VALÈNCIA. Primero comenzaron a tejer alianzas en el territorio nacional; ahora, fuera de las fronteras españolas. La Agencia Antifraude valenciana que dirige Joan Llinares ingresó el pasado mes de julio en la European Partners Against Corruption (EPAC-EACN), una plataforma independiente para agencias que luchan contra la corrupción cuyo fin principal es que sus miembros puedan mantener contacto entre ellos e intercambien información.
Llinares remitió el pasado 26 de junio un escrito al organismo para solicitar la adhesión de la institución que preside. Con la aceptación, la Agencia Antifraude valenciana participará el próximo mes de octubre en la 18º Conferencia Anual de la EPAC, que este año se celebrará en Rust, Austria. Unas jornadas que servirán para analizar la evolución de la lucha contra la corrupción a nivel internacional y europeo. Junto a la valenciana, sólo la Agencia Antifraude de Cataluña que preside Miguel Ángel Gimeno pertenece a este grupo.
Un movimiento -el ingreso en este organismo europeo- que precede y sigue a otros que se han ido produciendo en los últimos meses. En junio, varias agencias anticorrupción españolas se citaron con la intención de convocar periódicamente reuniones para compartir estrategias comunes contra las malas prácticas en la administración. Al encuentro, acudieron los responsables de las oficinas de Baleares, València, Galicia y Madrid.
El objetivo de esta red es avanzar hacia la creación de un Plan Nacional contra la corrupción, una propuesta que, de hecho, puso encima de la mesa Llinares en su última comparecencia en Les Corts cuando presentó la memoria anual de la Agencia de 2017. Para quien levantó las alfombras del IVAM, es necesario el compromiso tanto de sociedad civil como de los partidos políticos.
El guante fue recogido por Podemos, que avanzó que a la vuelta de las vacaciones estivales se pondría en contacto con Llinares para estudiar cómo se podía avanzar en este sentido. Sin embargo, los contactos todavía no se han producido.
Apenas un par de meses después de aquella reunión en la que se tejió la "red" de organismos contra la corrupción, la agencia valenciana y la catalana firmaron un convenio de colaboración. Éste contempla que en los casos en que puedan estar implicadas las competencias de ambas instituciones o cuando sea sometido a uno de los entes un caso que pudiera corresponder al ámbito competencial del otro, se guardará total secreto respecto al citado asunto. Además, se podrán realizar estudios conjuntos sobre la lucha contra el fraude y la corrupción.