Tenemos muchos más puentes tendidos con Siria de lo que nos imaginamos. La Mostra Viva del Mediterrani volvió a llenar Valencia de cultura con una ambiciosa programación y entregó el premio “Pont del Mediterrani” al director sirio Ossama Mohammed, una de las voces exiliadas en Francia más críticas contra el régimen de Bashar al-Ashad.
El realizador es autor de “Silvered Water, Syria Self-Portrait”, documental que explica el conflicto sirio a través de un autorretrato colectivo reflejado en los envíos por internet de las imágenes de la joven documentalista kurda Wiam Simav Bedirxam residente en Homs, ciudad de donde se pudo escapar para su estreno en Cannes.
También en Bruselas, Joan Ribó, denunció recientemente junto a otros alcaldes, el bloqueo de nuestro Gobierno central en el reasentamiento de las personas susceptibles de protección internacional por la escalada de violencia. Queja tanto por el trato a los refugiados civiles sirios como por el acuerdo con Turquía, al que califica de atropello.
Los próximos 25, 26 y 27 de noviembre, Valencia acogerá un encuentro Euro Mediterráneo de Solidaridad con las Personas Refugiadas (SOLIMED) en el que se escuchará a las organizaciones que están haciéndose cargo de la acogida así como a nuestros afectados vecinos del Sur, aún menos escuchados. Aunque al menos no tienen como vecinos a la intocable Israel.
Valencia tiene muchas vinculaciones con el Este, y no sólo por la muy peculiar Ruta de la Seda. Han sido y siguen siendo malos tiempos para muchos países del Oriente Próximo y no tanto, en apariencia, para los de Oriente Medio, con un nivel de negocios floreciente.
Hagamos un poco de historia. En el año 2015, el entonces presidente del Valencia Club de Fútbol, Juan Bautista Soler, pudo haberse evitado muchos problemas aceptado una suculenta oferta lanzada desde Catar por Halifa bin Hassan Al-Thani presidente del Al Wakrah Club, pero quién sabe por qué prefirió seguir con sus proyectos con Peter Lim como el la ciudad deportiva de Ribarroja o el nuevo estadio.
La suerte perdida vino cuando, tras intentar el jeque comprar el equipo del Valladolid, el valenciano de origen sirio Mounir Abou-Khadour y su hija Mariam, sus personas de confianza de España, le propusieron hacer una oferta por el conjunto del Mestalla. Hassan Al-Thani y su esposa Sheja Anour, se reunieron con Soler en el Hotel Astoria, visitaron el solar del nuevo estadio en la Avenida de las Cortes, tomaron paella y esas cosas que hace una pareja de recién casados en nuestra ciudad.
Aunque no pudo llevarse a cabo la compra del Valencia, esta fabulosa agente FIFA valenciana Mariam Abou-Khadour puso toda su tenacidad el primo del jeque, Abdullah Al Thani, acabara comprando un equipo europeo, el Málaga, tras meses de negociación con Fernando Sanz, gracias a su vinculación con la familia de Antonio Asensio, auténtico propietario del club que ya tenía el Mallorca y no podía ser titular de dos clubes. Y eso que Mariam, en el caso del Málaga CF llevaba otro comprador mucho mejor: el kuwaití Assad Albanwan.
El empresario Mounir Abou-Khadour, afincado en Valencia desde los 17 años, ahorrador y hombre muy serio en sus costumbres, es el encargado de los refugiados en la recientemente premiada Asociación Hispano Siria de la Comunidad Valenciana junto a su presidente, Abdallah Wassel Kassam, su vicepresidente Hayssam Racho Al kerdi, Adel Naser Rifai, Ahmed Loutfi Kheder y Hani Dajjani Raneh, todos ellos médicos y conocedores del sufrimiento humano. Y contribuyó a la creación en 1994 de la mezquita y centro cultural islámico cuando era delegado de la Organización de Ciudades Árabes para España y Portugal, iniciativa hecha para dar a conocer la verdad de una cultura tolerante.
