VALÈNCIA. (EP). El conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, ha asegurado que la nueva propuesta de orden sobre jornada escolar continua que abre la puerta a que las actividades extraescolares puedan ser de pago "flexibiliza" la oferta, tal y como habían pedido asociaciones de madres y padres de alumnos (AMPA), pero "sin excluir a nadie".
El titular de Educación ha realizado estas manifestaciones en relación al borrador que su departamento llevará el próximo jueves a la Mesa Sectorial en el que se introducen modificaciones en la regulación de la jornada intensiva, las más significativas la desaparición de la exigencia de que las actividades extraescolares hasta las 17.00 horas que se deben ofrecer tengan que ser gratuitas, así como el establecimiento de un período de tres años para realizar una nueva votación en un centro sobre el modelo de jornada tanto si el resultado es afirmativo como si es negativo.
Marzà ha defendido que estos cambios pretende introducir "ajustes básicos" para "mejorar el funcionamiento" de la norma. En cuanto al tema de las extraescolares, el borrador de la Conselleria añade un anexo cuya redacción establece que "las actividades extraescolares organizadas en la jornada de escolar fuera de horario lectivo no tendrán carácter lucrativo, serán de oferta obligada para el centro y voluntarias para las familias. La Conselleria de Educación regulará las características básicas que han de cumplir estas actividades y establecerá las medidas necesarias para garantizar que ningún alumno quede excluido por motivos económicos".
El conseller ha explicado que el objetivo siempre es que "ningún niño se quede sin poder realizar la actividad por motivos económicos" y en un principio se pensó que "la mejor manera era poner que fueran gratuitas". "Pero es cierto --ha precisado-- que en la gestión muchas AMPA nos han dicho que ellas sí que tienen la capacidad de poder pagar y eso no implica que se discrimine a los que no tengan recursos".
Por ese motivo, ha proseguido, se le "pega una vuelta" en esa propuesta de nueva orden en la que se regula "de manera que no se quede nadie excluido pero que puedan pagar aquellos que quieran y puedan, siempre que no se haga la actividad con ánimo de lucro, es decir, que no haya un beneficio más allá del pago de las nóminas de las personas que hacen la actividad".
El conseller ha defendido que, de este modo, se conjuga que "todo el mundo tenga acceso sin limitar que las actividades tengan que ser gratuitas explícitamente". "Se abre el abanico para que haya más opciones y, sobre todo, para aquellas AMPA que están de acuerdo en que no se discrimine a nadie, que es lo que nosotros queremos, y que al mismo tiempo decían que podían hacer esa aportación. Que nadie se quede sin poder hacerlas pero con mayor posibilidad", ha aseverado.
Asimismo, el borrador de orden que impulsa Educación prevé que la autorización definitiva de implantación de la jornada se extenderá por períodos de tres cursos académicos renovables siempre que los resultados se ajusten a los mejoras previstas en el plan. El resultado de la votación, tanto si es favorable como si no, tendrá un validez de tres curso académicos.
Marzà ha rechazado que este cambio implique un mayor control de la administración sobre los centros, sino que lo que hace es "ajustes básicos para mejorar el funcionamiento". Así se consigue, ha dicho, que "todo el mundo conozca las reglas del juego y los debates se hagan con la mayor estabilidad posible".