Los cambios del nuevo TruenoRayo: a Las Naves con Kokoshca y Nuria Riaza

VALENCIA. “Cada vez que tomamos una decisión relacionada con el proyecto Hits With Tits o cualquiera de sus vertientes, para visibilizar o normalizar tanto a las mujeres como el rico panorama underground que existe a nivel local y estatal, lo hacemos porque de forma natural se han creado puentes para un crecimiento adecuado”. Así explican Lu Sanz y Ada Díez desde la cabina del TruenoRayo Fest la que es, desde las bases de su creación en 2014, la decisión más importante del festival: tras tres años en el Casal Jove de Puerto de Sagunto, se traslada a Valencia y su nueva edición se celebrará en Las Naves. Serán los días 29 y 30 de septiembre.

La elección de Las Naves no ha sido una cuestión baladí para Sanz y Díez, que agradecen la confianza del Ayuntamiento de Sagunt y del Casal Jove de Puerto de Sagunto durante 3 años. “En lo primero que debe pensar cualquier festival, además de en la calidad de su cartel, es en que el público y los artistas siempre se encuentren cómodos, ya que son muchas horas de esfuerzo y trabajo”, explican justo antes de poner blanco sobre negro las razones que han guiado el cambio:“Las Naves cuentan con grandes instalaciones que se adecuan al espíritu y tamaño del festival, y nos parece muy adecuado hacer uso de las mismas más allá de los festivales clónicos”. Estas palabras son especialmente punzantes cuando coinciden con la revelación del cartel de los conciertos de la Gran Fira de València en Viveros.

Parecía impreso en el ADN del TruenoRayo que, de suceder, su éxito y su consolidación debían ir de la mano del cambio. “Parte del público que acude al evento es de la propia capital”, recuerdan Sanz y Díez, que esperan que el hecho de ubicarse en Valencia influya “de manera positiva” en los dos bastiones de la supervivencia de un festival: “afluencia y repercusión en medios”. Es fundamental “no perder la esencia del festival”, la de continuar, esta vez en Valencia, con la exposición de la realidad underground y la normalización y visibilización de la mujer “tanto en los escenarios como en la parte técnica, donde existen grandes profesionales”; el cariz popular (en su acepción primordial) de Las Naves, un punto de encuentro auspiciado por el Ayuntamiento de Valencia, hace que su objetivo, el de exponer ambas realidades “a un público cada vez mayor”, conserve intacto el núcleo ideológico del festival.

Cambio de sede y ruptura con lo gratuito

El de la ubicación no será la única variación preparada para el TruenoRayo 2017. En su cuarta edición, y como algo que puede parecer coherente con el cambio de sede, el festival dejará de ser gratuito después de tres años.“Pensamos que la cultura debe estar al alcance de todo el mundo, pero es esencial darle el valor que se merece”, explican desde la organización. Las entradas, que esperan que “comiencen a circular dentro de poco”, tendrán un precio fijo (no aumentarán con los avances del cartel) y se moverán entre los 8 euros de la entrada de día (10 euros en taquilla) y los 15 del abono de dos días (18 en taquilla).

“La cultura no es gratis y requiere de muchísimo esfuerzo para que salga adelante: nos gustaría contar con mayor apoyo institucional a parte del otorgado por Las Naves, pero al no saber si eso es posible hay que sacarse las castañas del fuego”. La realidad es que no parece tratarse de una decisión fruto de la precipitación, ya que el año pasado Díez y Sanz ya se pronunciaban a este respecto: “ahora mismo funciona de este modo, pero no debemos olvidar que si se pierden apoyos para financiarlo es una odisea ofrecer algo de forma gratuita”, decían en septiembre en Valencia Plaza. Hoy tiran de ese hilo y reconocen que, “al tratarse de una producción humilde,es necesario que parte del gasto que supone el festival se pague con la aportación del público”, que es quien siempre las ha ayudado a crecer, recuerdan.

Primeros nombres: Kokoshca, CVEEC, Rata Negra… y Nuria Riaza

Bien, en los apartados de sede y financiación los cambios son rotundos: una mudanza y la ruptura coyuntural con la gratuidad de la cultura;sin embargo, en el de los nombres propios la coherencia, latente en ambas decisiones, se convierte en algo mucho más tangible por lo realizado hasta el momento. Las primeras tres bandas confirmadas afianzan las intenciones de preservar la esencia del festival desde la organización del mismo. “Nuestra meta es hacer un cartel interesante y que el público disfrute del mismo, siempre con las batallas del proyecto Hits With Tits en mente: nos interesa la cultura, la normalización y visibilidad de los artistas y la capacidad de las creadoras”, concluyen Díez y Sanz.

El primer avance de bandas cuenta con Kokoshca, CVEEC (Cómo Vivir En El Campo) y Rata Negra, y los tres entran en la fotografía del TruenoRayo: grupos más o menos vinculados con la escena underground y la música independiente (que no el indie), con una fuerte presencia de la mujer sobre el escenario. Gracias a su último disco, Kokoshca se encuentran inmersos en el proceso de quitarse de encima la etiqueta de banda de culto en lo independiente; una extraña anacronía que los sitúa más cerca de los 90 que de 2017 (también actuarán este año en el Primavera Sound). CVEEC (Cómo Vivir En El Campo) lleva el sello de El Genio Equivocado y, en un festival de mayoría femenina, actúa de elemento naturalizador; por su parte, Rata Negra (con Violeta y Fa de Juanito y Los Feos) encarnan el elemento punk que caracteriza al festival.

A falta de conocer el resto del cartel, lo que parece incuestionable es que el TruenoRayo no dejará de ser un referente para la autoedición, también en lo que respecta al gremio de ilustradores. El festival continuará yendo más allá de lo sonográfico, y el cartel es buena prueba de ello. La ilustradora Nuria Riaza será la encargada de confeccionar la imagen del año del cambio (imagen derecha). “Nuria Riaza nos parece un talento en alza, con mucho rollo y actitud; nos encanta usar los carteles del Truenorayo como plataforma para mostrar la diversidad de estilos en la ilustración”, explican Lu Sanz y Ada Díez.