Hoy es 16 de octubre
VALENCIA. La planta de motores de Ford Almussafes recibirá una inyección de 40 millones por parte de la multinacional para adaptar sus instalaciones a la producción del nuevo motor Maverick, la evolución de un modelo que ya se fabrica en las instalaciones de la industria valenciana.
Así lo confirman fuentes del sindicato UGT-PV, el mayoritario en la planta, que agregan que se trata de un encargo importante que garantiza la carga de trabajo en la planta de motores de la industria, en la que se suprimió el turno de noche ante la decisión de Ford de aglutinar buena parte de la construcción de sus modelos de motores en una planta creada ex profeso en EEUU.
La llegada de esta inversión y su correspondiente carga de trabajo ha sido la responsable, según la misma organización sindical, de que la multinacional haya descartado la aplicación de un ERE temporal en la planta de motores ante la caída de la demanda.
Como informó este diario, la enseña del óvalo trasladó este jueves su decisión a los representantes de los trabajadores. La solución escogida finalmente será muy similar a la adoptada en la planta de vehículos: reducir la producción en lo que queda de año a través de una reducción de jornada laboral y recuperar las horas no trabajadas en sábados de 2017, cuando se espera que la demanda repunte.
Así, la línea de montaje de motores -a la de mecanizados no afecta esta medida- se detendrá en la jornada de los viernes por la tarde para reducir la producción en 11.000 motores.
La empresa logró este acuerdo con el apoyo en solitario del sindicato mayoritario UGT-PV, que también se opuso a la iniciativa del ERE temporal. El resto de organizaciones se han opuesto a la jornada laboral en sábado acordada para 2017.