La ministra Calviño presenta en Bruselas la fusión de Bankia y Caixabank

BRUSELAS. La fusión de Bankia y Caixabank ha centrado el eje de la reunión que ha mantenido la vicepresidenta y ministra de economía española, Nadia Calviño, con cinco comisarios en Bruselas. Durante más de seis horas, se ha hablado especialmente de los presupuestos generales para 2021 y del plan de recuperación de la Unión Europea para hacer frente al Covid-19 en consonancia con las previsiones del ejecutivo de Pedro Sánchez.

La Comisión Europea ha urgido all gobierno español para “que tenga cuanto antes presupuestos generales”, ha explicado la ministra, con el fin de poder “articular el dinero de los fondos que llegarán el próximo año” y con los que se intentarán paliar las consecuencias de la pandemia. El gobierno español sigue trabajando con el último presupuesto del popular Mariano Rajoy, que ha ido prorrogando desde que accedió al poder con la moción de censura.

Al término de toda una jornada de reuniones con el ejecutivo en Bruselas, Calviño reconoció a preguntas de la prensa que también había presentado el plan de fusión de Bankia y Caixabank, dentro del plan de “consolidación bancaria” que está siguiendo España desde la crisis financiera de 2008. En este sentido, manifestó que la fusión de dos de los bancos más importantes del Estado no significa que el gobierno renuncie a tener una banca pública, en referencia a Bankia, de la que sólo ostentará el 14% si esta operación finaliza con éxito. “Ya tenemos un banco público, el Instituto de Crédito Oficial”, explicó Calviño, no queriendo entrar en esta polémica.

También evitó responder, a preguntas de los periodistas, sobre los 24.000 millones de euros que puso el gobierno español para Bankia a través del instrumento financiero europeo creado ad hoc en 2012, el MEDE, y que aún no ha recuperado. “No puedo especular  sobre la devolución de los 24.000 millones de euros porque aún están negociando ambas entidades”, comentó la ministra y vicepresidenta de Economía. También quiso dejar claro la intención del Gobierno de “maximizar el valor el valor de la participación del Estado dentro de la nueva entidad y favorecer el sector en su conjunto”.

El gobierno de Mariano Rajoy aceptó avalar el rescate de la banca española por parte de Europa, prometiendo que no “iba a costar ni un euro” a los ciudadanos”. Hace dos años, el Banco de España declaro que los más de 66.000 millones del rescate bancario no se iban a recuperar, como sí ha ocurrido en otros países donde los gobiernos han exigido a su sistema financiero la devolución o bien su participación mayoritaria en el accionariado para ostentar el control.

Confidencialidad

En cuanto a la cuestión de que parte del gobierno, respecto al vicepresidente y ministros de Podemos, no había tenido conocimiento de esta fusión y se habían enterado por la prensa, la ministra fue esquiva. Calviño apeló a las cláusulas de confidencialidad de esta operación y a las restricciones para hacerlo público con antelación.

Esta respuesta y la reunión en Bruselas, muestran lo avanzado de las negociaciones entre Bankia y Caixabank, que ya tendrían casi cerrada la fusión. Esta operación, explicó Calviño, ha sido bien vista por Bruselas, ya que desde la Comisión hace años que exigen a España que culmine el proceso de consolidación de su sistema financiero, tan tocado por la anterior crisis. 

Nadia Calviño declaró que les había “informado de que está en marcha este proceso fusión y que se enmarca dentro del proceso de consolidación del sector financiero, que tanto el Banco Central Europeo como la Comisión hace tiempo que nos piden”. También añadió que este proceso de reestructuración o consolidación no se refiere sólo a España, sino a “todo el sector en Europa”.

Por último, respecto a la llegada de los fondos del Plan de Recuperación post Covid-19, insistido en que aun falta por aprobar el marco normativo y financiero concreto y los nuevos instrumentos que creará la Unión Europea para que los Estados “articulen la ejecución de los fondos”. Serán la Comisión, el Parlamento y el Consejo los que aprueben este marco en los próximos meses, en un apretado calendario que aún está por definir.