VALÈNCIA (EP/CP). Si usted visita durante los próximos días el IVAM, es probable que le sorprenda leer sobre sus habitualmente impolutos muros el siguiente mensaje: 'La democracia de Fraga es como follar en bragas'. Pero no es el único. 'La primavera ha llegado y el P.C. no se ha enterado', 'Ni grises ni sociales, porros populares', 'Folleu, folleu que el mon s'acaba', etc. Estos son algunos de los lemas contraculturales que ocupan el museo desde hoy mismo. A través de un recorrido plagado de portadas de revista, pintadas callejeras, fotografías, cine y fanzine, carteles, cómic, música e incluso las Fallas, el IVAM se plantea cómo desde la alta cultura y la cultura del pueblo se propusieron "alternativas a todas las ortodoxias de la época", un homenaje a la contracultura valenciana que emergió entre los años 60 y 80 y a aquellos hombres y mujeres artistas que "nos enseñaron a soñar que otro mundo era posible y que podíamos cambiar la vida cotidiana".
Contracultura: resistencia, utopía y provocación en València es el título de nombre a esta exposición, comisariada por Alberto Mira, que se podrá visitar el 17 de mayo en la Galería 7 del museo valenciano. Durante su presentación, el director del IVAM, José Miguel G. Cortés, ha puesto en valor la tarea de aquellas personas: "Veníamos de un poco negro y nos ayudaron a entender que la vida podía tener más colores y ser divertida". Aquella gente "rompió los límites cerrados luchando por una ciudad más libre", ha subrayado. También el comisario de la muestra Alberto Mira ha querido reivindicar aquella contracultura valenciana con señas de identidad propias más allá de la que surgía en otros lugares, con sus referencias a la huerta, las fallas, el Estatut y los problemas que le atañen.
Aquellas expresiones artísticas "nos enseñaron a pensar de maneras diferentes. El legado de esa contracultura es que somos un poco más abiertos y dialogantes, es saber asimilar lo que tenemos alrededor sin poner barreras demasiado rígidas" y esta exposición "nos recuerda que el diálogo es posible, que no se rompe el mundo si dialogamos y nos abrimos un poco, que a veces me la impresión que está un poco amenazado", ha resaltado el comisario. Así, Mira ha instado a "abrazar lo que sucedió, que ya es parte de nosotros" y ha animado a "aprender" de la muestra porque "estamos viendo ahora que de la misma manera que avanzamos" y "no hay que volver atrás, hay que seguir con los frentes", ha defendido.
El recorrido expositivo se divide en siete secciones que ponen de manifiesto cómo el arte se empeñó en superar los límites de las presiones políticas, cómo la calle habló y cómo algunos artistas se expresaron contra las convenciones que se imponían. La primera parte 'La contra desde los márgenes: imágenes y letras' muestra el trabajo del Equipo Crónica (en obras como Aquelarre 71, insiprada en cómics de super héroes), el trabajo de Escapular-O, de Martín Caballero o los juguetes politizados de José Maria Gorris y la referencia a los juegos de mesa de Isabel Oliver. Son ejemplos de una mirada irónica, intersexual y provocativamente política.
También aparece la película experimental Orfeo filmado en el campo de batalla (Antonio Maenza, 1969), arte gráfico, literatura y ensayo, con trabajos de Rafa Gassent, Lluís Fernández, Amadeu Fabregat, Rafa Ventura Meilà e Isa Tròlec.
La muestra sigue con 'La fiesta contra la domesticación o Bajtín en València'. Según Mira, desde mediados de los 70 se encuentran iniciativas que reflejan un modelo festivo diferente y una "actitud más carnavalesca que no rehuye la protesta ideológica" como la Falla King Kong. Entre los cómics del momento, El Gat Pelat propone una mirada irónica sobre el fenómeno fallero: sensual, provocadora y algo caótica. También se recuerda al cineasta Carles Mira con películas como 'La portentosa vida del pare Vicent', 'Con el culo al aire' o 'Que nos quiten lo bailao'.
La tercera sección 'Trazos a contrapelo: el cómic disidente' repasa piezas como Lupe Veloz de Equipo Realidad, Polvorón Polvoriento de Mique y Reme Beltrán, Noel y Leonardo y entronca con la tradición underground USA. También incluye El Gat Pelat, Tebeus del cingle y publicaciones en las que participó Miquel Calatayud.
No falta el apartado dedicado a las 'Miradas contra el patriarcado'. Junto a la lucha en la calle por los derechos, el feminismo trabaja a través de la estética para cuestionar estereotipos que limitan y deforman imágenes de la mujer, como se muestra en La Serie Misses de Ángela García Codoñer o la obra de Isabel Oliver.
Le sigue 'La Recontra. Rampova: desobediencia e impertinencia', una mirada sub-cultural presidida por Anastasia Rampova que abarca collage, diseño, canción y performance cabaretera.
El 'Contrapunto: punk valenciano y la cultura de calle como estética' en València se recuerda a través de grupos como Interror, Seguridad Social, La Resistencia y Generación 77. Locales como Planta Baja o Garaje eran espacio de convergencia de una subcultura que proponía música antisistema. Como colofón, 'Contragenéricas, conrasexuales' revindica a València como "capital del transformismo" con locales como La Cetra que se convirtió en uno de los espacios donde desplegaron su arte personalidades tan fascinantes como La Margot -personaje interpretado por el transformista Antonio Campos-, Encarnita Duclown, Sareta Sareta, La Xampan del País Valencià o Darling Lilies.
Para saber más