MADRID (EP). La fibrilación auricular (FA) sin diagnosticar es una causa directa de ictus, concretamente, esta arritmia es la responsable de entre un 35 y un 40 por ciento de los ictus, siendo los asociados a esta patología "más extensos y más graves", según el jefe de Servicio de Neurología del Hospital Universitario Lucus Augusti de Galicia, Robustiano Pego Reigosa.
El número de nuevos casos anuales de ictus es de más de 134.000, de ellos, el 20 por ciento están causados por la FA, según datos de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), lo que muestra la relación entre ambas patologías y la necesidad de sensibilizar a los ciudadanos sobre la detección de sus síntomas.
La FA es una condición en la que el corazón late irregular y rápidamente. Cuando esto sucede, la sangre puede acumularse y hacerse más espesa en las cámaras del corazón, causando un mayor riesgo de coágulos sanguíneos, que pueden romperse y viajar hasta el cerebro, donde tienen el potencial de causar un ictus.
De acuerdo con el jefe de Servicio de Cardiología del mismo hospital, Carlos González-Juanatey, su prevalencia aumenta con la edad (hasta casi un 20% de la población mayor de 80 años en España tiene FA) y suele presentarse en personas que tienen hipertensión arterial, cardiopatía isquémica o insuficiencia cardiaca, patología tiroidea o enfermedades pulmonares que provoquen sufrimiento del músculo cardiaco.
Este es el tipo más común de trastorno del ritmo cardíaco y se asocia con una morbilidad y mortalidad sustancial. Concretamente, se estima que 8,8 millones de europeos sufrieron fibrilación auricular en 2010 y se espera que esta cifra se duplique al menos en los próximos 50 años, según el estudio 'Recent developments in atrial fibrillation'.
En cuanto a la población española, la FA afecta al 4,4 por ciento de la sociedad, lo que significa que 1.025.000 personas mayores de 40 años padecen esta arrtimia en España, según datos del estudio 'OFRECE'. En muchas ocasiones, la fibrilación auricular se caracteriza por la ausencia de síntomas, por lo que un 10 por ciento de los afectados están sin diagnosticar y carecen de tratamiento, aumentando su riesgo de enfermedad cerebrovascular.
Sin embargo, el diagnóstico de la FA es sencillo, ya que se realiza con un electrocardiograma. Las molestias que puede producir son muy variadas, la más frecuente son las palpitaciones, una sensación incómoda del latido del corazón en el pecho, generalmente rápido e irregular. "El principal problema es que, en algunos casos, los síntomas pasan desapercibidos y el diagnóstico se realiza tras haber presentado un evento grave: un ictus", recalca el especialista.
No obstante, Pego Reigosa destaca que los nuevos tratamientos anticoagulantes (ACODs) permiten un mejor control del paciente con fibrilación auricular. "Superan en gran medida las desventajas que se habían asociado a los anticoagulantes clásicos", antagonistas de la vitamina K.
Los nuevos anticoagulantes tienen "una mayor ventana terapéutica, escasas interacciones, y proporcionan una anticoagulación rápida, constante y predecible sin necesidad de monitorizaciones periódicas", añade. Además, "reducen significativamente el riesgo de ictus o embolia sistémica con respecto a los antagonistas de la vitamina K con un menor riesgo de hemorragia grave", puntualiza el doctor.
Por todos estos motivos, el Hospital Universitario Lucus Augusti de Galicia, con la colaboración de Daiichi Sankyo, albergará la campaña para pacientes '¿Eres candidato a un ictus? Detectar la fibrilación auricular a tiempo puede salvarte la vida', que tiene por objetivo concienciar sobre esta arritmia cardiaca. Esta iniciativa tendrá lugar este jueves 24 de enero en el centro de nueve de la mañana a dos de la tarde.
Esta iniciativa de Daiichi Sankyo ha permitido, hasta el momento, informar a más de 1.500 personas de si están en riesgo de ictus por sufrir fibrilación auricular. Consiste en realizar de manera gratuita un electrocardiograma al paciente mediante el uso de la tarjeta de cribado 'Kardia' o 'Wecardio'.