SANTANDER. La presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), Cristina Herrero, ha alertado este martes de que la subida de tipos anunciada por el BCE en respuesta a una inflación persistente ya está impactando fuertemente en las rentabilidades de la deuda soberana, lo que en el caso de España se traducirá en un sobrecoste de más de 12.000 millones de euros de gasto por intereses en 2025.
Herrero ha detallado las últimas previsiones fiscales de la AIReF en el seminario de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) en la Universidad Menéndez Pelayo, donde ha alertado de que el elevado nivel de deuda que acumulado por España, unido al contexto actual de alza de tipos, elevada inflación y menor crecimiento económico hacen todavía más necesario el diseño de una estrategia fiscal a medio plazo "creíble y realista" porque los mercados necesitan "certidumbres, garantías y confianza".
La presidenta de la AIReF, con todo, ha precisado que la incertidumbre actual dificulta las previsiones porque, aunque en lo que va de año, el tipo de interés del bono a 10 años ha registrado un aumento de 240 puntos básicos hasta su nivel máximo desde 2014, habrá que ver el efecto de los instrumentos anunciados por el BCE para evitar la fragmentación del mercado de deuda de los países de la eurozona.
Además, ha advertido este martes de que cada punto adicional de inflación eleva en 700 millones de euros el coste de los intereses de la deuda española, con 65.000 millones de euros de toda la cartera vinculada a la evolución de los precios. Aunque la inflación está muy condicionada por el comportamiento de las materias primas energéticas y los alimentos, Herrero ha alertado que esta se traslada al resto de la cesta de la compra. Por ejemplo, en España, más de un 50% de la cesta no alimenticia ni energética posee tasas de variación iguales o superiores al 3% interanual.
En cuanto a las previsiones fiscales, ha asegurado que están siendo superadas por la realidad, con un importante incremento de los ingresos. Para 2022, la AIReF tiene una previsión de déficit inferior a la del Gobierno, pero en el resto de los ejercicios, prevé una menor reducción del déficit que el Programa de Estabilidad.
Sin embargo, Herrero ha avisado de que la posición de España es frágil, puesto que la reducción proyectada responde solo al crecimiento y eliminación de medidas de apoyo por la covid, mientras que la inflación puede deteriorar el saldo fiscal a medio plazo y hay mucha incertidumbre sobre la política fiscal y monetaria.