El estratega jefe de divisas de Saxo Bank advierte de la poca influencia que tiene la Reserva Federal para frenar lo inevitable tras las medidas proteccionistas de Trump
MADRID. La reunión del Comité Federal de Mercado Abierto de la Reserva Federal (FOMC) alentó una reacción inicial bastante fuerte en los mercados de tipos, con mayores previsiones para el PIB (este año y el próximo) y el IPC core (hasta el 2,1% para 2019 y 2020) y un ligero aumento en las predicciones medias de puntos, con expectativas de alza de tipos a nuevos máximos para el ciclo.
Pero a medida que avanzaba la conferencia de prensa del presidente de la Reserva Federal (FED), Jay Powell, habló francamente de que las previsiones de la trama de puntos son solo eso: previsiones y no algo a lo que la FED necesariamente estará ligada. Parece que este presidente está menos interesado, en este punto del ciclo, en tener la guía de la FED como una garantía para los participantes del mercado, dejándoles poco margen para un cambio de rumbo.
Como un artículo de Bloomberg apuntaba, el comentario de Powell sobre la tasa de desempleo y los salarios muestra que no estará vinculado a las teorías económicas (curva de Philips...) a menos que muestren signos de ser realmente relevantes.
Finalmente en el FOMC fue interesante notar que Powell evitó en general expresar cualquier opinión agresiva sobre los riesgos para la economía por los aranceles comerciales o cualquier lenguaje crítico. Mencionó que algunos líderes empresariales en contacto con la FED habían expresado su preocupación sobre el tema. Esta es una señal muy fuerte de que la Reserva Federal de Powell no quiere arriesgarse a una reacción política, ya que el tema de aranceles/proteccionismo comercial probablemente sea visto como un gran riesgo por parte de la FED. Y, por ello, no quiere hablar con demasiada claridad sobre el tema, dado que Powell aún no tiene un vicepresidente y varios puestos de gobernador de la Fed permanecen desocupados. Demasiado ruido y una reacción de Trump podrían ser inevitables. La influencia de la FED sobre la situación, en resumen, es muy reducida.
La Casa Blanca ha expresado la intención de declarar el comienzo de una 'guerra comercial' con China. "El presidente anunciará las acciones que ha decidido tomar en base a la investigación 301 de USTR en el mercado liderado por el estado de China, al "distorsionar los esfuerzos para forzar, presionar y robar tecnologías estadounidenses y propiedad intelectual", dijo el funcionario de la Casa Blanca Raj Shah en un comunicado.
John J. Hardy es jefe de estrategia en divisas de Saxo Bank