VALÈNCIA. Tras años de inestabilidad, el Teatro Escalante empieza a despejar las dudas sobre su futuro. Primero sobre su sede, luego sobre su dirección y, ahora, sobre su proyecto educativo. El pasado mes de agosto la sala dependiente de la Diputación de València inició el proceso para la licitación de la gestión de la Escuela Escalante, un proceso que está a punto de concluir y que, si no hay cambios de última hora, recaerá en la Escuela del Actor. Y es que es la Escuela del Actor el único licitador concurrente en el proceso, que cerró el plazo de presentación de ofertas el pasado 2 de septiembre.
Solo la Escuela del Actor opta a la gestión, un servicio cifrado en un total de 96.800 euros (sin impuestos), un proyecto que no sería novedad para ellos, pues se han encargado del mismo en los últimos años. Con la finalización del contrato se abrió un nuevo proceso de selección que previsiblemente llevará a la Escuela del Actor a gestionar el proyecto educativo del Escalante de nuevo y hasta 2023. Entre los objetivos plantea la Diputación se encuentra el impulso de la Escoleta de teatro, de la Escuela Permanente de Formación para profesionales de artes escénicas, así como la creación de seminarios. De igual forma, también se incide en el proyecto Teatro Inclusivo, impulsado en estos últimos años, cursos de interpretación y expresión corporal destinados a personas con necesidades especiales.
Una vez finalice el proceso de contratación, el teatro ganará en una estabilidad que necesita por varias bandas. La primera, en su dirección. Hace apenas unos días que la Diputación desveló, tras años de cambios en la dirección, su solución definitiva para evitar el vaivén de gestores. La administración provincial abrirá un proceso de selección abierto únicamente a funcionarios a través del que se quiere dotar de un director 'fijo' al teatro.
La segunda cuestión clave es la de la sede. Tras cinco años deambulando por distintos escenarios de la ciudad, la Diputación ha dado respuesta al problema con el compromiso de levantar una nueva sede, un inmueble que se ubicará en un solar entre las calles Vicent Tomás i Martí y Xiprers, en el entorno del Nou Mestalla, y que costará aproximadamente cinco millones de euros. El proyecto, aunque acaba con la incertidumbre, no acabará a corto plazo con la itinerancia, pues se estima un plazo de ejecución de entre 45 y 47 meses, una vez se ponga en marcha.