VALÈNCIA (EP). La Confederación de asociaciones de madres y padres de alumnos de la Comunitat Valenciana Gonzalo Anaya ha criticado que el próximo lunes, 4 de marzo, las familias votarán de nuevo "una jornada escolar continua sin ninguna garantía".
La entidad se refiere así a la jornada de votaciones convocada para la semana que viene en la que algunos centros educativos someterán a consulta la modificación del horario escolar de partida a continua.
Ante los cambios normativos y manteniendo las reivindicaciones de anteriores consultas, la Gonzalo Anaya cree que la jornada escolar continua "vuelve a consultarse entre las familias de los centros sin que exista un estudio científico que contraste sus ventajas, sin garantizar tampoco el rendimiento, el bienestar y la salud de los escolares y sin que la Conselleria de Educación haya realizado una evaluación de las jornadas escolares desde el rigor".
Sobre los cambios introducidos por el equipo encabezado por el conseller de Educación, José Antonio Rovira, la agrupación de AMPA considera que no pedir un proyecto educativo de jornada escolar elimina la fundamentación.
"Ahora con presentar un horario es suficiente, sin ninguna información más para que las familias valoren", señala, en un comunicado, el presidente de la confederación, Rubén Pacheco, que también denuncia que, en los cambios introducidos, "se han eliminado los recursos extraordinarios durante el curso escolar que podían pedir los centros para sufragar las actividades extraescolares de 15 a 17 horas". Además, no existen mecanismos para garantizar la calidad de las extraescolares.
Debido a la compactación del horario, desde la organización de AMPA manifiestan que no hay "flexibilización" en la propuesta como tampoco para adaptarse a las necesidades educativas de los escolares. "Corremos el riesgo que haya alumnos que se pierdan por el cansancio de la intensividad horario, no existen medidas para adaptarse, la flexibilización es solo un anuncio, pero no es real", han destacado.
Otra cuestión que mencionan es "la imposibilidad de revertir la jornada escolar continua". Para poder iniciar la reversión el proceso depende de una aprobación en Consejo Escolar de centro dónde las familias están infrarrepresentadas. Las quejas más frecuentes, registradas en las federaciones, son las referidas a situaciones familiares sobrevenidas durante el curso escolar.
Si la familia decide en septiembre que su hijo o su hija no se quede hasta las 17 horas, no hay situaciones excepcionales para poder cambiar el criterio y que se pueda quedar en cualquier momento del curso escolar.
Desde la Gonzalo Anaya han solicitado que, ante situaciones excepcionales o sobrevenidas, como un cambio de horarios laborales de madres o padres o enfermedades o defunciones de abuelos u hospitalizaciones, Educación regule que se permita a las familias cambiar de criterio y poder hacer uso de la jornada escolar hasta las 17 horas.
Estas situaciones cotidianas extraordinarias ha sido objeto de "quejas reiteradas de las AMPA durante el último curso ante la imposibilidad de cambiar de decisión durante el curso escolar". insisten.