Las alumnas de la UV piden formación en cómo educar en igualdad a profesorado y estudiantes

VALÈNCIA. (P). Las alumnas de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación que han denunciado públicamente acoso de un docente así como estudiantes de otros centros de la Universitat de València han emitido este jueves un comunicado en el que exigen cuatro objetivos "imprescindibles" a la institución, entre ellos, formación en cómo educar en igualdad a todo el profesorado y que el estudiantado participe en ella "de manera horizontal".

Asimismo, reclaman una "reacción efectivamente y responsable" ante situaciones de acoso sexual; introducir a mujeres en los temarios de las carreras, historiadores, filósofas, autoras y una Comisión de Igualdad "transparente, que se preocupe por el feminismo y que se ocupe y se responsabilice del machismo de manera objetiva, dejando atrás los amiguismos y relaciones formales de pasillo".

En el texto explican las reuniones mantenidas a raíz de estos hechos: una de ellas con la representante de la Comisión de Igualdad, la directora de la Unidad de Igualdad y con la "intromisión" del propio docente con la síndica de Greuges del centro, que concluyó de forma "disconforme", y una segunda con la vicerrectora de Igualdad y la presidenta de la Unidad, que les "respaldaron" y comunicaron "que se iban a hacer responsables y llevar a cabo los procedimientos que fueran necesarios para dar solución a esta problemática".

No obstante, en este último encuentro, consideran que quedó en evidencia "la falta de información y el encubrimiento de la queja" y el "pésimo asesoramiento que recibimos en cuanto a qué mecanismo utilizar" cuando se producen estas situaciones.

Medidas de protección a las alumnas

Por su parte, la vicerrectora de la Unidad de Igualdad de la UV, Elena Martínez, señalaba a Europa Press, antes de conocerse el comunicado, que la universidad activará medidas de protección para evitar que las alumnas pudieran "salir perjudicadas" y anunciaba que se activaría el Protocolo contra el Acoso de la institución si las estudiantes así lo decidían.

Con posterioridad, fuentes del centro confirmaron a Europa Press que se activará ese protocolo al entenderse que, con la denuncia pública de los hechos, existe ya el consentimiento de las estudiantes para iniciar este proceso.

Las alumnas se encerraron este miércoles en las instalaciones del centro y colgaron pancartas para "visualizar" las prácticas "llevadas a cabo por algunos profesores y con sus actitudes patriarcales y machistas", en concreto, de un docente que, según ha precisado Martínez, en la actualidad está de año sabático y se reincorporará "dentro de unos meses", periodo en el que ya debe estar clara la decisión adoptada en este caso. En esta línea, ha indicado que la rectora, Mavi Mestre, ha comunicado que ella puede presentar igualmente acciones "con consentimiento" de las alumnas.

Martínez ha abogado por "ponerse en la piel" de una estudiante que tiene varios años de carrera por delante y se ha "enfrentado a alguien con una relación jerárquica de poder". "Ellas tienen miedo por si hay consecuencias colaterales de todo esto, pero por eso la universidad y este protocolo tiene las medidas oportunas para poder crear un cordón sanitario alrededor de ellas y que esto no les pueda pasar. Tengo claro lo que se tiene que hacer, no van a salir perjudicadas", ha aseverado Martínez.

En esta línea, ha resaltado que el protocolo consistiría en nombrar a una comisión confidencial con miembros de la Comisión de Igualdad, de prevención de riesgos y del profesorado con formación en igualdad, que si no cuentan con ella se les dará con carácter previo, para "averiguar exactamente qué es lo que ha pasado" hablando con profesores, estudiantado y personal técnico.

"Hay un instructor que instruye y el colectivo decide si ha lugar a hechos que parecen constitutivos de una situación inadmisible en la UV y, a partir de ahí, corresponde a la secretaría general abrir o no un expediente disciplinario conforme considere que ha lugar o no a una posible responsabilidad por esos hechos", ha subrayado.

La vicerrectora, que ha asegurado que cree a las estudiantes, ha explicado que, al terminar el curso pasado, un grupo de alumnas "muy grueso", de unas 50, decidió denunciar a un profesor porque tenía un comportamiento "absolutamente inadecuado, ya que vertía constantemente frases de alto contenido sexual respecto de ellas".

En este sentido, Martínez ha apuntado que la denuncia de las alumnas fue a través de un buzón "que llega solo a Decanato", que contestó y concertó una reunión con el profesor, llegando a una resolución que se comunicó a una estudiante "como representante del grupo", pero esa información "no llegó a todo el conjunto de alumnas".

"Con motivo del acto del 25 noviembre, acudieron estas alumnas al acto institucional donde el profesor estaba presente y pensaron que había algún tipo de corporativismo. Simplemente había ignorancia absoluta, en una casa tan grande había fallado nuestro sistema, no se había comunicado que esta denuncia se tenía que haber hecho en la Unidad de Igualdad para que se activara protocolo. La Unidad de Igualdad no sabía nada, ni el vicerrectorado ni la rectora", ha puntualizado.