VALÈNCIA (EP). La tasa de actividad en la Comunitat Valenciana se sitúa en el 58,4 por ciento, el mínimo de la década, según un informe de Randstad sobre el volumen de población activa y la tasa de actividad en España, teniendo en cuenta la edad, el género, el nivel de formación y la comunidad autónoma de residencia del profesional.
De acuerdo con estos datos, más de 2,4 millones de profesionales valencianos se encuentran en activo, un 0,5% más que el año pasado. La tasa de actividad en la autonomía se sitúa tres décimas porcentuales por debajo de la media nacional (58,7%). Alicante encabeza el mayor aumento de la tasa de actividad con un 1,9%, seguida por Castellón con un 1,7%, mientras que Valencia desciende un 0,8%.
A nivel nacional, los profesionales activos en España crecen un 1%, el mayor incremento de los últimos diez años. La tasa de actividad en la Comunitat Valenciana se ha reducido décimas porcentuales en el último año, con lo que encadena tres años consecutivos de descensos.
En cuanto a datos absolutos de población activa, el estudio revela que la Comunitat Valenciana cuenta con un volumen de 2.442.700 profesionales, una cifra que ha crecido un 0,5% en el último año -cuando se registraron 2.431.400 profesionales activos-, cinco décimas porcentuales por debajo de la media nacional (1%).
Por provincias, la de Valencia es donde se registra un mayor volumen de población activa (1.243.600), seguida por Alicante (920.300) y Castellón (278.800).
En la última década, la población activa se ha reducido en un 2,5%, lo que en términos absolutos ha supuesto la reducción de 63.100 profesionales. La provincia más perjudicada es Valencia que ha visto reducida su población activa en un 4% o en 52.000 profesionales activos.
En el conjunto de autonomías, Baleares aparece, con un 67%, como la comunidad con una mayor tasa, 8,3 puntos porcentuales por encima de la media nacional (58,7%). A continuación se sitúan la Comunidad de Madrid (62,4%), Catalunya (61,7%), Aragón (59,7%) y Canarias (59,5%). También por encima de la media nacional y con una tasa de 59,1%, se encuentran Navarra, la Región de Murcia y La Rioja.
Por otro lado, con porcentajes por debajo de la media, están la Comunitat Valenciana, Castilla-La Mancha (ambas con 58,4%), Andalucía (56,9%), Euskadi (55,9%), o Extremadura (55,8%). Con las tasas de actividad más bajas se encuentran Castilla y León (55,4%), Cantabria (55,2%), Galicia (53,5%) o Asturias (50,7%).
En cuanto al volumen de población activa, Andalucía (3.966.800), Catalunya (3.884.500), la Comunidad de Madrid (3.450.200) y Comunitat Valenciana (2.442.700) son las regiones con más profesionales activos, sumando entre las cuatro el 59,5% del total a nivel nacional. Las comunidades con volúmenes más discretos son La Rioja (155.200), Cantabria (272.600) y Navarra (316.300).
Las regiones que experimentaron un mayor crecimiento de su población activa fueron Aragón, con un incremento del 2,4%, Catalunya, con un 2,3%, la Comunidad de Madrid, con el 1,7%, y la Región de Murcia, con 1,2%. Solo dos comunidades vieron reducirse su volumen de población activa: Asturias, con un descenso del 1%, y Canarias, con un 0,1% menos.
A nivel provincial, Barcelona ha sido la que ha registrado, con 2.866.200, un mayor número de profesionales en activo. La siguen Valencia (1.243.600), Sevilla (938.900), Alicante (920.300) y Málaga (794.300). Por otro lado, las provincias con menores volúmenes han sido volúmenes Soria (45.900), Teruel (63.900), Palencia (71.400), Ávila (72.000) y Zamora (75.900).
A nivel nacional el estudio de Randstad incide en que el volumen de profesionales activos ha superado por primera vez desde 2013 la barrera de los 23 millones y experimenta un crecimiento del 1%, el mayor de los últimos diez años. En concreto, el número total de activos es de 23.088.700 profesionales y supone el segundo año consecutivo de crecimientos.
Este crecimiento está relacionado con la estabilización de la tasa de actividad. Tras varios años de descensos consecutivos, en 2019 la tasa de actividad se ha estabilizado en el 58,7%, situándose aún en el ratio más bajo de la serie histórica.
El estudio destaca que los segmentos de profesionales menores de 25 años y mayores de 45 son los que han protagonizado los crecimientos de la tasa de actividad en el último año. Los ocupados mayores de 45 años han registrado en 2019 una tasa de 48,9% y el aumento más acusado, ocho décimas más que la del año pasado, 49,7%.
A pesar de que los menores de 25 son los que muestran una tasa más baja de actividad, también experimentaron un crecimiento positivo, esta vez de cuatro décimas, al pasar del 37% en 2018 al 37,4%. Por su parte, los profesionales con edades comprendidas entre los 25 y los 45 años tienen la mayor tasa de actividad, alcanzando el 87,6%, aunque con respecto al año pasado, cuando obtuvo un 87,9%, se ha recortado en tres décimas.