VALÈNCIA. El portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, jugó este jueves al despiste con sus declaraciones en la Sexta al ser preguntado por las posibilidades existentes de que sea en 2019 el candidato a la Alcaldía de València. Así al menos lo consideran distintos dirigentes del partido consultados por este diario que se muestran favorables a que el exconseller sea el cabeza de cartel popular para el Cap i Casal.
"No, mi madre no quiere", fue la respuesta de González Pons, conocido por su habilidad oratoria, que curiosamente en esta ocasión parafraseó una expresión característica del ex presidente provincial del PP de Valencia, Alfonso Rus, quien la usaba frecuentemente tanto en público como en privado. "Siempre hago caso a mi madre porque madre no hay más que una. Si alguien quiere algo, que hable con mi madre que a mi no me deja", comentó sobre el eurodiputado al ser preguntado por la cuestión.
En los últimos meses, la opción de que el exconseller pudiera liderar la candidatura al consistorio ha venido cobrando fuerza en las filas populares. Cabe recordar que está siendo un mandato complicado para la formación de la gaviota en el Cap i Casal, dado que nueve de sus diez concejales se encuentran investigados por presunto blanqueo de capitales en el marco de la Operación Taula. No obstante, el PPCV tiene opciones de volver a tomar la vara de mando en el Ayuntamiento de València dado que en 2015 continuó siendo la fuerza más votada y solo se quedó a un edil de, a través de un hipotético pacto con Ciudadanos, mantener la Alcaldía.
Es por ello que desde la dirección nacional del PP situada en la calle Génova se pretende poner especial atención a las elecciones locales de València, dado que tendría indiscutible importancia la recuperación de la tercera ciudad más grande de España. Así, y al margen de que estatutariamente la designación de un candidato de más de 50.000 habitantes pertenece a Madrid, fuentes del partido señalan que la intención es estudiar a través de sondeos la mejor opción para asaltar el cetro que, a día de hoy, ostenta Joan Ribó (Compromís).
En cuanto a González Pons, pocos discuten que su reconocimiento en el electorado es notable y podría implicar un plus para el PPCV. No obstante, tal y como informó Valencia Plaza, la líder regional del partido, Isabel Bonig, también ha sondeado a la búsqueda de algún independiente que pudiera ofrecer buenas prestaciones si la aparentemente primera opción fallara.
Así, y aunque el exconseller pareció descartarse este jueves rehuyendo la pregunta, distintas fuentes del PP coincidieron en señalar que la decisión no está tomada. Aunque González Pons, subrayan, está "a gusto" en su labor europea, si Mariano Rajoy le pide que luche por la Alcaldía de València le será "muy difícil negarse".
Ahora bien, un dato importante en este relato es la coincidencia de fechas en esta ocasión de las elecciones locales con las europeas, por lo que si González Pons se presentara para la Alcaldía tendría muy complicado concurrir también al mismo tiempo en la lista para Bruselas. Este componente no es baladí dado que el exconseller no querría permanecer en la oposición si no consigue la vara de mando, más aún después de haber dejado el escaño europeo. De esta manera, no son pocos en el partido los que ven la negativa inicial de González Pons como una manera de reforzar su posición negociadora ante Rajoy: es decir, obtener ciertas garantías de que si no consigue el objetivo previsto sería repescado para cotas mayores que ser portavoz local de la oposición.