En ese crecimiento ha influido la apuesta del Banco Sabadell por el sector, lo que le ha llevado a ser un referente en financiación y asesoramiento desde hace veinte años
VALÈNCIA. La franquicia española sumó, en 2018, su quinto año consecutivo de crecimiento en todas sus variables: número de redes, de establecimientos, de empleos generados y de facturación. En la actualidad, es un un sector donde existen 1.376 marcas (de las que el 82% son españolas), 77.400 establecimientos de franquicias, factura unos 27.700 millones de euros y genera 294.000 puesto de trabajo directos, según datos de la Asociación Española de Franquiciadores.
Por sectores, y como ya es habitual en los últimos años, el que mayor facturación obtuvo fue el de Alimentación, con un total de 9.695,9 millones de euros. A continuación le siguen Hostelería/Fast Food, actividad que facturó 2.790,9 millones; Hostelería/Restaurantes/Hoteles, que facturó 2.485,2 millones de euros, y Servicios/Transportes, cuya facturación fue de 1.374,9 millones de euros en 2018.
Se trata de un modelo consolidado, incluso en los años de la crisis económica tuvo un buen comportamiento, y donde la tasa de éxito es mayor que la media principalmente por dos motivos. Por un lado suele ser un modelo testado, que permite que el franquiciado encuentre más ventajas en la gestión. Por otro lado, es un modelo considerado más seguro para conseguir financiación.
En este sentido cabe destacar la labor del Banco Sabadell, la primera entidad en apostar por la franquicia, a mitad de los 90. “Los profesionales de Banco Sabadell fuimos pioneros y estamos orgullosos de sentirnos como uno de los líderes que intervienen en este modelo de negocio, en esta parte de la economía de nuestro país que cada vez tiene más sentido y peso”, señalan desde la entidad. El banco decidió apoyar este modelo de negocio y financian tanto la expansión de los franquiciadores como la apertura de los nuevos negocios por parte de los franquiciados.
De hecho, fue la primera entidad en contar con una unidad específica para la gestión de este tipo de negocios, hace veinte años, lo que le ha llevado a convertirse en referente con alto reconocimiento en el mundo de la franquicia por ser muy activo comercialmente y con amplia experiencia. Por ejemplo, los directores están especializados por segmentos de actividad, “eso nos permite conocer mejor sus características para poder ajustarnos en mayor y mejor medida, y así ofrecer una mejor financiación o servicio, a la vez que nos ayuda a tener una buena relación con las marcas y mejorar el numero de prescripciones”.
Otra de las características del sector de la franquicia española es la escasez de conflictos. Según el Observatorio de Jurisprudencia de Franquicias en España, elaborado por Comité de Expertos Jurídicos de la Asociación Española de Franquiciadores, en el periodo comprendido entre 2010 y 2018, la litigiosidad media fue de tan solo del 0,09%. En total el sector suma 388 sentencias, aunque el informe reconoce que probablemente existen más controversias que las judiciales, “pero el hecho de que no acudan al auxilio judicial para resolver sus diferencias demuestra que los sistemas de mediación, negociación y/o conciliación tienen éxito y permiten resolver las diferencias entre las partes de forma razonable”.
El análisis por ejercicios demuestra que el número de sentencias dictadas se mantiene en un rango estable durante los ejercicios 2010 a 2017, con una leve disminución en los ejercicios 2015 a 2017 y un repunte en 2018, que ha sido el año en el que más controversias han llegado a la audiencia provincial.
Curiosamente 2018 también fue el año en el que se recuperó el buen ritmo de aperturas, especialmente de establecimientos franquiciados, con 2.975 nuevos negocios. Esto, según el informe se debe a dos motivos, la recuperación de la economía y al regreso en la concesión de créditos por parte de las entidades bancarias, un aspecto fundamental para un sistema que, como es el de franquicias, se basa en el crecimiento y la expansión de las redes.
En este sentido, el compromiso de Banco Sabadell con el sector permitió que muchos de estos negocios encontraran financiación en los años más duros de la crisis, ofreciéndoles productos específica. La entidad mantiene un importante número de contactos con empresas franquiciadoras, enfocados al establecimiento de acuerdos de colaboración para el desarrollo de sus redes, con potenciales inversores, profesionales y personas con interés en abrir una franquicia y desarrollar esta fórmula de autoempleo con más garantía de éxito. Y, además, la dirección de Franquicias de Banco Sabadell ofrece un servicio personalizado y adaptado a las necesidades del negocio tanto a franquiciadores como a franquiciados, asesorándoles en todo el proceso.
Ese compromiso de Banco Sabadell también se ha hecho extensivo con los demás agentes que operan en el sector, como consultoras especializadas, la Asociación Española de Franquiciadores, de la que fue el primer socio colaborador, así como a los certámenes más importantes relacionados con la franquicia, como Expofranquicias o SIF, donde lleva 20 años participando, así como en los diferentes “Franquishops” que se celebran en ciudades del territorio nacional. Desde la entidad aseguran que “este liderazgo nos obliga a seguir siendo creativos, a buscar y lanzar productos y servicios vinculados a la franquicia, a estar muy cerca de las marcas, a mantener un contacto constante con ellas para conocer sus necesidades y sus propósitos, y a la vez a estar cerca de toda su estructura de expansión, o sea del franquiciado”.