VALÈNCIA (EP). El incumplimiento de las restricciones que el Ayuntamiento de València fijará para circular por las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) de la ciudad en la ordenanza que regulará estos espacios comportará sanciones de 200 euros por suponer una "infracción de carácter grave" atendiendo a lo marcado por la normativa estatal. En la ciudad habrá 278 cámaras de tráfico para vigilar que se cumplen las limitaciones.
Así lo ha indicado este lunes el concejal de Movilidad, Jesús Carbonell, en la rueda de prensa que ha ofrecido para hablar de las ZBE después de que el pasado viernes la Junta de Gobierno Local del consistorio aprobara el borrador de la ordenanza que las contempla.
"El régimen de sanciones es el establecido por la normativa estatal. Nosotros no tenemos competencias para establecer ese tipo de sanciones y, por tanto, nos limitaremos a aplicarlas", ha señalado Carbonell, que ha precisado que las multas serán de "200 euros por tratarse de una infracción grave".
El edil ha resaltado que València a pesar de que "cumple los límites de contaminación" tiene la "obligación" como "municipio de más de 50.000 habitantes" de cumplir "la normativa estatal" e "implantar la ZBE". No obstante, ha asegurado que la de esta ciudad será "una normativa blanda", dado que pretende "proteger" sus "intereses económicos --con excepciones para autónomos y pymes- y sociales -para no penalizar "a las personas con menos recursos"-.
"Por tanto, solamente los vehículos -turismos, motocicletas y ciclomotores- sin etiqueta, también llamados vehículos con etiqueta A, serán aquellos que no podrán circular a partir del 1 de enero de 2028 -año en que se establecerán las restricciones de forma definitiva-" por esos espacios, ha precisado el titular de Movilidad, que ha señalado que "los restantes no se verán afectados". Asimismo, ha subrayado "el calendario progresivo de implantación" de las restricciones previsto en la ordenanza.
"Se contempla una prohibición de carácter progresivo", ha remarcado, tras lo que ha reiterado que 2025 será un año de "fase informativa" en la que "no habrá sanciones". El edil ha añadido que a partir del 1 de enero de 2026 "los vehículos de etiqueta A de fuera de la provincia -de Valencia- no podrán entrar en la ciudad" y ha agregado que desde el 1 de enero de 2027 serán los A de fuera de la capital valenciana los que no podrán entrar.
"A partir del 1 de enero de 2028, tampoco podrán circular los de la propia ciudad de València", ha concretado Carbonell. "Esto significa que los coches de gasolina que el 1 de enero de 2028 tengan más de 27 años no podrán circular, y tampoco los de gasoil que a fecha 1 de enero de 2028 tengan más de 22 años", ha dicho, al tiempo que ha considerado que se está hablando de "antigüedades más que razonables".
El responsable municipal ha repetido también, tras lo anunciado el viernes, que "de las prohibiciones se excluyen los vehículos pertenecientes a personas físicas o jurídicas afectas a cualquier actividad económica", de modo que "los autónomos y las empresas que dispongan de vehículos podrán circular sin restricciones.
Jesús Carbonell ha insistido en que así se busca "proteger los derechos económicos" en la ciudad, como también los "sociales", teniendo en cuenta que de las limitaciones "están excluidos los vehículos de personas con discapacidad permanente o temporal mientras dure esta última; los de embarazadas, los de familias numerosas y familias con menores de tres años".
Además, ha apuntado, como también avanzó, que "a pesar de tener prohibida la circulación se podrá transitar 48 días al año -la media "supone una vez a la semana", ha apostillado-. Para ello será necesaria "la tramitación administrativa correspondiente".
Las personas afectadas por las prohibiciones de las ZBE dispondrán, como ya se anunció, de un título de transporte gratuito en la Empresa Municipal de Transportes (EMT) durante dos años o hasta que en ese periodo adquieran un vehículo que pueda circular sin limitaciones.
