VALÈNCIA. Desde este 1 de enero Reino Unido ya no forma parte de la Unión Europea. Una ruptura que abre la puerta a muchas incógnitas para las empresas sobre las relaciones comerciales con este mercado. Un nuevo tablero de juego se cierne sobre muchas compañías valencianas que han hecho del Reino Unido un destino importante de su negocio. Pero también se abren destacables oportunidades para la inversión. "El éxito dependerá de cada empresa. Si tienes producto y calidad, triunfarás", subrayó José Vicente Morata, presidente del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana y presidente de la Cámara de Comercio de Valencia.
Así se puso de manifiesto en el debate organizado por Valencia Plaza y el Club Internacional Cámara Valencia, en el que se analizaron las repercusiones del Brexit para las empresas valencianas. Oportunidades, búsqueda de partners, inversión y la ventaja de la proximidad fueron algunas de las claves que se pusieron encima de la mesa.
A la cita asistieron de forma presencial, además de José Vicente Morata en representación de la Cámara valenciana; Paco Martí, corporate quality & food safety manager de Dacsa; Sergio Prieto, sales manager de Tableros Folgado; Rafael Olmos, CEO de Zummo. También estuvieron presentes en formato online Igor Urra, secretario general de la Cámara de Comercio de España en Reino Unido; Nicolas Viaud, export manager de Vicky Foods y Jorge Martí, abogado del despacho Uría Menéndez.
El debate arrancó con la intervención de Morata, quien destacó la importancia de contar con un tejido empresarial competitivo para hacer frente a cualquier tipo de desafío. En este sentido, resaltó el papel de la exportación como palanca de salida de cualquier crisis por su papel tractor en la generación de riqueza y empleo. "Nos salvó de la crisis anterior y nos debe ayudar también en esta", reivindicó. Por ello, lamentó que "ni una sola ayuda europea" esté dirigida hacia la exportación. En cualquier caso, para Morata será cada empresa la que decidirá su propio éxito, no solo en el mercado británico, sino en la nueva coyuntura económica tras la pandemia. "Si tienes producto y calidad, triunfarás", recalcó.
Si en algo coincidieron la mayoría de empresas participantes es que el Brexit dibujará un nuevo tablero de juego, con ganadores y perdedores, porque muchos saldrán del mercado británico. Por tanto, se abre una ventana de oportunidades para la industria. Aunque también habrá incertidumbres. "Dependerá mucho del producto, sector y condiciones de acceso que tenga cada país al mercado británico, aunque sí habrá una mejora en la inversión", apuntó Igor Urra, secretario general de la Cámara de Comercio de España en Reino Unido.
Además, afirmó que los británicos son "muy pragmáticos" y, en la medida en que convengan a su economía ciertos tratados y acuerdos con la Unión Europea, intentarán mantenerlos, especialmente por su cercanía. "La geografía es la que es y se negocia más con países que están más cerca. La realidad del Reino Unido es que importa el 50% de sus alimentos y siempre les saldrá más barato que sea de sus vecinos. Eso no va a cambiar", recalcó. Por tanto, apuntó a esa proximidad como una ventaja competitiva para que las empresas valencianas puedan hacerse un hueco en el mercado. "A medida que se firmen acuerdos de libre comercio se producirá este juego de entrada de nuevos competidores", incidió.
Desde Dacsa, empresa con fábrica en Inglaterra, Paco Martí, manifestó que "siempre que hay una crisis hay oportunidades". "Poner trabas al comercio no va a ayudar a nadie, pero sí hará ver la realidad de otra manera", señaló. Por ello, consideró que hay que apoyarse en los clientes y conseguir partners británicos para una mejor penetración y arraigo en ese mercado. Eso sí, puntualizó que todo dependerá del negocio de cada compañía. "Cada uno tiene su modelo de negocio y necesitará una solución diferente sobre si debe producir en Reino Unido o, en cambio, contar con un distribuidor. Será en función de las necesidades", apostilló.
