VALÈNCIA (VP). El alcalde de Alboraya, Miguel Chavarría, ha mantenido una reunión con el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, y el secretario autonómico de Infraestructuras y Transportes, Francisco Javier Sendra Mengual.
El objetivo es seguir trabajando para coordinar las mejoras de las infraestructuras de accesibilidad del municipio alborayense entre núcleos, además de las conexiones con la capital desde La Patacona. Así pues, la Conselleria y el Ayuntamiento de Alboraya están estudiando fórmulas y ayudas que permitan aliviar el pago anual creciente de los plazos correspondientes por la deuda generada por el soterramiento del metro.
El consistorio acordó un calendario de pagos anuales con FGV durante 39 años que sufragará los más de 29 millones de euros y sus correspondientes intereses, que debe pagar el municipio por el soterramiento. El alcalde destacó el beneficio indudable que éste soterramiento ha significado para toda la linea 3 y lo injusto que es en la práctica, que sufrague el 50% de esta inversión el pueblo de Alboraya.
El alcalde, junto a la concejala de Urbanismo, Ana Bru, también han solicitado que se vuelva a estudiar el posible uso de la nueva conexión de la V-21 con La Patacona. Y es que, tras las obras de ampliación de la V-21, se dejó preparado un cajón bajo la autopista, que dará servicio al futuro ramal de acceso a València por La Patacona hacia Serrería. Al mismo tiempo, se acondicionó parte de un paso de servicio provisional para enlazar la carretera de conexión del Polígono de la Mar y el núcleo tradicional de Alboraya con La Patacona por el vial perimetral, que enlaza con el de la Malvarrosa hacia Serrería.
"Este desvío sería muy útil ya que evitaría el paso por el centro de La Patacona cuando se atraviesa en dirección al núcleo tradicional, además de evitar cierto bloqueo de la Patacona cuando la atraviesan diversas actividades deportivas como carreras, maratones, etc., y que varias veces al año dificultan gravemente la movilidad en el núcleo de playa", señala Chavarría. La Conselleria se ha comprometido a estudiarlo, y ha dado la posibilidad de solicitar permisos puntuales para permitir el paso de esas actividades por la CV311 y el nuevo paso hacia el Camí de la Mar.
Por otra parte, también trataron la pasarela ciclopeatonal que enlazaría el pueblo con el anillo verde que discurre por la costa. Para salvar las vías del tren, el carril bici necesita una pasarela junto a a la carretera del Camí a la Mar. La pasarela está proyectada en el programa de sostenibilidad turística subvencionado por la Unión Europea y el Ayuntamiento de Alboraya ya ha solicitado informes a la Conselleria.
Finalmente se trató la propuesta, que ya se encuentra en redacción, para estudiar conjuntamente las posibilidades del Ayuntamiento para renovar la concesión de la dársena del puerto de Port Saplaya, dada la singularidad del mismo, que prácticamente hace la función de calles de Port Saplaya con acceso a las viviendas por la misma.