La patronal autonómica guarda silencio sobre la situación de Coepa y Valencia reacciona con frialdad: "es una cuestión de responsabilidad legal"
VALENCIA. La patronal de Alicante (Coepa), que este miércoles formalizó la solicitud de preconcurso de acreedores, planteará al Consell la dación en pago del edificio que acoge su Centro de Cualificación para cancelar la deuda de 3,8 millones que arrastra con el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). Esta es una de las alternativas que plantea para esquivar su liquidación después de que el IVF instara el embargo de los bienes de Coepa por el impago del crédito que le concedió para construir ese centro. Si el Consell no acepta la dación en pago y tampoco se implica en dotar de actividad al centro a través del Servef para facilitar a Coepa la devolución del préstamo, la patronal alicantina asume que tendrá que ir a liquidación.
El presidente de Coepa, Moisés Jiménez, opinó este miércoles que la solución a la situación límite en la que se encuentra la patronal alicantina es una cuestión de "coraje político". "La deuda se puede devolver si damos actividad al centro. Si no se le quiere dar actividad, que se lo queden como dación en pago. Si no llegamos a un acuerdo se lo van a quedar de todas formas: con una dación en pago o con una liquidación de Coepa", lamentó el presidente de la organización en declaraciones a Valencia Plaza.
Jiménez explicó que la deuda se originó como consecuencia del crédito que la Generalitat "animó" a pedir a la patronal para construir este centro de 6.500 metros cuadrados levantado sobre una parcela de propiedad municipal y destinado a formación en prevención de riesgos laborales. La operación fue pactada entre Joaquín Rocamora, expresidente de Coepa, y el expresidente de la Generalitat, Francisco Camps.
Los problemas para devolver el crédito, según relató, se agravaron con el desplome de la actividad desde 2008. Coepa comenzó a negociar sin éxito la dación en pago con el anterior Consell. El actual conseller de Hacienda, Vicent Soler, recordó este martes que el nuevo Consell se encontró el expediente cerrado desde la anterior etapa y no tenía más alternativa que ejecutar el crédito. Los hechos se precipitaron cuando el presidente de Cepyme Alicante, abiertamente enfrentado a la actual dirección de Coepa, denunció ante la Fiscalía a la Conselleria de Economía y al IVF por no reclamar el impago a Coepa.
A juicio de Jiménez, ha existido un "miedo político" que ha jugado en contra de Coepa. El responsable de Coepa explicó que, cuando se formalizó la hipoteca, el inmueble se valoró en 5,5 millones de euros, por lo que insistió en la alternativa de la dación en pago. "Sería gracioso que Coepa fuera a liquidación por algo pactado con el anterior Consell", lamentó.
El presidente de la patronal alicantina relató que la solicitud de acogerse al preconcunso responde a su voluntad de protegerse de la solicitud de embargo del Consell, que incluso podría acabar salpicando a la patronal autonómica Cierval. "La demanda que nos han planteado tiene muy mala leche porque va a por todos los bienes", concreta Jiménez.
El empresario, quien recuerda que tomó las riendas de Coepa con una deuda de más de 4 millones de euros entre bancos y proveedores, defiende que en la actualidad la organización está estabilizada a falta de solucionar el problema del centro de formación.
"Coepa está limpia en este momento. Estamos esperando La ley de Participación Institucional, pero ya estamos en noviembre. Tenemos claro que tenemos que ser independientes desde el punto de vista económico, pero hace falta un tiempo", agrega.
El conseller de Hacienda, Vicent Soler, mostró este martes voluntad de diálogo con Coepa, pero evitó comprometerse en una solución política para la patronal aludiendo a que el IVF debe defender sus intereses. "Estaremos dispuestos a hablar de lo que sea, pero intentando que el IVF no sea una caja mal administrada", concretó Soler, quien dijo que la Generalitat hará "lo que pueda", pero que nadie espere "milagros".
El conseller reiteró que el IVF tenía a su llegada un 62% morosidad y preguntado por la voluntad política del Consell para salvar a Coepa respondió que lo que se tiene es "voluntad política para que el IVF actúe con criterios financieros, por supuesto, porque si no haremos mucho daño al IVF y a la economía valenciana".
La solicitud de preconcurso de Coepa fue recibida con frialdad en Valencia a pesar de que la patronal alicantina representa un porcentaje superior al 30% en la asamblea de la autonómica Cierval. El presidente de esta última, José Vicente González, eludió hacer cualquier tipo de valoración al escenario que se abre tras la declaración de preconcurso. Al cierre del pasado ejercicio, Coepa debía a Cierval más de medio millón de euros por cuotas pendientes de abono.
Por su lado, Salvador Navarro, presidente de la CEV, también evitó posicionarse al lado de Coepa a pesar de tener al lado al conseller de Hacienda, principal acreedor de la patronal alicantina. Navarro se limitó a asegurar que conocía la intención de Coepa y que la situación, en la que los administradores de la organización alicantina han actuado por "responsabilidad legal", se tratará en Cierval.
Por su parte, el presidente de Cepyme Alicante, Cristóbal Navarro, lamentó "tener razón sobre los pronósticos negativos" de la situación de Coepa. "Hubiese preferido equivocarme y que Coepa se pudiera salvar", dijo Navarro, que fue quien precipitó la demanda al amenazar con ir contra el Consell si este no actuaba para reclamar la deuda a Coepa.
"Los responsables se han encargado de pilotar una nave con el rumbo hacia un absoluto desastre, con el agravante de que llevamos mucho tiempo advirtiéndolo. Lo único que pretendían es ganar tiempo y aferrarse a un cargo para el que han demostrado no estar capacitados; han llevado a la ruina a la patronal con una administración nefasta y unas decisiones pésimas. No pretendían ganar tiempo para salvar a Coepa, sino ganarlo para ellos mismos", destacó Cristóbal Navarro en un comunicado.