VALÈNCIA. "Seguimos con nuestra hoja de ruta que pasa por continuar construyendo un proyecto serio, sostenible y de continuidad; de seguir creciendo y que los clientes puedan tener en nosotros una entidad de referencia para acompañarlos en todo momento, tanto en tiempos de bonanza económica como de crisis". Son palabras de José Víctor Guillén, director general de Caja Rural Central de Orihuela (CRC), que este viernes atendía amablemente la llamada de este diario.
Conviene recordar que hace mes y medio reconocía a Valencia Plaza que la entidad oriolana estaba evolucionando muy bien en la primera parte de 2018 y que lo mejor estaba por llegar. Y no le faltaba razón, dado que en los nueve primeros meses de este año el beneficio de CRC se ha disparado un 21,3% hasta los 8,31 millones de euros. Así lo recogen los últimos datos de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc), tal y como los avanzó este diario el viernes 23, donde la caja rural de la capital de la Vega Baja del Segura ha sido la que más beneficio ha obtenido de las 31 cooperativas de crédito domiciliadas en algún punto de la Comunitat Valenciana.
Pero la cosa no queda ahí porque CRC ha mejorado su margen de intereses -uno de los pilares de los ingresos de las entidades financieras junto con las comisiones y las inversiones de capital- en un 13,24%. Lo ha hecho al pasar de los 18,44 millones al cierre del tercer trimestre de 2017 hasta los 20,88 millones al término de éste. Además, el margen bruto -la diferencia entre los ingresos y los costes financieros- también mejoró (+3%) situándose en los 31,67 millones de euros al pasado 30 de septiembre.
"No cabe duda de que estamos contentos con los resultado y vamos a seguir manteniendo las líneas de crecimiento. De cara a 2019 vamos a abrir entre 3 y 5 años en Alicante y Murcia, que son nuestros territorios naturales. Queremos ir rellenando huecos en ambas provincias pero sin abrir por abrir sino aportando valor", apunta Guillén, que recuerda que "donde más valor hemos aportado ha sido en plena crisis y por eso nos gusta acompañar a nuestros clientes tanto cuando las cosas van bien pero más cuando van mal como pasó en la crisis".
Actualmente Caja Rural Central de Orihuela cuenta con 75 oficinas, casi 200.000 clientes y unos activos bajo gestión que rondan los 3.000 millones de euros. "Son buenos números pero vamos a seguir aumentándolos pero siempre de un modo sostenible", añade recordando al periodista que el próximo año están de celebración. "El 6 de junio de 2019 cumpliremos 100 años, la caja que no yo (sonríe al otro lado de la línea telefónica) . ¿Qué hemos preparado al respecto? Habrán distintos eventos para conmemorar tan señalada fecha, pero todavía les estamos dando forma".
Ni que decir tiene que la banca tiene marcada en rojo en su agenda 2019, el año que el Banco Central Europeo (BCE) debería abandonar su política monetaria ultralaxa, es decir, los 'tipos cero', que tanta factura están pasando sobre los márgenes. Sin embargo, José Víctor Guillén no lo tiene tan claro y advierte que "no va a ser tan sencillo subir los tipos de interés y tampoco hay una certeza de que vaya a ser así porque hay muchas incertidumbres a nivel europeo y a nivel mundial".
A su juicio, los tipos tan bajos como los que reinan en la actualidad "aportan creatividad al trabajo porque se puede hacer banca tanto con 'tipos cero' como con tipos al 5%; lo que hay que hacer es aportar creatividad con una propuesta de valor basada en la honestidad. Yo siempre digo que no hay ningún objetivo comercial que esté por encima de nuestros valores. No se trata de hacer las cosas en el primer minuto sino de ir construyendo un proyecto poco a poco".