Bravo dice que no pidió juzgados de violencia de género porque había que reformar antes el modelo

VALÈNCIA. La consellera de Justicia, Gabriela Bravo, acudió este viernes a la apertura del año judicial, donde ser refirió a la información publicada por Valencia Plaza según la cual hace algo más de un año rechazó solicitar la creación de nuevos juzgados de violencia de género que ahora sí reclama. Preguntada por el hecho de que hace un año enviara una carta a Vicepresidencia del Gobierno valenciano diciendo que no quería más juzgados de violencia de género porque "distorsionaba su plan" para la justicia, y que ahora, un año después, sí los pida, Bravo afirmó: "Hace un año no me negué". Unas afirmaciones que contrastan con la carta, firmada de su puño y letra, de la que este periódico daba noticia pero no publicaba en su integridad.

"Lo que pedí, que además así consta en el informe que emitimos a la coordinación del pacto, es que dentro de las prioridades de creación de órganos judiciales en la Comunitat Valenciana, llevábamos pendientes ocho años juzgados que estaban creados y suspendidos y, por tanto, en cuanto a la petición al Ministerio de Justicia tenía que ser abordada con la situación de esos partidos judiciales", explicó la consellera. Sin embargo, ninguna mención, a ningún informe se hace en la misiva, donde solo se menciona que no quiere los juzgados. 

Valencia Plaza ha decidido publicar la carta firmada por Gabriela Bravo para que sus lectores extraigan sus propias conclusiones sobre cuáles eran las intenciones reales de la consellera.

Fuentes del Pacto Valenciano Contra la Violencia de Genero consultadas por este periódico explican que "el informe del que habla la consellera es anterior a la carta pero, además, cuando después habla de los juzgados específicos se excusa en que primero hay que reformar la planta judicial, y que hace falta un acuerdo entre Tribunal Superior de Justicia y el  Consejo General del Poder Judicial, un hecho que ya incluye como puntos a desarrollar el propio pacto, y que había cinco años para desarrollar, y eso nada tiene que ver con pedir más juzgados".

Es más, las mismas fuentes tachan de "incongruente" el discurso de Bravo cuando habla de reordenar la planta judicial como excusa para no pedir los juzgados, que es lo que pone en su carta al negar la necesidad de más órganos específicos "y, sin embargo, ahora pide los juzgados a la vez que la reordenación. No tiene sentido, más allá de haberse visto retratada con la publicación de la carta", critican.

Bravo respondía este viernes que se refería a que la prioridad era reordenar las compentecias. "En cuanto a los juzgados de violencia, que sí considero necesario incrementar y lo consideraba entonces, si lee bien pone claramente que se necesita previamente una reordenación de las competencias", fueron sus palabras. Y añadía: "Es evidente que teniendo en cuenta la carga de trabajo de los juzgados que llevan violencia, los mixtos, no se necesitan 36 juzgados, ahora mismo hay 16, y para saber cuántos juzgados necesitamos, que conozcan de forma exclusiva toda la violencia de género de la Comunitat Valenciana necesitamos previamente el estudio del CGPJ, en segundo lugar la propuesta del consejo aceptada por el Ministerio de Justicia de configurarlo como una jurisdicción especializada y, a partir de ahí, y a la vista de los que nos digan, ya solicitar".

Y acabó justificando, de nuevo, que no se debía aumentar "sin más" los juzgados de violencia de género: "Me parecía que pedir juzgados exclusivos para seguir manteniendo ese Justicia de doble velocidad, que seguía manteniendo violencia en los mixtos por un lado y juzgados exclusivos por otro, pues lo que planteé fue adelantemos por aquí porque lo que necesitamos es el cambio de modelo. Lo dije entonces, lo dije hace un año, y lo digo ahora. Si ahora nos dedicamos a aumentar el número de juzgados sin más, pero los juzgados mixtos siguen conociendo violencia de género tenemos un problema. No es incompatible lo que mantuve hace un año con lo que estoy diciendo ahora".