LONDRES (EP). Goldman Sachs mantiene su previsión de que el precio medio del barril de petróleo se sitúe en 40,5 dólares a lo largo de 2016, después de que la reunión entre países productores celebrada este fin de semana en Doha se cerrase sin un acuerdo acerca de una contención en el ritmo de extracción de crudo.
En su último 'Commodities Research', la firma estadounidense considera que la falta de consenso entre la OPEP y otros países productores sobre esta cuestión transmite la señal de que existe una "dirección blanda" entre los agentes que dominan la oferta de petróleo, lo que contribuye a deprimir su precio.
Al margen del interés de algunos países por ganar tiempo, Goldman Sachs considera que el aspecto que impide el acuerdo es la pretensión de Irán de reanudar a buen ritmo la producción para recuperar su cuota de mercado, frente a las reticencias de Arabia Saudí.
En todo caso, la falta de acuerdo no implica que los países de la OPEP vayan a recuperar en breve sus altos niveles de producción. Esta circunstancia, junto a otros factores, recomiendan a los analistas de la firma mantener su previsión anual de precios.
Además, existen otros elementos que pueden contribuir a que los precios suban, entre ellos la huelga de trabajadores del sector petrolífero en Kuwait, que ha provocado una bajada en la producción del país durante el mes de marzo, de 2,85 millones de barriles al día a apenas 1,1 millones.