De hecho, los participantes manifestaron que ahora, con el Brexit, la empresa española que se instale en el Reino Unido lo tendrá más difícil. Además, la llegada de talento se frenará. No obstante, Martí aseguró que se buscarán métodos para atraer y retener perfiles concretos "más pronto que tarde", de la misma forma que la administración intentará mantener acuerdos con la UE que "le sean rentables" y "no lesionen su situación". Aunque también avisó: "Si ven ventajas en hacerlo con otros, renegociarán las condiciones y entonces habría que ver eso cómo impacta en las empresas".
Por su parte, Rafael Olmos, CEO de Zummo, mostró su preocupación por el futuro próximo y las "trabas" que las empresas empiezan ya a encontrarse. "Tendremos que ir amoldándonos, porque por ahora vemos mucha incertidumbre. Aunque por el momento más por culpa de la pandemia, porque los efectos del Brexit están aún por conocerse", admitió.
En su caso, la empresa está muy centrada en el canal Horeca y el retail, dos de los sectores más perjudicados por las restricciones. "Los hoteles están cerrados y la restauración también. Esta situación del Brexit se ha juntado con la covid y realmente lo que ahora mismo vamos a hacer es centralizar nuestros esfuerzos en el retail para tratar de que pase este año. No hay ninguna gran cadena de hostelería para realizar ninguna renovación de equipos o aperturas. Reino Unido es el sexto comprador de maquinaria de hostelería y su mercado está fatal", manifestó.
Sergio Prieto, de Tableros Folgado, aseguró que, por el momento, no han detectado una caída de las ventas a Reino Unido. Incidió en que posiblemente la Administración británica podría promover inversiones para favorecer el consumo doméstico y, en este sentido, resaltó la importancia de enfocar los productos en función de esa posible nueva demanda. "Hay que tener claro que tenemos la ventaja competitiva de la cercanía para dar cabida a nuestros productos. Un pilar básico para consolidar la confianza del mercado británico y ser competitivos con respecto a otros posible proveedores va a ser la calidad y el servicio. Eso es lo fundamental", reivindicó.
Nicolas Viaud, export manager de Vicky Foods, se mostró expectante ante los cambios que podrían producirse, pero apuntó que en tiempos de incertidumbre también surgen oportunidades de inversión y desarrollo."Desde nuestro sector nos sentimos afortunados porque la gente sigue comiendo y los productos siguen llegando al mercado británico", indicó. No obstante, también admitió que han aumentado las trabas arancelarias y los procesos de entrada son más largos. En cualquier caso, y dado que se trata de un mercado estratégico para la compañía, aseguró que seguirán su evolución para ver cómo se adaptan para seguir operando.
"La proximidad que tenemos siempre nos va a dar una ventaja frente a otros comerciantes de un mercado más lejano. Tenemos que sacar provecho de ella. Nuestro trabajo será ofrecer el producto que el consumidor está pidiendo. Como UE, España y Comunitat Valenciana tenemos que hacerles ver que nuestro producto es primordial para ellos", recalcó.
Desde el punto de vista legislativo, Jorge Martí, de Uría Menéndez, indicó que con las nuevas reglas de juego habrá que estar pendiente de cómo se aplican los contratos porque "no se podrá negociar con la misma libertad". Eso sí, a su juicio, para las empresas valencianas con filiales en Reino Unido no habrá, a priori, ninguna repercusión, porque esas compañías son "entidades de derecho inglés y no se les puede discriminar". A la inversa, es decir, filiales inglesas en España, tampoco les augura cambios. "Son empresas españolas a efectos fiscales. Y sus productos son españoles", subrayó.
El despacho ha aumentado su trabajo en su oficina de Londres porque las cuestiones jurídicas han tomado mayor relevancia y, según explicó, "ha habido un desplazamiento de Wall Street hacia Londres". "Muchos despachos americanos han trasladado sus cuarteles generales a Londres y esto hace de Londres un crisol no solo de fondos británicos si no también de japoneses y americanos. Y España es un mercado interesante para ellos", resaltó.