VALÈNCIA (EP). Se ha demostrado científicamente que el ejercicio proporciona alivio al dolor lumbar crónico (DLC), pero una nueva revisión sistemática de la Universidad de Wisconsin en Sydney (Australia) ha mostrado que los investigadores aún no están seguros de por qué es beneficioso.
El estudio, publicado en la revista científica 'Musculoskeletal Science and Practice', tenía como objetivo era entender mejor por qué los investigadores del dolor de espalda piensan que el ejercicio ayuda a las personas con DLC.
El autor principal del estudio, Matt Jones, explica los investigadores se sorprendieron al encontrar que no había un acuerdo claro entre los científicos acerca de por qué piensan que el ejercicio funciona para el dolor lumbar crónico: "Por lo tanto, a pesar de décadas de investigación en el área y de más de 100 estudios que analizamos en nuestra revisión, todavía no tenemos una buena idea de por qué el ejercicio podría ser eficaz en esta condición".
El dolor lumbar crónico se asocia con una carga significativa tanto para el individuo como para la sociedad, es decir, a través de los costes de la atención médica. Muchos tratamientos han surgido de estudios para personas con esta afección (por ejemplo, medicamentos, terapia manual, terapia cognitivo-conductual), pero el que tiene la evidencia más consistente de beneficio es el ejercicio.
Jones define el dolor lumbar crónico como aquel que se siente en la parte posterior del cuerpo entre la parte inferior de las costillas y la parte inferior de la espalda, que dura tres meses o más. "Es el tipo de dolor que se extiende más allá del tiempo de curación esperado del tejido corporal. También sabemos que para muchas personas, forma parte de su vida cotidiana y puede afectar significativamente a su calidad de vida", resalta.
Según el investigador, la evidencia actual sugiere que el dolor lumbar cónico probablemente proviene de que el cerebro y el sistema nervioso son un poco sobreprotectores y generan una respuesta de dolor, a pesar de que no hay ningún daño físico evidente en el cuerpo.
Los investigadores llevaron a cabo una revisión sistemática de la literatura científica sobre por qué los investigadores del dolor de espalda piensan que el ejercicio ayuda a los adultos (menores de 65 años) con dolor lumbar crónico. Analizaron 110 trabajos de investigación que representan un estimado de varios miles de personas con esta dolencia. Los estudios investigados abarcan casi tres décadas y se llevaron a cabo en una serie de países y regiones, incluyendo Australia, Estados Unidos, China, Brasil y Europa.
A pesar de la falta de acuerdo en la literatura sobre por qué los investigadores pensaban que el ejercicio funcionaba para el dolor lumbar crónico, la revisión sistemática encontró algunos puntos en común. "Los investigadores propusieron razones comunes sobre por qué el ejercicio era beneficioso, incluyendo mejoras en el estado físico (por ejemplo, estabilidad del núcleo, estado aeróbico) y mejoras en el estado de ánimo y la confianza. Pero los efectos de estas razones propuestas sobre los resultados para las personas afectadas fueron raramente examinados en los documentos. En un tercio de los estudios, los investigadores ni siquiera propusieron una razón por la que pensaban que el ejercicio podría ser efectivo", señala Jones.
Jones cree que la ciencia aún no ha decidido por qué el ejercicio funciona para las personas con dolor lumbar crónico porque es una condición compleja. "El dolor crónico es difícil y hay muchos factores que pueden contribuir a él, por lo que no se trata simplemente de aspectos biológicos del daño tisular, sino que hay elementos psicosociales en juego, así como cosas como el estado de ánimo de una persona o la confianza en su propia capacidad para hacer algo", expone.