Pero aún más fascinante si cabe es la hija de Mounir y su esposa, la cordobesa María del Carmen Montaño, quien colabora con la asociación de salud mental Sueños de la Mente, creada por familiares, usuarios y profesionales, avocada a mejorar la calidad de vida de las personas que padecen una enfermedad psíquica.
Mariam Abou-Khadour, se especializó en derecho deportivo. Ella se inclinaba por la hípica porque su hermano Yahya Abou-Khadour Montaño -casado con la periodista Carla Zorita Padilla- fue deportista de élite en equitación, campeón en salto. Pero en la universidad de Lleida conoció a gente de la Federación de Fútbol, como a Gorka Villar, hijo de Ángel Mª Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol desde 1988 y actualmente vicepresidente de la FIFA; a Salvador Gomar Fayos, ahora abogado experto en Derecho Deportivo o Jorge Pérez Arias. Ellos le recomendaron el master de agente FIFA que aprobó, convirtiéndose en la primeras mujeres que lo hizo y hoy es una de las intermediarias más reputadas, sin distinción de sexos.
El fútbol es un mundo tan fascinante como esta mujer. Hablamos de crisis, pero los campos siguen llenos, no cabe un alfiler. Se pagan 2.000 euros por una entrada en una final. Hay amaños, pero no pasa nada. Si se quita la quiniela, los sponsors, el Madrid-Barça, se paralizaría el país o saldrían manifestaciones violentas en las calles. Los futbolistas son dioses que ganan fortunas, aunque sólo se dediquen al culto del cuerpo y poco más. Con el dinero del fútbol se saldaría sin duda toda la deuda del Estado. Y, lo más increíble, nadie puede cambiar eso y a nadie parece importarle.
Mariam es una intermediaria nata. No en vano alrededor del fútbol hay negocios y negociaciones de todo tipo. Va y viene sin parar de una ciudad a otra. Por eso tiene amigos en todas partes, aunque se deja llevar por el corazón, por el feeeling, y se desvive por ayudar. Nada la detiene y por eso su canción fetiche es I will Survive de Gloria Gaynor. Rechazó posar para Interviú, aunque adora sus curvas; fue Premio a la Excelencia Profesional junto al Padre Ángel; admira a Hiba Abouk, se ríe de todo, es confiada y para su cumpleaños número 35 reunió en la casa familiar de la urbanización de lujo de Santa Bárbara, en Rocafort a más de 120 invitados, que es lo que venía yo a contarles.
Todos los invitados de fuera de Valencia pasaron a gastos pagados una semana en el hotel Primus, cercano a la Ciudad de las Artes. Estuvieron sus mejores amigas, Jessica Asensio, propietaria del Grupo Zeta, hija del fallecido Antonio Asensio Pizarro, uno de los últimos hombres sensibles y cariñosos que dirigió un grupo de comunicación, enamorado -más aún que casado- con la francesa Chantal Mosbah. También la princesa germano-austríaca educada en España, Sophie Von Hanau, artista fotográfica de culturas casi extintas ahora enamorada de los toros como Mariam.
Ambas amigas tienen fundaciones y colaboran solidariamente con el tercer mundo. Jessica con Mensajeros de la Paz y Sophie con su propia fundación por África, “the Sophie Von Hanan Foundation”. Carla Pereyra, otra de sus mejores amigas con su hermano Jimmy, y el Cholo Simeone no pudieron acudir porque el día 29 fueron papás de la pequeña Francesca, la primera hija de Carla porque él tiene tres hijos de su anterior matrimonio. Tampoco Jaime Pereyra padre. Pero sí que fueron Patricia Mancini y Pablo Vercellone, preparador de porteros del Atlético de Madrid, y toda su familia, como su guapísimo primo Lucas Navarro Montaño que trabaja en la clínica de medicina estética Dray y que le dedicó un sentido “Behabak ana kteer ya habibti Mariam!”, “Te quiero demasiado”. Pero antes de la lista de invitados, hablemos de la megafiesta.
Sí, fue una fiesta de cumpleaños solidaria: Mariam no aceptó regalos sino que todo lo que pudieran ser obsequios para ella fueron destinados a una dotación económica para los refugiados sirios. La cita fue a las nueve de la noche, recibiendo a los invitados con un cóctel.
