El director de Riesgos de Ebury espera otra prórroga en la desconexión del Reino Unido de la UE y la convocatoria de unas elecciones generales en las islas
MADRID. Los eventos políticos eclipsaron, una vez más, las noticias económicas de la semana pasada en los mercados financieros. El optimismo estalló en dos frentes clave: las negociaciones del Brexit y el conflicto comercial entre Estados Unidos y China. Como resultado, los activos de riesgo en todo el mundo se recuperaron liderados, en el mercado de divisas, por la libra y la mayoría de divisas de mercados emergentes, con la notable excepción de la lira turca que cayó, bruscamente, tras la incursión turca en Siria.
Esta semana, la atención se centrará directamente en la evolución del Brexit. La Cumbre de la Unión Europea, el jueves y el viernes, ofrece la oportunidad de un acuerdo de última hora antes de la fecha límite del 31 de octubre. Sin embargo, todavía esperamos que tanto un aplazamiento como unas elecciones generales sean necesarias. No habrá muchas noticias en el calendario económico por lo que la producción industrial de la UE, que se conocerá el martes, quizás sea la publicación más importante de la semana
Los débiles datos económicos de Alemania y Francia no tuvieron ningún impacto perceptible en la moneda común la semana pasada que se benefició del optimismo general tras el aparente avance en las conversaciones entre Estados Unidos y China, obteniendo una modesta ganancia frente al dólar estadounidense. Esta semana, la producción industrial de la zona euro, normalmente una publicación de segundo nivel, podría proporcionar cierta volatilidad, especialmente si sorprende al alza y rompe el ánimo bajista que rodea a la economía europea. Aparte de eso, habrá varios discursos de los miembros del BCE que pueden arrojar luz sobre la falta de consenso en el banco central respecto a la última ronda de flexibilización política.
El conjunto de datos económicos mixtos la semana pasada tuvo poco impacto en el dólar estadounidense. La inflación de septiembre fue un poco más débil de lo esperado pero la confianza del consumidor sorprendió al alza. Asimismo, las actas de la última reunión de la Fed agregaron poca información nueva. Parece que el dólar estadounidense continuará a flote a medida que el alivio de la tregua entre Estados Unidos y China haga repuntar a los activos de riesgo, al menos, hasta la próxima reunión de la Fed el 30 de octubre.
El aparente avance en las negociaciones del Brexit a finales de la semana trajo un aumento del optimismo en los mercados de divisas. Los datos económicos mixtos (ventas minoristas deficientes y PIB mensual mejor de lo esperado) se ignoraron en gran medida a raíz de la noticia. Las fuentes de la Unión Europea intentaron enfriar las expectativas durante el fin de semana pero las probabilidades de un Brexit sin acuerdo el 31 de octubre se han reducido a alrededor del 12%. Seguimos opinando que será necesario un aplazamiento y unas elecciones generales pero simplemente descartar la opción de no negociar justifica el alza de la libra, más cerca del 1,28 por dólar. La reunión del Banco de Inglaterra el jueves podría proporcionar cierta volatilidad.
Enrique Díaz-Álvarez es director de Riesgos de Ebury