La patronal valenciana no entiende que el Gobierno valenciano quiera recuperar sus oficinas de apoyo a empresas en el exterior y a la vez dé la espalda a una firma que aspira a un contrato de 6.000 millones
VALENCIA. La Confederación Empresarial Valenciana (CEV) discrepa frontalmente de la postura adoptada por el Consell, que dio la espalda este viernes a Ribera Salud ante la solicitud de apoyo institucional por parte de la empresa para optar a la concesión del Hospital de Bratislava (Eslovaquia). Preguntado al respecto, el presidente de la patronal provincial, Salvador Navarro, solicita al Gobierno valenciano "el máximo apoyo a las inversiones de las empresas valencianas en el exterior".
El empresario considera "cuanto menos chocante" que el Consell "anuncie la puesta en marcha de la red de apoyo de las empresas en el exterior (el antiguo IVEX) y, paralelamente, se niegue en rotundo a dar respaldo institucional a un proyecto valenciano que compite, en concurrencia competitiva, con empresas de otros países que sí cuentan con el apoyo de sus gobiernos".
la CEV pidió a los partidos "la defensa clara de la colaboración público-privada" DE CARA A LAS ELECCIONES de mayo
La CEV, que cuenta con una comisión de colaboración público-privada presidida precisamente por el consejero delegado de Ribera Salud, Alberto de Rosa, es la organización empresarial que lleva la voz cantante en la defensa de este modelo de gestión en la Comunitat, hasta el punto que incluyó "la defensa clara de la colaboración público-privada" en un decálogo de peticiones a los partidos políticos de cara a las elecciones autonómicas.
El Consell resultante de esos comicios, sin embargo, aspira a una gestión puramente pública en materia sanitaria. Tal circunstancia, sumada a la escenificación del Gobierno valenciano contra la colaboración público-privada incluso ante la demanda de apoyo para acceder a un proyecto de estas características en el extranjero, convierten el caso de Ribera Salud en un significativo desencuentro entre la patronal y el Consell.
Como informó Valencia Plaza, Ribera Salud se encuentra en la final, junto a otras cinco firmas, para adjudicarse la construcción, dotación y gestión del Hospital de Bratislava, que requeriría una inversión de alrededor de 250 millones de euros. Como informó este periódico, el vencedor asumirá la gestión durante 30 años, lo que eleva la facturación prevista a la friolera de 6.000 millones de euros, según estiman fuentes de Ribera Salud.
La firma sostiene que la adjudicación repercutiría en la autonomía en aspectos concretos como la construcción, la adquisición de los equipamientos o la contratación de personal, para las que se podría recurrir a empresas y recursos humanos de la Comunitat.
El Gobierno valenciano, sin embargo, se mantiene firme en sus convicciones: "No vamos a recomendarle a otro país lo que no queremos para la Comunitat", aseveró la vicepresidenta, Mónica Oltra, tras la rueda de prensa del Consell a preguntas de este diario.