La reforma de los restaurantes del Paseo Marítimo de València empezará en otoño

VALÈNCIA. Los restaurantes del Paseo Marítimo ya tienen desbloqueado el camino para llevar a cabo las reformas previstas. Una docena de módulos de la playa de València esperaban a que el Ayuntamiento de València diera luz verde al cambio de las normas urbanísticas en la zona para poder empezar las obras. El consistorio aprobará la evaluación favorable a los cambios este viernes, según la edil de Urbanismo, Sandra Gómez, lo que permitirá iniciar las obras de reforma el próximo otoño, dijo, tras haber superado la época estival.

La concejalía de Urbanismo eleva este viernes a la Junta de Gobierno la aprobación de la evaluación ambiental para modificar el Plan Especial del Paseo Marítimo, donde están incluidos estos restaurantes. El lavado de cara que permite este cambio en las normas urbanísticas no es sólo estético, sino que también servirá para adaptarse en la normativa. Los módulos serán derribados para ser sustituidos por unas nuevas edificaciones.

En 2018 la Demarcación de Costas sacó a exposición pública los proyectos de reforma, pero algunos de los aspectos chocaban con el Plan Especial, que el Ayuntamiento ha modificado. "Hemos estado trabajando, de acuerdo con los propietarios de los locales, en el desarrollo de un modelo que pueda ofrecer mejor servicio", explicó la edil de Urbanismo este jueves. 

A la postre, la docena de bares y restaurantes tendrán un aspecto homogéneo, y previsiblemente serán módulos semi-prefabricados que habilitarán la primera planta como terraza. 150 metros cuadrados estarán cubiertos, y el resto -unos 30 metros cuadrados-, estará descubierto. También se podrá habilitar una terraza cerrada desmontable a pie de paseo de unos 50 metros cuadrados.

Además, una de las novedades trabajadas desde el consistorio es que al menos el 40% de la fachada de estas instalaciones será acristalada, lo cual permitirá una transparencia y evitará así que los bares funcionen como una "pantalla" visual entre el paseo y la playa. Así, se busca un diseño "abierto al mar e integrado".

Otra de las novedades es que el diseño estará adaptado para la instalación de placas solares en los techos, que están formados por planos inclinados. Era esta una voluntad de los propietarios de las concesiones y pese a las dificultades que ofrecía la ubicación de estos elementos en un techo irregular y que generaba sombras, al final se ha podido resolver, explicó la edil.

Para hacerse una idea, el proyecto planteado por la Demarcación de Costas en 2018 para cada módulo ascendía a un presupuesto inicial de 280.000 euros. Sin embargo, se desconoce si las modificaciones previstas tendrán repercusión en el coste de la reforma. Por el momento, tras la aprobación de la evaluación ambiental por parte del gobierno municipal, se abrirá un plazo de alegaciones y, a su término, se aprobará definitivamente el proyecto. De esta manera, al concluir el periodo estival, ya podrán comenzar las reformas el próximo otoño.