Han presentado una tercera petición al respecto e inciden en que quieren ser "activos" en la Cámara y no "vivir del cuento"
VALÈNCIA. (EP). Los cuatro exdiputados de Ciudadanos (Cs) en las Corts Valencianes que dejaron el partido naranja el pasado mes de junio --Alexis Marí, David de Miguel, Alberto García y Domingo Rojo-- han presentado una tercera petición para ser reconocidos como una agrupación dentro de los no adscritos y están a la espera de que la Mesa del Parlamento resuelva. Si no se les da una solución en este sentido, han advertido de que pedirán la votación individual de las enmiendas que se presenten a los Presupuestos de la Generalitat para 2018.
Tres de esos cuatro diputados --no ha estado presente Alberto García-- han ofrecido este martes una rueda de prensa en las Corts para explicar su posicionamiento ante diversos temas de actualidad y también su situación, al ser considerados como diputados individuales tras pasar al grupo de no adscritos. Sin embargo, Marí ha sido claro: "Vamos a funcionar de facto como grupo" y dejarán clara su postura tras cada Junta de Portavoces, sea en la sala de prensa o "en tienda de campaña en el ficus" del Parlamento.
Rojo ha explicado que cuando decidieron dejar Ciudadanos su intención era seguir en la política activa y no acudir a la Cámara a "calentar el asiento" o "vivir del cuento", pero sólo se han encontrado "trabas" en su actividad, tanto a nivel de participación como en el día a día para "tratar de impedir ejercer esa actividad". No obstante, ha advertido: "Pese a quien pese y caiga quien caiga vamos a seguir ejerciéndola".
Ha recordado que el mismo día que dejaron Cs pidieron ser considerados, sin éxito, como agrupación de diputados porque es "la mejor forma de ser útiles" tanto para la casa como para los ciudadanos y "no tiene sentido" que no puedan serlo "porque cuatro personas quieren arrinconarlos en una esquina, no lo van a conseguir".
De hecho, solicitaron poder realizar interpelaciones a los consellers y la Mesa entendió que no era su derecho al no ser grupo, por lo que interpusieron un recurso ante el TSJCV por vulneración de derechos fundamentales que fue admitido a trámite. Les Corts alegó, ellos hicieron lo propio contestando a esas alegaciones y están a hora a la espera de que el tribunal se pronuncie sobre si admite definitivamente a trámite esta cuestión y resuelve el contencioso.
Domingo Rojo ha hecho hincapié en que antes de solicitar ser una agrupación habrían comunicado sus intenciones a los partidos firmantes del Acord del Botànic --PSPV, Compromís y Podemos-- y lo vieron "con buenos ojos". No obstante, ha proseguido, "con el devenir del tiempo esos apoyos se han ido perdiendo" y la "presión" de PP y también de Cs sobre su respaldo a algunas alcaldías ha hecho que funcionara la "ley de los vasos comunicantes".
Ahora, ha lamentado, quienes antes decían que esa agrupación era buena "levantan los hombros y se dejan llevar por la corriente", aunque desde que Antonio Estañ asumió el liderazgo de Podemos han notado "mayor apoyo" a sus reivindicaciones.
"No pedimos privilegios ni queremos tener más derechos que ningún diputado, sino trabajar en igualdad de condiciones, queremos ser parte activa en este Parlamento", ha dicho, al tiempo que ha remarcado que la Mesa les dice que no vulneran su derecho, sino que hacen una "aplicación restrictiva de los derechos, del reglamento, que entienden que los derechos son de las formaciones, de los grupos", mientras ellos creen que son de los diputados.
Ha puesto como ejemplo de los "agravios" que padecen que para su actividad parlamentaria reciben al mes una subvención finalista de 1.400 euros pero mientras a los grupos "se les entrega el dinero y lo pueden gastar como quieran" hasta rendir cuentas a final de año, ellos deben adelantarlo y después se les paga a 60 días como a un proveedor. "Es como decir estate quieto en una esquinita", ha indicado.
David de Miguel se ha referido a los presupuestos para el próximo año asegurando que, de nuevo, no les gustan en términos generales, porque sí están de acuerdo con los gastos pero no con los ingresos, que "no se corresponden con las previsiones". Así, a día de hoy su posición es la del "no", pero no apoyarán las enmiendas a la totalidad y tomarán posición tras las enmiendas parciales.
Alexis Marí ha indicado que su postura también dependerá de la receptividad sobre las enmiendas que planteen y se ha referido a dos: la paralización de la reversión del modelo Alzira --de la que ha dicho, va a generar "un problema"-- y el aumento del número de efectivos de la unidad adscrita de la Policía Nacional a la Policía de la Generalitat.
Preguntado sobre si pedirán el voto individual de las enmiendas parciales, ha señalado que sí a no ser que se les dé una solución antes, ya que, tal y como ha explicado Domingo Rojo, sólo David De Miguel tiene voz y voto en la Comisión de Economía en la que se debatirán antes las enmiendas y si en ella las "compilan" en bloques de 30 el resto no han podido votarlas ni saben qué agrupación se ha hecho. "No es por tocarle las narices a nadie", ha aclarado.
Marí también ha querido referirse a la puesta en marcha de À Punt y ha remarcado su defensa inicial de la nueva radiotelevisión, pero ha lamentado que la situación actual "se va alejando bastante de la pretensión" que había, con "reacciones insólitas de la directora general, Empar Marco, sobre el día 1 de octubre", que "vienen a dar más claridad a los que sospechaban que podía ser un instrumento al servicio del nacionalismo de Compromís y un escaparate del presidente Puig".
A ello se suma la "forma de contratar, con esos con concursos que premian muchísimo a unos y dejan a medio camino a otros" y esa "falta de compromiso con lo nuevo" que "no es lo que se vendió". "Se chapó por parte del PP una Canal 9, un quiosco y la persiana se vuelve a abrir casi de la misma forma con las mismas caras", ha apuntado, sin ánimo de crítica a los profesionales, pero sí a la falta de oportunidad para "caras nuevas". "Si esto va a seguir así, no sé el peso que tendremos en un futuro próximo, pero si sigue así la cosa, con nosotros que no cuenten para nada", ha zanjado.
Por otra parte, Marí ha avanzado que los cuatro diputados estarán en la manifestación por la financiación justa de este sábado en València y ha criticado la ausencia del PP y el cambio de opinión de Ciudadanos. Ha ironizado al asegurar que habrá que esperar al viernes por la noche a última hora para "estar totalmente seguros" de que acudirán.
De Miguel también ha aprovechado para criticar que desde que en mayo se aprobara el dictamen de la comisión sobre la reforma de la ley electoral para rebajar la barrera electoral está "en un cajón" y ha advertido de que si no se registra rápido la propuesta es posible que no se llegue a tiempo para su aplicación esta legislatura.
Marí se ha pronunciado también sobre la crisis política en Cataluña y ha defendido que la ley hay que cumplirla pero ha apuntado al mismo tiempo que "no es bueno" plantear una solución solo desde las "tanquetas de la Guardia civil y la ley" porque los sentimientos "son sentimientos" y no se puede hacer constitucionalista a personas que son independentistas.
"Me río de los patriotas de pandereta que hasta en el papel higiénico tienen la bandera de España y no han aportado a este país absolutamente nada, vagos y maleantes, los conozco personalmente, creo que es un problema que va mucho más allá, no se puede banalizar", ha dicho