VALÈNCIA. La reforma de la ley del juego fue aprobada en mayo de 2020 en Les Corts Valencianes por el PSPV, Compromís y Unides Podem después de tres años de trámites (comenzó a elaborarse en 2017), tres aplazamientos, aluviones de enmiendas y tiras y aflojas con la patronal del sector. Desde entonces, la norma ha sido cuestionada judicialmente y ahora el PP y Vox han decidido volver a cambiarla en algunos aspectos fundamentales regulados por la izquierda, que, actualmente en la oposición, lo critica.
Uno de los puntos más relevantes de la norma era la prohibición de que ninguna casa de apuestas se pudiera ubicar a menos de 850 metros de un centro escolar o centro de salud. Si no lo cumplían, tenían que traspasar el local si querían prorrogar sus licencias de actividad. Igualmente, tenía que haber como mínimo 500 metros entre las nuevas aperturas de establecimientos. La distancia a aplicar no se mide de forma radial, sino lineal –es decir, por recorrido peatonal– y tanto casinos y bingos como locales de hostelería con máquinas tragaperras quedaron exentos de cumplir este requisito.
El PP y Vox han introducido un cambio sustancial en este apartado con una modificación de la norma a través de la ley de Medidas Fiscales –la conocida como ley de Acompañamiento necesaria para que salgan adelante los Presupuestos de 2024–. Como ha publicado Levante-EMV, el Consell sí podrá renovar las licencias de los locales que incumplan con esa distancia de los 850 metros.
La ley de Juego iba igualmente acompañada en su momento de una disposición transitoria en la que figuraba una moratoria: "Por un período máximo de 5 años desde la entrada en vigor de esta ley, se establece la suspensión de nuevas autorizaciones de establecimientos de juego, así como de nuevas autorizaciones de explotación de máquinas recreativas con premio, destinadas a ser instaladas en locales de hostelería o similares".
La otra enmienda a la ley de Acompañamiento presentada por el PP y Vox excluye de esa moratoria a los salones recreativos y otros locales habilitados para la instalación de máquinas de juego. Con ello, el Consell ya podrá conceder nuevas autorizaciones a este tipo de establecimientos.
También podrá otorgar permisos para máquinas de tipos B o recreativas con premio, destinadas a ser instaladas en locales de hostelería o similares, cuando derive de la sustitución de máquinas averiadas u obsoletas. A estas últimas se las dará de baja y se mantendrá la autorización de instalación de la nueva máquina el periodo de vigencia que le resta a la sustituida.
La ley del Juego se encuentra recurrida en los tribunales y con diversos pronunciamientos pendientes. A finales del pasado septiembre, la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) acordó formular al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) una cuestión prejudicial sobre si las restricciones de distancias establecidas a los Salones de Juegos son compatibles con la normativa europea.
Los magistrados expresaron sus dudas sobre las distancias mínimas de 500 metros entre salones de juego y de 850 metros entre estos y los centros educativos. Destacaban que la misma normativa ya dispone de medidas menos restrictivas pero que se pueden considerar igualmente efectivas para la protección de los consumidores, el interés general y para los menores de edad, entre ellas la prohibición de acceso a estos establecimientos de los propios menores.
"No se juzga conveniente la necesidad de reduplicar las medidas restrictivas existentes cuando las mismas se juzgan idóneas para conseguir los objetivos pretendidos por la norma, estimándose menos lesivas y más tolerantes con los principios de libertad de empresa, establecimiento y acceso al mercado y ejercicio de actividades que se tratan de preservar a través de los preceptos del Derecho de la Unión Europea que los priorizan y que sirven como instrumentos útiles para conseguir los mismos fines sin dañar ni sacrificar derechos", dijo el TSJCV.
La resolución de los recursos quedará a la espera del pronunciamiento del TJUE, aunque ahora el PP y Vox han modificado la ley en algunos de estos aspectos señalados por los magistrados.
Una decisión criticada este jueves por la oposición. "Mientras los últimos años desde el gobierno valenciano luchamos contra la adicción al juego y la ludopatía, PP y Vox hacen marcha atrás y ponen el negocio por delante de la salud de las personas", afirmó el portavoz de Compromís en Les Corts, Joan Baldoví.