Indicó que la tendencia alcista de la rentabilidad de los bonos podría ser contraproducente con los esfuerzos de estímulo de la política monetaria
MADRID. El BCE responde las dudas del mercado después de varios mensajes contradictorios sobre el incremento de los rendimientos de los bonos recientemente. En el comunicado de política, el banco explicitó que acelerará “significativamente” las compras de activos bajo el programa PEPP en el segundo trimestre del año, en línea con el enfoque “holístico y multifacético hacia condiciones de financiamiento favorables” que guía la senda de política monetaria.
Lagarde también indicó que la tendencia alcista de la rentabilidad de los bonos podría ser contraproducente con los esfuerzos de estímulo de la política monetaria, especialmente si los incrementos son amplios y persistentes. De ello podría deducirse que el BCE se distancia de otros bancos centrales en relación a los movimientos recientes en el mercado de renta fija, poniendo mayor atención a los futuros desarrollos en el mercado.
Sin embargo, varias preguntan quedan por contestar, dado que los más escépticos aún se preguntan por qué el BCE no agilizó las compras desde antes. Lagarde insistió nuevamente en el carácter flexible del PEPP, por lo cual rechazó la idea de poner un número a su expresión de “incremento significativo”. Esto permitirá al Banco evitar la prueba de los mercados sobre su tolerancia al crecimiento de los rendimientos, mientras la institución maneja con sintonía fina un grupo amplio de condiciones financieras.
Crucialmente, Lagarde tranquilizó al mercado sobre las miradas preocupadas al panorama de inflación. Si bien la presidenta del banco destacada que este año se verá una notable volatilidad en los datos, en gran medida debido a las distorsiones y efectos bases asociados a la pandemia, la senda de inflación a largo plazo aún se mantiene lejos de alcanzar la meta del banco.
Olivia Álvarez es analista de Monex Europe