MADRID/VALÈNCIA, (EP). Los sindicatos de estibadores y la patronal Anesco se reúnen este martes 13 de junio para retomar la negociación del nuevo convenio tras la reforma del sector, después de los tres días de huelga de la pasada semana y en vísperas de un paro continuado de 48 horas que comienza el miércoles.
Se trata de la primera reunión desde que el pasado 1 de junio las dos partes rompieran la negociación y los sindicatos del gremio (Coordinadora de Trabajadores del Mar, CCOO, UGT, CIG y CGT) convocaran un calendario de tres semanas de paros en los puertos. Las tres primeras jornadas de huelga, las secundadas el lunes, el miércoles y el viernes de esta pasada semana, registraron un seguimiento masivo por parte de los estibadores.
Los puertos lograron no obstante mantener cierta actividad gracias a que las empresas organizaron sus operaciones de carga y descarga en las horas que no estaban afectadas por el paro, convocado en las horas impares, y al cumplimiento de los servicios mínimos. A pesar de ello, los tres día de paro ocasionaron una pérdida de 36 millones de euros, según el Ministerio de Fomento. El coste se reparte entre toda la cadena de agentes que operan en los puertos, desde las empresas de estiba hasta al transporte, tanto en camión como en tren.
Además, según el Departamento que dirige Íñigo de la Serna, la conflictividad en los puertos ya ha provocado desvíos de tráficos, como los comunicados por la multinacional Maersk en el puerto de Algeciras, el primero del país.
A la espera del resultado de la reunión del martes, los sindicatos de la estiba mantienen aún convocada la huelga de 48 horas consecutivas de esta semana(entre las 8.00 horas del miércoles 14 y las 8.00 horas del viernes 16), además de otros tres días de paros parciales la siguiente (los días 19, 21 y 23 de junio).
En la actualidad, el principal punto de conflicto entre la patronal y los sindicatos reside en la petición de los trabajadores de que, tras la reforma, se garantice el empleo a todo el colectivo de estibadores. De hecho la ruptura de la negociación de hace quince días tuvo lugar porque, según las organizaciones sindicales, las empresas variaron su actitud en relación con el compromiso de garantía de empleo que habían manifestado anteriormente.
No obstante, las dos partes mantienen otros dos puntos de desencuentro. Por un lado, las empresas rechazan la pretensión sindical de que participen en los centros portuarios de empleo (CPE), ETT's herederas de las actuales sagep. Consideran que contravendría la libre competencia y la actual reforma del sector, que fija como voluntaria esta concurrencia. De su lado, los sindicatos no aceptan la intención empresarial de abordar negociaciones colectivas puerto a puerto paralelas a la del convenio estatal.
El conflicto de la estiba, que ya se prolonga más de cuatro meses, se encuentra en su momento más critico casi un mes después de que el Gobierno lograra aprobar en el Congreso el Decreto Ley con el que ha reformado el sector para adecuarlo a la normativa europea, evitar una multa de la UE y mejorar la competitividad de los puertos.