VALÈNCIA. La crisis sanitaria provocada por el coronavirus ha obligado a las administraciones a empezar a poner medidas especiales para evitar el contagio entre los empleados públicos, y entre estos y la propia ciudadanía. Por ello, por ejemplo, el Ayuntamiento de València ha suspendido la atención presencial y ha frenado los servicios no esenciales. Los que continúan funcionando lo hacen al 50% para poder guardar las distancias mínimas de seguridad. En la EMT de València, que dirigen el edil Giuseppe Grezzi y el gerente Josep Enric García, también han acordado medidas de seguridad, que desde los sindicatos consideran insuficientes.
Este miércoles día 25 se reunían los sindicatos con los representantes de la empresa en el ámbito sanitario en el llamado Comité de Salud. Entre las medidas que se acordaron, casi dos semanas después desde que se decretara el estado de alarma, se encuentra la realización de pruebas de temperatura en el Centro de Control, desde donde los inspectores controlan las líneas y mantienen un contacto más cercano. "Se medirá su temperatura y si dan más de 37,7 grados, deberán irse a casa y ponerse en contacto con el centro de salud, siguiendo el protocolo habitual", explican desde la empresa.
Los sindicatos solicitan que esta medida se amplíe a toda la sección de Operaciones, donde se encuentran todos los conductores. Con todo, la EMT ha rechazado esta posibilidad porque es en el Centro de Control "donde hay más riesgo por contacto personal", aseguran las mismas fuentes, para subraya más tarde que en el caso de los conductores "no se considera necesario porque no tienen contacto con otras personas". En este sentido, cuando se decretó el estado de alarma se aprobaron algunas medidas para restringir este contacto con los clientes: se prohíbe la entrada por la puerta principal y no se permite el pago en efectivo.
También se repartirán mascarillas a los trabajadores. El Ayuntamiento de València ha incluido a la EMT en las empresas que tendrán este instrumento. Se espera que lleguen en la segunda semana de abril y estarán acompañadas de guantes, al menos en el área Técnica, donde se reparten ya en paquetes de 20. Los sindicatos exigen más y que los guantes también se entreguen a los conductores para el relevo en las líneas. Eso sí, se ha fijado un protocolo para la actuación en los equipos de aire acondicionado, cuya manipulación requerirá obligatoriamente mascarillas homologadas y guantes.
Por otro lado, se estableció que cuando un autobús se retire a cochera por avería o "por simple retiro", no vuelva a salir hasta el día siguiente, lo que permite más tiempo a los equipos de desinfección. Así pues, a autobuses retirados por circunstancias especiales se les dará un tratamiento de desinfección específico.
Todas estas medidas, entre otras, empezarán en los próximos días. Según se informó en el mencionado encuentro, hay casos de trabajadores de la EMT confinados por presentar síntomas propios del coronavirus, si bien no se les ha realizado la prueba y no se ha constatado, por tanto, ningún resultado positivo. En los sindicatos las cifran en ocho personas, la empresa habla de cinco. En todo caso, pertenecen al área de Operaciones, formada por conductores, inspectores e inspectores jefe.
"Todos están evolucionando bien y se les hace seguimiento", explicaron las organizaciones sindicales que se les dijo en el Comité. Fuentes de la EMT confirmaron la existencia de estos casos pero subrayaron que no existe ningún positivo y que no se puede hablar de ningún foco de infección en la empresa. Los empleados con síntomas han sido enviados a casa "por precaución", señalan en la empresa, "como en todas partes cuando alguien siente algún síntoma".