VALÈNCIA. Sin prácticamente tiempo para celebrar o digerir los resultados, los partidos políticos de Gandia se preparan para un nuevo plebiscito que en este caso debe dirimir el futuro de la capital de la Safor durante cuatro años. Quince días de intensa campaña en los que los líderes lucharán por cada voto que les pueda llevar a ocupar la Alcaldía de la ciudad o al menos ser una fuerza lo suficientemente importante para ser imprescindible en la gobernabilidad del nuevo ejecutivo. En el tablero de la Comunitat Valenciana Gandia, la capital de la Safor, se considera clave al ser una de las comarcas más importantes. Es por ello que Diana Morant por el PSPV-PSOE, Josep Alandete por Compromís Més Gandia Unida, Víctor Soler por el PP, Pascal Renolt por Ciudadanos, Ángel Martín por Podemos, Joan Francesc Peris por Los Verdes, Ciro Palmer por Demòcrates Valencians y Pedro Abad por Vox intentarán imponer su visión y la de sus siglas sobre sus adversarios.
Cada uno de ellos lo hace siendo muy consciente de lo ocurrido en las elecciones autonómicas y generales del 28 abril en la ciudad Ducal. En ellas, la formación más votada para Les Corts Valencianes fue el PSPV (22,6%), segunda el Partido Popular (20,3%) pero con Compromís muy cerca (19,8%) y Ciudadanos (14,7%) más en la distancia. A la cola quedaron Vox (6,68%), Unidas Podemos (6,8%) y PACMA (1,8%). Asimismo, cabe destacar que de los partidos ‘tradicionales’ el único que mejora en sus cifras es el Partido Socialista —obtiene 782 votos más— pues el Partido Popular se deja por el camino 4.325 votos y Compromís 182.
Tras Compromís quedan las formaciones que están viviendo un momento de auge dorado: Ciudadanos queda en la cuarta posición, con 2110 votos más que en 2015 y Vox que, aparece con fuerza, suma 3.491 votos más. La irrupción de Vox en el panorama político hace que Unidas Podemos sea la sexta formación más votada. Así, el partido de Pablo Iglesias se deja 435 votos y se queda con 5.917 apoyos.
Unos datos, además, que muestran la necesidad del pacto pues el PSOE, de obtener los mismos resultados, estaría obligado a pactar con otros partidos. Una situación que ya se dio en 2015, cuando el bloque de izquierdas —con un pacto con Més Gandia— no lograba alcanzar la mayoría necesaria para gobernar y requirió del apoyo de Ciudadanos —con su entonces represente Ciro Palmer a la cabeza— para arrebatar la alcaldía al Partido Popular. Una alianza que no se podría repetir en estas elecciones por el veto de la formación naranja a pactar con partidos nacionalistas y, quizá, porque Palmer concurre en estos comicios como cabeza de lista por Demòcrates Valencians. También habría que ver si, como sucedió en abril, la derecha se resiente y pierde votos, y si Víctor Soler y su Partido Popular pueden liderar un bloque de derechas que desbanque a Diana Morant de la alcaldía.
Asimismo, cabe recordar que en Gandia concurren ocho partidos, por lo que la clave estará en la dispersión del voto y en el número de votos que obtengan las formaciones que no logren entrar en el consistorio. La mayoría absoluta en Gandia está en los trece concejales.
La actual alcaldesa, Diana Morant, espera revalidar la vara de mando de Gandia, esta vez siendo la primera fuerza y no tras un pacto para dar un vuelco al resultado. Bajo su campaña ‘Tu guanyes’, tienen por objetivo conseguir una gran movilización de la ciudadanía para que confíe con el proyecto de ciudad que los socialistas —con Més Gandia— iniciaron hace cuatro años en lo que han denominado «la etapa más difícil de Gandia». Y es que, la gestión del Partido Popular en los cuatro años que gobernaron la ciudad está muy presente en el discurso de los socialistas.
El líder del Partido Popular no lo tiene fácil. Así lo hace ver los resultados del 28 de abril y el haber sido la mano derecha de Arturo Torró—muy presente para algunos sectores de la capital de la Safor—. Tanto es así que su nombre como cabeza de lista no fue oficial hasta finales de marzo. Con su campaña «Ganar y gobernar Gandia» pretende transmitir que a los populares no les bastará con ser el partido más votado, como ocurrió hace cuatro años, sino ser capaces de gobernar. Asimismo, tiene como objetivo aglutinar «todo el voto de centro-derecha y los descontentos del PSPV» para «ganar y gobernar».
Se presentó a las Primarias de Compromís después de que Lorena Milvaques anunciara su decisión de no seguir en primera línea de la política. Fue una sorpresa su disposición a presentarse en las Primarias pero también que las ganara pues este histórico del valencianismo en Gandia siempre ha preferido estar en la sombra. Ahora, como cabeza de lista de Compromís Més Gandia Unida tiene el objetivo de «conseguir la primera alcaldía del cambio». Su discurso: propuestas realistas y recordando que en la pasada legislatura las políticas «responsables y progresistas que han transformado la ciudad». Para alcanzar la alcaldía Alandete aglutina a fuerza de la izquierda (Compromís, Esquerra Unida y Esquerra Republicana) y a «cinco independientes».
El Comité Ejecutivo Nacional de Cs decidió desde Madrid que encabezara la lista Pascal Renolt, un DJ y empresario de origen francés sin experiencia política. Su nombramiento creó un cisma dentro del partido pues Ciro Palmer marchó de la formación y, con él, el parte de la militancia. Con el lema «Más comercio, más turismo, más industria, más empleo = menos impuestos» centra sus políticas en revitalizar el comercio de la ciudad, el turismo y en el terreno sanitario apuesta por un hospital de crónicos, un segundo centro de especialidades y Grau 24 horas. Cuántos votos arañará y hacia qué lado de la política se decantará es incierto.
Podemos Gandia, con Ángel Martín al frente, no estuvo de acuerdo con la configuración de la lista de la candidatura de Més Gandia y ha decidido concurrir en solitario. Unos votos que, si pasan el corte, podrán sumar o se perderán para la izquierda. También se presenta por solitario Los Verdes, con Joan Francesc Peris al frente, presenta una «candidatura progresista que recoge las aspiraciones, necesidades y reivindicaciones de la ciudadanía de Gandia que no han sido atendidas por el gobierno PSPV-Més Gandia».
También habrá que ver qué ocurre con el nuevo partido en la ciudad, Demòcrates Valencians, cuya cabeza visible es Ciro Palmer, el hombre que dio la vara de mando a Diana Morant para desbancar al Partido Popular. Sus desavenencias con Ciudadanos arrastró a otros militantes y seguro que también lo hace en votos. Por otra parte, el líder de Vox, Pedro Abad, tiene el reto de mantener el ascenso de la formación y que esos votos no se vayan a otras formaciones de la derecha.
Igualmente, cabe recordar que en el voto las siglas y las tendencias políticas son fundamentales en las elecciones municipales pero también el componente intangible, aquél que se marca por la cercanía o empatía hacia el líder de la formación.
