente”, sin embargo, tiene varias interpretaciones. La primera, el pasado viernes, cuando se esperaba su aprobación; la segunda, esta misma semana cuando, según ha podido saber este diario, se espera que pase por Junta de Gobierno Local; la tercera, y cada vez más plausible, es que quede pendiente unos días más ante las diferencias entre los miembros del gobierno municipal en algunos de los puntos del acuerdo. Este tira y afloja está frenando más de lo esperado la puesta en marcha del Consell Local del Disseny, una aprobación que hoy está sobre la mesa, aunque sin la seguridad de que vaya a salir adelante esta semana.

Con todo, lo cierto es que el Ayuntamiento está trabajando en un documento que se antoja prácticamente definitivo, un texto que incluye nombres y apellidos de sus miembros. El texto, al que ha podido tener acceso este diario, incluye doce miembros, a los que se podría sumar algún nombre más en el caso de que se planteen nuevos cambios en Junta de Gobierno, un listado de participantes entre los que se encuentran los premios nacionales Marisa Gallén (diseño gráfico) y Nacho Lavernia (diseño industrial y de producto); el codirector del Arxiu Valencià del Disseny, Xavier Giner (filosofía y docencia); o la vicepresidenta de la ADCV, Yolanda Herráiz (espacios y producto). Completa el listado de profesionales Silvana Andrés (arte y educación), Carmen Baselga (espacios e interiores), Inés Novella (arquitectura e igualdad), Kike Correcher (diseño estratégico) Maite Palomares (arquitectura y patrimonio); Irene Reig (diseño cívico); Ana Segovia (diseño de producto y dirección de arte) y Jose Manuel Vidal (paisajismo y urbanismo).

Coordinado entre el Ayuntamiento, la Associació València Capital del Disseny y la recientemente creada Fundació del Disseny de la Comunitat Valenciana, es Xavi Calvo quien ha sido designado por el consistorio como ‘capitán’ del nuevo Consell, un proyecto en el que lleva trabajando meses, aunque en pocos días dejará de estar solo. Los doce miembros del Consell –que pueden sumar nuevas caras hasta un máximo de quince personas- formarán parte del mismo por un periodo de dos años con carácter renovable, un puesto mediante el que aceptan no poder contratar con el Ayuntamiento en convocatorias trabajadas o validadas desde el propio Consell. Sus principales objetivos, en tanto que ente consultivo, son detectar problemas de diseño y comunicación estratégica y trasladar informes y recomendaciones a las distintas concejalías y Alcaldía, así como asesorar a los distintos servicios municipales o evaluar los productos y servicios urbanos a partir de los criterios del buen diseño.

La partida económica, otro de los dolores de cabeza del Consell

El camino hasta la aprobación del Consell del Disseny no está siendo fácil y no solo la cuestión de los nombres está suponiendo un dolor de cabeza en el Ayuntamiento, otros dos aspectos han complicado la formación del organismo: por un lado, definir a qué área estaba adscrito y, por otro, el asunto económico. El primero también provocó una tira y afloja entre concejalías (y partidos), pues no fueron pocas las que se postularon para incluirlo en su ‘cartera’. Finalmente, y antes de que se anunciara su puesta en marcha en 2021, se decidió que fuera un ente transversal que dependiera de Alcaldía. Así todos contentos. El segundo de los dolores de cabeza, sin embargo, no se ha llegado a solventar del todo.

Aunque en un primer momento no se preveía que los miembros tuvieran remuneración, las primeras conversaciones internas apuntaron a la necesidad de que así fuera y llevaron al consistorio a rectificar su primera postura. Pero, ¿cómo se hará? Ahí se ha situado el debate interno en los últimos meses, ante la complejidad de concretar una retribución a miembros ajenos al consistorio. Finalmente, tal y como ha podido conocer este diario, el consistorio pagará en concepto de dietas unos 150 euros por persona, siendo esta la única retribución plantada en principio en el acuerdo. Pero no solo esta cuestión ha estado encima de la mesa. El ente tiene la potestad de encargar a profesionales externos los informes o estudios que considere necesarios, sin embargo el Ayuntamiento no ha concretado todavía el montante específico para que pueda operar los próximos meses.