ALICANTE. La juguetera de Tibi, Juguetes Grego, dedicada a la venta online y con una decena de tiendras distribuidas por la zona del Mediterráneo, ha presentado concurso de acreedores, con un pasivo de 223.000 euros y sin masa activa.
Grego es una empresa familiar, con más de 40 años de trayectoria, que la segunda generación familiar había asumido las riendas desde 2017. Venía operando, en el mercado de tiendas, con marca Juguetrón. Además de la venta, tanto online como física, Grego se ha convertido en una especie de consultora que asesora y ayuda a los clientes, principalmente, a los propietarios de las tiendas asociadas. Su modelo, por tanto, alternaba ventas directas con los clientes y al por mayor.
Con el anuncio del concurso, los acreedores tienen un plazo de 15 días para solicitar el nombramiento de un administrador concursal para que elabore un informe sobre si los gestores actuales han realizado actos perjudiciales; si existen indicios suficientes para el ejercicio de la acción social de responsabilidad contra los administradores o si hay indicios de que el concurso puede ser calificado de culpable.
Ahora bien, como dice el anuncio del concurso, "la presente declaración no suspende ni interviene las facultades del deudor, lo que se pone en conocimiento de los terceros interesados a los efectos legales oportunos". En particular, en relación con las entidades bancarias, el presente auto no autoriza a las mismas a bloquear el acceso a las cuentas de los deudores".
De acuerdo con las cuentas de 2022 y 2021, las últimas que se han presentado en el Registro Mercantil, la empresa venía facturando entre 1,2 y 1,3 millones de euros al año. Ahora bien, presentaba deudas por algo más de 500.000 euros, de las que 425.000 euros eran con proveedores. Con entidades de crédito, el pasivo ascendía a unos 150.000 euros, aunque el grueso tenía un vencimiento superior a los 5 años. Sus balances económicos, al menos, en lo que se refiere a los ejercicios 2021 y 2022 eran positivos.
