NOVELDA. Una de las empresa más grandes del sector de mármol y la piedra natural de Novelda, Intermarmor, ha solicitado el preconcurso de acreedores con el objetivo de restructurar las deudas y lograr una situación más liviana que asegure la viabilidad de la empresa. Así lo han confirmado a Alicante Plaza diferentes fuentes cercanas a la mercantil, que ahora debe empezar la fase de negociación con los acreedores, tal y como contempla la reforma de la Ley Concursal: la firma debe elaborar un plan de negocio y un calendario de pagos validado extrajudicialmente por los acreedores.
De acuerdo con las últimas cuentas presentadas por Intermarmor, la mercantil presenta unas deudas a corto plazo de unos 15 millones de euros -de los que algo más de 5 millones serían con entidades bancarias- y de unos seis millones a largo plazo. Con las empresas del grupo -como son Characo (que es la matriz), el Grupo Favetón o Canteras Brown Olor, SL- Intermarmor tiene contraídas deudas por algo más de tres millones.
Las deudas se han incrementado en algo más de un millón de euros respecto a 2021, pese a que Intermarmor mejoró sus resultados en el último ejercicio: de 12 a 17 millones en ventas. Sin embargo, esta mejora no ha evitado que el resultado neto de la explotación del negocio sea negativo en 891.000 euros. Una situación anómala para la empresa, que, pese a la bajada de las ventas provocada por los dos ejercicios de la pandemia -2020 y 2021- hasta ahora no había entrado en pérdidas.
Los propietarios de Intermarmor son miembros de una familia de empresarios de origen libanés, con distintas empresas e inversiones en el sector de la piedra natural y en el de la construcción, en la provincia y en la Comunitat. La firma noveldense es una de las más destacadas de su sector, con permiso de Levantina, y que llegó a facturar más de 25 millones de euros en 2018, su mejor resultado de facturación. Entonces tenía 108 empleados, ahora apenas llega a los 50. Muy volcada en el negocio internacional, los propietarios de Intermarmor llegaron a la empresa, fundada en 1968, hace quince años.
En los últimos dos años han realizado dos inversiones importantes. Una dedicada al propio negocio de la piedra natural, como fue la adquisición de una cantera, ubicada en Lleida, que posee un nuevo material bautizado con el nombre de Light Ivona, una piedra natural con una alta densidad, muy resistente y compacta. La otra fue la compra del colegio San Alberto Magno, de Monforte del Cid.
