MADRID (EP). FCC asegura no haberse planteado aún volver a pagar dividendo, suspendido desde hace cinco años, al indicar que "lo importante es la generación de caja y la rentabilidad", según aseguró el director de Mercado de la compañía, Miguel Coronel. "Hasta el momento no hay ninguna decisión tomada", aseguró el directivo sobre la posibilidad de volver a remunerar al accionista una vez se cierre la acordada venta del 49% de la filial de agua Aqualia.
"Lo importante es que el grupo genere caja y sea rentable, lo demás será decisión del consejo", indicó Coronel durante la presentación a analistas de los resultados trimestrales de FCC. Asimismo, recordó que, tal como ya ha anunciado, la compañía destinará "la mayor parte" de los 1.024 millones que obtendrá con Aqualia a reducir deuda.
Precisamente, será esta reducción de deuda la que permitirá al grupo controlado por Carlos Slim enfilar la vuelta al dividendo, dado que reduciría su apalancamiento por debajo del nivel exigido por sus bancos para volver a retribuir a los socios. En concreto, la banca pide que el pasivo sea inferior a cuatro veces el beneficio bruto de explotación (Ebitda).
A cierre de 2017, la compañía de construcción y servicios presentaba una deuda neta de 3.579 millones de euros, importe equivalente a 4,3 veces el Ebitda. Así, si FCC destina los fondos de esta desinversión a recortar este pasivo, podría cumplir el ratio que pide la banca, toda vez que, además, el Ebitda ha experimentado un aumento del 15% ya en el primer trimestre del año.
De esta forma, Carlos Slim comenzaría a recibir dividendo como accionista de FCC por vez primera desde que en 2015 desembarcó en el capital de la constructora también participada por Esther Koplowitz.
En cuanto a la situación de la compañía, su directivo indicó que ya presenta una "estructura más eficaz y ligera, y un balance más sólido, que le garantiza mayor competitiva", gracias a la mejora operativa de sus negocios y los resultados de los planes de ajuste y eficiencia acometidos estos años. Además, FCC prevé mejorar dicha "fortaleza de balance" gracias al referido pago de deuda con los recursos de la venta de Aqualia.