VALÈNCIA. Fundación La Posta presenta el coloquio ‘Conversaciones Drag. Importancia y consolidación del arte drag en la escena cultural actual’ dentro su programación para la semana del Orgullo LGTBIQ+. En el acto participará Carlos Giménez y Mistress Scorpia, una conversación moderara por Alejandro Chust que tendrá lugar el 30 de julio –a partir de las 19.30 horas- en la sede de la fundación, ubicada en la C/Pintor Fillol, 2.
El coloquio tiene como objetivo analizar y debatir acerca del drag como expresión artística y fenómeno de masas, a través de una línea del tiempo que abarca desde los primeros transformistas hasta las drags más contemporáneas. La actividad, además, tiene el propósito de reivindicar muchas de estas figuras históricas y actuales, y establecer los parámetros o razones que han llevado a este colectivo a lograr el status de artista y su profesionalización.
“¿Qué es el drag? Su realidad es demasiado amplia como para establecer un significado claro o definir sus normas. Lo único certero es que el drag no está ligado a una cuestión de género o identidad sexual. Todas las personas sea cual sea su género o sexo biológico pueden hacer drag”, explican sus impulsores. A lo largo de los años el propio concepto y su significación ha adquirido nuevas connotaciones o sentidos. “En determinados contextos el drag también adquiere un carácter reivindicativo y político contra la norma establecida […] De igual modo puede contribuir a la exploración de las nuevas masculinidades, confrontar los estereotipos de género y hacer una crítica a la sociedad heteropatriarcal”.
Las primeras referencias al drag en el contexto contemporáneo las encontramos en el concepto “transformista”. El transformismo consistía en la imitación de un personaje, generalmente una folclórica, o la creación de un personaje cómico. Algunos pioneros del transformismo español de los años setenta y ochenta serán Paco España o La Margot, entre otros tantos. El paso de transformismo a travestismo se produce en la década de los noventa con el cambio de generación y la llegada de nuevos referentes, importados de Estados Unidos en su gran mayoría. El travestismo asume una nueva imagen, un personaje autocreado que inventa su propia performance. En ese contexto nace el concepto drag queen como fenómeno social y de masas.
Pero quizás el factor más determinante en la consolidación del drag en la escena cultural actual sea el programa de televisión Rupaul's Drag Race. Esta franquicia televisiva ha conseguido que el drag salga de los clubs nocturnos y aterrice en las casas de millones de personas. Esta apertura hacia nuevos públicos es lo que ha hecho cambiar la mentalidad de muchos espectadores, que valoran la capacidad de entretener, interpretar o cantar de estos artistas. Todas estas razones han contribuido a que el drag esté viviendo su momento de mayor difusión y éxito.