VALÈNCIA. (EP) La 'vuelta al cole' del curso 2023-2024 estará marcada por la implantación total de la LOMLOE, la ley educativa conocida como Ley Celaá; el aplazamiento de la nueva Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), que seguirá igual que el modelo anterior el próximo curso; la subida de los precios de los libros y el material escolar debido a la inflación; o la incertidumbre política tras las elecciones al estar el Gobierno en funciones y los cambios de gobiernos regionales.
Este mes de septiembre iniciarán el nuevo curso más de 759.000 trabajadores de personal docente, complementario y de administración y servicios y más de 8 millones de alumnos de centros públicos, concertados y privados en centros educativos no universitarios.
Los alumnos de Educación Infantil y Primaria de la Comunidad de Madrid y los de Infantil, Primaria y Secundaria de Cataluña serán los primeros el volver al colegio tras las vacaciones de verano, ya que sus clases comenzarán el próximo 6 de septiembre, según datos de las comunidades autónomas recopilados por Europa Press.
Las modificaciones introducidas por la Ley Celaá se implantarán este año en los cursos pares de Educación Primaria, Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, después de que durante el curso pasado se implantara en los cursos impares.
La "incertidumbre" por la implantación de la LOMLOE o por cómo será la nueva prueba de acceso a la Universidad, aplazada por el Gobierno al no poder sacar adelante el real decreto al estar en funciones, así como la subida del material escolar, son algunos de los aspectos que más preocupan a los padres y madres de los alumnos españoles.
"Volvemos a empezar un curso con la incertidumbre de un nuevo Gobierno, con la incertidumbre de la implantación total de la nueva ley y los problemas que está conllevando y que nos manifiestan los profesores, que tienen dificultades a la hora de implementar la nueva ley", ha advertido en declaraciones a Europa Press la presidenta de la Confederación de Padres y Madres de Alumnos (COFAPA), Begoña Ladrón de Guevara, quien también avisa de que las familias todavía no saben "cómo va a ser" la prueba final de la EBAU, que finalmente seguirá el modelo anterior, a pesar de que los alumnos de Segundo de Bachillerato estudiarán este curso el modelo de la LOMLOE.
Para la presidenta de COFAPA es "especialmente preocupante" la incertidumbre a la que se enfrentan este curso los alumnos de Segundo de Bachillerato, al tratarse de un curso "muy delicado" que define las posibilidades de los estudiantes a la hora de elegir una carrera o una Formación Profesional. "Es más importante que nunca estar al tanto de lo que sucede con nuestros hijos en el colegio, de cómo desde casa les podemos ayudar y de cómo podemos trabajar en equipo junto con los profesores", propone Ladrón de Guevara, al tiempo que apela a "esa unidad y esa confianza en los centros y en la imprescindible labor diaria de los profesores".
Con motivo del inicio de un nuevo curso, las familias deben hacer frente a la compra de los libros de texto que, en España, son los más caros de Europa con un precio medio de 22,15 euros por libro, según un estudio elaborado por Idealo.es realizado el pasado mes de agosto.
A pesar de que España lidera el ranking europeo con los libros más caros, tanto Italia como Francia le siguen de cerca. En el caso de los italianos, destinan unos 21,54 euros por cada libro y, respecto a los franceses, el precio medio ronda los 20,94 euros por manual. Por otro lado, Alemania es el país con los libros de texto más baratos de Europa, ya que el precio medio apenas alcanza los 16,98 euros, lo que supone un 30% menos que en el caso español.
Las familias españolas gastarán 410,71 euros de media por alumno por la 'vuelta al cole', 5 euros más con respecto al año pasado (405,07 euros), según un estudio de Banqmi que precisa que en la Comunidad Valenciana, la más cara, pagarán alrededor de 465,55 euros, mientras que en Extremadura gastarán 383,38 euros de media por alumno.
La situación política actual tras las elecciones generales celebradas el pasado 23 de julio, con un Gobierno en funciones, es una de las principales preocupaciones para los estudiantes. Así, el presidente de la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (CANAE), Antonio Amante, ha señalado que "se puede dar la situación de que haya un Gobierno en funciones prácticamente para todo el curso académico", algo que, para los alumnos, es una situación "bastante preocupante".
Como consecuencia del adelanto electoral y la disolución de las Cortes Generales decayó la Ley de Enseñanzas Artísticas Superiores, una norma, según apunta Amante, "muy trabajada" por el colectivo estudiantil. "Creemos que es una norma que tiene que salir adelante, sea el Gobierno que sea, es algo que no puede caer en saco roto", apostilla.
En referencia a la subida de los materiales escolares, el presidente de CANAE reclama que todas las comunidades autónomas aprueben leyes que "permitan la gratuidad completa de la Educación". "Si queremos que los estudiantes permanezcan en el sistema educativo, que sigan formándose, no podemos seguir poniendo trabas a ese proceso de aprendizaje. Por lo tanto, creemos que los materiales deben ser gratuitos", sentencia.
Ante el comienzo del curso escolar, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha pedido un gran Pacto de Estado que dote a la Educación de estabilidad en momentos de incertidumbre política.
Así, el presidente del Sector Nacional de Educación de CSIF, Mario Gutiérrez, ha afirmado que a los problemas que ha generado la LOMLOE "se suman ahora los derivados de la incertidumbre política que han dejado los resultados de las elecciones" generales del pasado 23 de julio. "Nos encontramos con que, por ejemplo, no sabemos cómo se van a examinar o qué EBAU van a tener los de Segundo Bachillerato, comenzado el curso", avisa.
Por su parte, la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE), ante el comienzo de un nuevo curso, ha manifestado su preocupación por la viabilidad de la pluralidad educativa "ante la indefinición y la parálisis en la toma de decisiones, ocasionada por la situación política generada tras los resultados de las últimas elecciones generales".
Para el secretario general del sindicato, Jesús Pueyo, la situación política "no es el mejor de los escenarios para comenzar y afrontar un curso tranquilo y estable en el que, además, deben seguir aplicándose los calendarios de la LOMLOE y la Ley de Formación Profesional". "El profesorado y los centros necesitan estabilidad y seguridad normativa para poder desarrollar su trabajo", reclama Pueyo.