Jesús Carbonell ha explicado de nuevo que la ordenanza para la ZBE "contempla la existencia de dos" entornos de este tipo. Así, ha aludido a "una más laxa, la que abarca toda la ciudad, y otra más estricta, que abarca la antigua APR -Área de Prioridad Residencial de Ciutat Vella- ahora convertida también en zona de bajas emisiones, de especial sensibilidad".
Respecto a esta última, el titular de Movilidad ha señalado que "conserva los criterios existentes en la actualidad y sobrepone los de la ZBE genérica. "No van a poder entrar vehículos de fuera de la ciudad con etiqueta A, pero tampoco los vehículos de etiqueta A de los vecinos van a poder circular", ha concretado.
Por lo que respecta a la genérica ha recordado que "está circunscrita al espacio interior a la Ronda Norte, la Ronda Sur, Serrería y la avenida de los Naranjos". Así, ha detallado que "los vehículos más contaminantes, los de etiqueta A, podrán circunvalar la ciudad, pero no entrar dentro porque habrá en torno a 278 cámaras distribuidas para impedir el acceso a la zona de bajas emisiones".
El edil ha manifestado también que habrá además "un registro municipal de vehículos excepcionados, siempre y cuando se trate de excepciones que no son de carácter automático". En él podrán estar los de personas con discapacidad permanente o temporal, embarazadas, familias numerosas o con menores de tres años.
Asimismo, ha expuesto que en los próximos meses "se pondrá a disposición de todos los usuarios" la posibilidad de realizar "una consulta a través de la web para que puedan comprobar si su vehículo se encuentra excepcionado o no y puede entrar o no a la ZBE".
Jesús Carbonell ha comentado que si este lunes se implantara de forma efectiva la ZBE en València solo el 8% de los vehículos censados se vería afectado por las restricciones y ha apuntado que esa cifra será más baja dentro de cuatro años. En la actualidad el 32% del parque móvil de la ciudad -132.016- corresponde a vehículos sin etiqueta (etiqueta A), pero según estudios de ese total solo circula un 8% -16.000-, el 44% del total que circula sumando residentes y no residentes -36.000-.
Ante esto, los dos grupos de la oposición en el Ayuntamiento de València, Compromís y PSPV-PSOE, han criticado este lunes la propuesta para regular las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en la ciudad presentada por el equipo de gobierno que forman PP y Vox. Así, han considerado que el borrador de ordenanza previsto es una "estafa" y un "coladero", como ha apuntado Compromís, y un planteamiento "de mínimos, sin informes técnicos, que no reduce la contaminación", en opinión de los socialistas.
"El PP ha tardado un año en poner sobre la mesa su ordenanza para la ZBE, o lo que es lo mismo, su mecanismo para convertir València en la única capital europea en la que en 2028 todavía, con una excusa u otra, se pueda circular con vehículos altamente contaminantes", ha afirmado el edil de Compromís Giuseppe Grezzi.
El concejal ha considerado que la propuesta de ordenanza dada a conocer "confirma la renuncia de la alcaldesa, María José Catalá (PP), a cumplir el objetivo de las ciudades Misión de reducir las emisiones y los contaminantes para 2030 en un 80%". "Lo que Carbonell ha presentado como las normas definitivas de funcionamiento de la ZBE para 2028 es una recopilación de las excepciones que temporalmente han operado y operan en otras ciudades para hacer la transición hacia ciudades sin emisiones en un futuro cercano", ha añadido.
Grezzi ha criticado que el PP plantee una València "en la que, por los motivos más arbitrarios --como ser familia numerosa o llevar a los nenes en coche al cole-- puedes saltarte cualquier restricción, independientemente de lo que contamine tu vehículo".
Asimismo, ha apuntado que "el ánimo de boicotear la política medioambiental por parte del PP es tal que deja sin efecto la principal bondad de la ZBE en todas las ciudades: poner fecha límite al plazo de la sustitución de flota de los vehículos de empresa". "En lugar de hacerlo y poner una fecha tope, el PP dice que camiones, furgonetas y coches, dedicados a la distribución pero también sencillamente a nombre de un autónomo, podrán circular libremente independientemente de lo que contaminen", ha señalado el edil.