El catering, además de los deliciosos aperitivos y dulces, contó con un sushi-point con cuatro camareros y dos cocineros ,al que se añadió un couscous marroquí, acompañado por dátiles, preparado por cinco cocineras de nuestro país vecino. El champán fue Mumm cordon rouge y rosé, dieciocho botellas de cada. El blanco, del mejor enólogo del mundo, César Alonso, el albariño Pazo Cilleiro, cuarenta y ocho botellas en total. El rosado fue el vino francés con nombre español: Le Pisotón, dieciocho botellas. Y el tinto, treinta botellas de Ribera del Duero, Viña Magna crianza. Un alarde de contabilidad y buen gusto para que hubiera libaciones para todos hasta el amanecer.
Amenizaron la velada a los asistentes al estilo flamenco los artistas Toro y La Luna, la gran Tony Domínguez y, venidos expresamente de Madrid, José Mora y María Coral. La bailarina de danza del vientre Verónica Pavón Llácer, animó a las asistentes a iniciarse en el raks baladi de las caderas.
¿Y qué decir de los invitados? Que tengo las negritas más granadas de la temporada porque entre los amigos y familiares que acudieron estuvieron, como no, Yahya (Juan, el nombre que el Corán da al Bautista) hermano de la cumpleañera a cuyos títulos hípicos ya mencionados en su dilatada carrera deportiva tenemos que añadir que es un gran empresario y uno de los pocos que fueron invitados a la boda de Marta Ortega.
También los hombres más fuertes de la madera en la Comunidad Valenciana, Ventura Vilarrasa Arlandis con Marivi Setuain, y Alfredo García; Claudio de Partearroyo Gallent, consejero delegado de Merclahec Gallent Inversiones Inmobiliarias; Ángel Díaz Gamboa, dueño de Sentymax; Yasmín y Gema Germán Tajian de Oro Gema. Victoria y Verónica Pons Soria, de las clínicas dentales que llevan sus apellidos. Ali bin Yahya, de una de las dinastías marroquíes más reconocidas; el doctor Simon Dray, el mejor esteticista facial del mundo entre cuyas clientas se cuentan Demi Moore, Naomi Campbell, Carla Sarkozy -de soltera Bruni- o Norma Duval que es su musa en España; Vicky Martínez Berrocal; Sonia Alfaro, la abogada de la familia Cotino; el peluquero Alex Marí Jordan, autor del peinado de la cumpleañera; la diseñadora de joyas Ana López; el médico sirio Ismael Zahrawi; Laura Codina Muntaner con su pareja Roberto Veggetti y el abogado Nacho Castillo. La bailarina Verónica Pavón Llacer; Andrea Ioana Gavre; la organizadora de la fiesta con su pareja Nacho Charrabe, de origen sirio y socio de Santiago Segura; Elena Mosloc; Begoña Corbí y su marido el empresario Alejandro Martí Cusido; Raquel Vallejo Mendizabal; Ángel Ostariz; Alex Marí; José Luis Pasques; Jaime Pereyra Paterno; Begoña Corbi; el joyero de Madrid Miguel Más, dueño de San Eduardo;Vinieron amigos de Ibiza, como Raquel Vallejo Mendizábal, Romina Saíz Clapel de Ibiza Royal Service y Mar de Inshalla con Rossi Aguilar; de Madrid como el arquitecto Pablo Gil Espino, y de Marbella, Barcelona y de México Carlos Millet, periodista taurino y morantista que hasta la obsequió con una paella días antes.
Como la mayoría de los invitados eran de fuera y la fiesta fue un viernes, el sábado salieron a comer al restaurante terraza Panorama de la Marina Real. Por la noche cenaron en La Lambrusquería y salieron de copas al Jockey, un sitio que está dando mucho que hablar entre los famosos. El domingo fueron a comer, adivinen qué, en el José Luis de la Dehesa de El Saler. Muchas emociones bonitas con un telón de fondo triste: las familias lejanas que se espera volver a ver un día, gracias a la solidaridad, libres y tan felices como ellos, sin que tengan que vivir más en la pesadilla de un 36 como el nuestro.
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