BRUSELAS (EP). Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea acordaron este lunes a medianoche dejar por el momento fuera del embargo al petróleo ruso el oleoducto que abastece a Hungría, con el fin de desbloquear el sexto paquete de sanciones que permitirá poner fin a las importaciones de este combustible por vía marítima desde Rusia, lo que en la práctica supone vetar al menos dos tercios del total del petróleo que llega a la Unión Europea.
Así lo anunció el presidente del Consejo europeo, Charles Michel, al anunciar un "acuerdo para prohibir las exportaciones de petróleo ruso a la UE", si bien precisó que "cubre de manera inmediata a dos tercios de las importaciones" y no a la totalidad del suministro.
Fuentes europeas consultadas por Europa Press explicaron que el acuerdo permitirá un embargo sobre todo el petróleo importado por mar "antes de que acabe el año" y deja para una segunda fase sin calendario preciso el desarrollo del embargo aplicable al ramal sur del oleoducto de Druzhba, que abastece a media docena de países de la UE.
El Gobierno húngaro que preside Viktor Orban reclamaba desde que se empezó a negociar este paquete a principios de mayo quedar exento del embargo mientras no cuente con las infraestructuras necesarias para abrir nuevas rutas de suministro, un objetivo para el que también pide inversiones a cargo de la UE.
La exención se concretará "en cuanto sea posible" pero ha sido concebida para eximir a Hungría de cumplir el veto a las importaciones por su gran dependencia del petróleo ruso y las dificultades para encontrar alternativas inmediatas, por no tener salida al mar que facilite el abastecimiento por otros proveedores.
También beneficiará a Eslovaquia y República Checa, mientras que Alemania y Polonia, dos países que también se abastecen por este oleoducto, se han comprometido a cortar también este flujo, con lo que la UE estima que el embargo parcial que se aplicará en los próximos meses afectará a "más del 90%" del petróleo, crudo y refinado, que llega al mercado comunitario desde Rusia.
La oferta de una exención cuya caducidad está aún por definir despertaba los recelos de varios socios por el temor a que la entrada de gas ruso por el oleoducto pueda distorsionar la competencia en el mercado comunitario, por lo que según fuentes diplomáticas el acuerdo prevé que la Comisión Europea "monitorice" que esta situación "no afecte al Mercado Único" y garantice la igualdad de condiciones.
Tras algo más de siete horas reunidos en una cumbre extraordinaria en Bruselas, los líderes llegaron a un acuerdo político que respalda el sexto paquete de sanciones que tratan de adoptar desde hace cerca de un mes con las reservas de los países más dependientes del crudo ruso, en especial Hungría, Eslovaquia y República Checa.
Además de las medidas contra el petróleo, este sexto paquete incluye otras sanciones como la inclusión de nuevos nombres en la lista de personas y entidades cuyos activos en la UE serán congelados o la desconexión del principal banco ruso, Sberbank, y otras dos entidades del sistema de comunicación financiera Swift. También se cortará la emisión de varios medios estatales rusos.